— ¿De qué vas a vivir? — preguntó serio Jooheon.
Ambos iban saliendo de la comisaría después del accidente, lo habían reportado como si fuera un atentando, así que la policía dijo que investigaría. Por otra parte Changkyun acababa de renunciar a todo, se cansó de la gran maravillosa vida que llevaba.
Hace unos momentos había llamado a la empresa para retirarse y romper el contrato, si la empresa solamente iba a hacer el mínimo esfuerzo por protegerlo era mejor para él irse y empezar de nuevo. Jooheon lo miraba constipado, Changkyun no lo entendía, aunque él renunciara la empresa podía ponerlo de mánager de otra persona. Como sea debía ver desde donde empezaba ahora.
Durante los siguientes días fue a la empresa para terminar su contrato, terminó de nuevo en las mismas noticias que pusieron una foto de él besándose con Jooheon en todo Internet, y aunque el CEO le tratara de convencer él ya tenía su decisión muy metida en la cabeza, ese mismo día dejó la empresa, no volvería a trabajar en el área del entretenimiento nunca más. Cuando Changkyun iba saliendo de ese lugar todo se veía tan vacío, el lugar que vió por primera vez había perdido su brillo después de saber que no era más que oro falso, ahora no podía ni si quiera volver a su casa, solo le quedaba esperar a Jooheon porque ahora se estaba quedando en su casa, solo por el momento.
— Espero que tengas un plan. — Jooheon apareció detrás de él. — Yo también renuncié, creí que yo no podía ser tocado por no ser famoso pero se atrevieron a mucho, no quiero seguir en esa clase de sitio, también trataré de trabajar en algo en lo que no dependa de nadie.
Changkyun le recibió con una sonrisa, era bueno tener a alguien en quien confiabas de tu lado. Se daba cuenta que su relación con Jooheon ya había ido más allá que solo lo físico.
— ¿Quieres irte del país? — preguntó Jooheon. — Mi madre vive en España, así que no tendríamos que preocuparnos por el alojamiento.
— ¿Así de la nada?
— No es de la nada, aunque nos quedemos aquí seguirás en peligro, es mejor ir allá. — alegó.
Jooheon tenía razón en cierta parte, quedarse aquí al final tendría también el mismo efecto si un loco como él que los atacó decide hacer algo de nuevo, pero se estaba hablando de ir a un país completamente diferente, cultura e idioma. ¿Realmente podría? Bueno, era todo o nada, debía empezar desde cero, así que aceptaría la oferta.
— ¿y tú? ¿hablas español?
— Podemos aprender juntos, no creo que sea tan difícil, mi mamá aprendió rápido. — Jooheon rió.
Hicieron todo de una vez, no demoraron ni un segundo en sacar sus papeles para irse, y con la mayor discreción que podían tener tomaron su vuelo, su pasaporte y demás, todo debía estar en orden para que su migración fuera totalmente legal y así poder quedarse.
Sorprendentemente la mamá de Jooheon recibió a Changkyun como si fuera su hijo, la señora todos los días se tomaba el tiempo para enseñarle a ambos un poco de español, por unos meses tuvieron que trabajar en restaurantes cercanos, pero eso solo les serviría como experiencia.
Así pasó el tiempo, con una ya mayor compresión del idioma y del lugar, ambos habían decidido abrir una cafetería, algo sencillo de lo cual podrían vivir, nadie era su jefe más que ellos, buscaron el mejor lugar, uno donde podrían vivir y trabajar en el mismo sitio, con un alquiler lo suficientemente costeable. Incluso emocionados comenzaron a elegir el menú con mucha antelación a abrir el local, solo debían promocionarlo.
Pusieron en redes sociales fotos de todo el lugar, todo era combinado de manera estética para llamar la atención del consumidor, por nombre habían decidido algo muy sencillo y sin un significado tan profundo.
Puesta de Sol
Buenas, aquí viene la hora de la reflexión. Oremos hermanos.
En realidad no le metí mucho a este capítulo, porque dentro de la historia no es algo tan importante, ya que todo se trata de la relación de Jooheon y Changkyun.
Solo quería enseñar con lo que escribí en los últimos capítulos que aveces las cosas no son de color rosa, piensas que pueden mejorar pero no, y pues eso bye.
Andaba viendo porno para inspirarme en los próximos capítulos.
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Say so ⇢ Jookyun
Fiksi PenggemarUn flash, muchas cámaras, todas apuntan a mí, no siento vergüenza hasta que nuestros ojos se cruzan. Sus ojos acompañados de su sonrisa anunciaban algo que yo solo sabía, todas esas cosas que hicimos ayer.