Estaba furioso. Nada iba a detenerme. Eso creía...
Iba corriendo, sin para, por toda la ciudad... Pero no encontraba a nadie... Ni tan siquiera demonios.
Estaba vacío, todo estaba vacío. Ni un alma...
Corrí al castillo. Marcus y Agnus me seguían muy por detrás. En el castillo sí había demonios. Empuñando Yamato fui destrozando uno a uno.
Cuando el Salón principal, donde nos encontrábamos, estuvo vacío, oí su voz:
- ¡¡¡¡Vergil!!!! ¡¡¡Ayudame, por favor!!!
- ¡¡Charlotte!!
- Chico... Has matado a mi siervo más... "Leal"... Jajajaja, no importa... He notado que tu legado... Va en camino. Y qué pena que no vaya ni tan siquiera a abrir los ojos, jaja, jajajajaja.
Esa maldita voz... Esa distorsión ronca y metálica... Ahí estaba, Haeresis, su roja armadura resplandecía. Tenía ganas de arrancarle la cabeza... Cortarla en mil cachitos... Pero no veía a Charlotte por ninguna parte...
- ¿Qué pasa? No la encuentras... Jajaja, y no lo harás... Yo, en cambio, disfrutaré matándola...
Entonces no aguanté más.
Salté hacia él, y atravesé su pecho con Yamato. Haeresis cayó al suelo. Me transformé en mi forma demoníaca y cuando estaba a punto de darle el golpe final...
- ¡¡Chico!! ¡No!
Era Sanctus.
La voz de Haeresis sonó por todas partes:
- Oh, cielos... ¿De verdad pensaste que sería tan fácil?
Sanctus me apartó de un empujón. Alejó el casco de la armadura...
Entonces mi corazón dejó de latir.
Era Charlotte quien se encontraba debajo del artefacto demoníaco.
Marcus y Agnus me miraban, petrificados.
- No...
Las lágrimas se apoderaron de mis ojos...
Miré al hombre. El me devolvió una mirada que me transmitía lo peor...
- Juro... Que te mataré... Haeresis... ¡¡Y no descansare hasta que estés muerto!!"
Vergil se quedó callado. Dante no quiso preguntar, así que se durmieron... El hijo mayor de Sparda volvía a tener pesadillas...•••
En esos momentos, cuando Marcus y Vergil se marcharon y se aseguró de que Haeresis ya no estaba presente, Sanctus cargó a Charlotte en brazos. Ella movió la cabeza levemente... El dolor de su pecho... Apenas y podía respirar...
- ¿Por qué le dijiste que ha muerto?
Agnus le miraba, curioso.
- El amor que siente por ella es un gran estorbo. Dudó, al no verla, en atacar a Haeresis. Ahora no dudará.
Los dos hombres se miraban fijamente. Agnus, curioso. Sanctus, con desprecio...
- Prepara la máquina - dijo Sanctus - tenemos un conejillo de indias...
Agnus, repugnado, sentía mucha curiosidad...•••
Nero estaba muy nervioso. Eso lo notaban Trish, Lady y por supuesto Morrison, que acababa de llegar, y al que le contó lo mismo que a las chicas.
- Bueno bueno, así que crees haber visto al fantasma de tu madre...
- Yo... No sé si era un fantasma... dije que desapareció tan de repente como apareció...
- Chico... Podrían haber sido imaginaciones tuyas... El miedo hace que pasen esas cosas...
- ¡¡Yo no tengo miedo!!
Nero se ruboriza al escuchar las risas de las chicas. Y se ruboriza más al mirarlas, ya que aún no se habían puesto nada encima. Al notarlo, ellas salieron corriendo para ponerse algo más que su ropa interior.
- Si... - Nero se tapaba los ojos, con vergüenza ajena - al menos hoy llevaban sujetador...
Más tarde, estaban los cuatro juntos, hablando ya más tranquilos.
- Dime, Nero - dice Lady - ¿Cómo te va con Kyrie? ¿Ya han...?
- ¿Qué? No. Digo, sí. Digo... ¿A ti qué te importa?
- Jajajaja, eso es que no.
- Eso es que no te importa. Yo quería hablar sobre mi madre, no sobre mi vida sexual.
- Ya claro - dice Trish - que picaro, el nene...
- Bueno, bueno, señoritas - habla ésta vez Morrison - todos sabemos que ninguna de las dos ha tenido vida sexual y ahora que Dante no está, menos podrán tenerla... Dejemos al chico que si puede en paz.
- Oye, ¿y qué tiene que ver Dante? - dice la chica de los ojos bicolor.
- Yo solo digo...
Entonces Nero se levanta. Se dirige a la puerta, y, ya a su lado, dice:
- ¿A qué esperan? Nos vamos a Fortune.
- Oh - dice la rubia - ¿Morrison, nos dejas tu coche?
- Por supuesto que no, alguien tiene que cuidar del local, y mi nena no viaja sin papi.
Las chicas, después de mirarle con cara de "ojalá te..." siguen a Nero, que estaba llamando por teléfono.
- Si... Muchas gracias, ¿Qué? No, no te echaba de menos... Bueno, quizá un poco... Si no fumaras... Ya hablaremos de eso...
Repentinamente, la furgoneta de Nico cayó justo a su lado.
- ¿Por qué no me dices eso a la cara?
Nico, saliendo de la furgoneta con un cigarrillo en la mano, se acerca a Nero, echando el humo del tabaco en su cara.
- Nico - dice Lady - Creo que todos estamos de acuerdo con que no fumes en nuestra presencia.
- Oh, lo siento excelencia, así lo haré, sus magestades...
Entonces les da un abrazo, primero a Lady después a Trish, y después, no sin antes poner cara de tonta, a Nero.
- Bueno, a Fortune, no. Venga, venga, que mi tiempo es oro...
Los tres, sorprendidos, suben a la furgoneta.•••
En Fortune, Nero y Lady están buscando "algo" en la casa abandonada, mientras Trish y Nico se quedan vigilando que ningún demonio se acerque.
- ¿Crees que de verdad podría ser tu madre? - dice Lady - Viste a una chica, como de dieciséis años, no a una mujer de treinta y tantos, o cuarenta y tantos... No creo...
- No lo sé, Lady, por eso estamos buscando algo en ésta casa.
Después de unos minutos de silencio, Lady vuelve a hablar:
- Oye, y... ¿Cuando piensas hacer con Kyrie...?
Un ruido la interrumpe, pasos, caminando lentamente por el piso de arriba.
Nero señala con las manos que guarde silencio. Se quedan delante de las escaleras, esperando a que la persona se dirija a la única salida visible.
Después de veinte minutos, deciden subir.
- No lo entiendo... No hay nadie... - dice Nero.
- No pudimos imaginarlo los dos... - dice la chica.
Después de examinarlo todo, Nero encuentra una habitación, que, al igual que todo en la casa, estaba impoluta. La cama estaba sin hacer, y había una notita en la mesilla de noche:"Voy a salir un momento, no te preocupes si llego tarde, Lottie, sólo voy a buscar... Lo que he venido a buscar.
Vergil."
Lady, mirando al chico, le dice:
- Creo... Creo que ésta si fue la casa de tu madre...Mientras tanto, Trish, aburrida porque Nico se había dormido y no ocurría absolutamente nada, ve cómo una silueta camina hacia el lado contrario de donde se encontraba.
- Eh... ¿Chicos? ¿Nero?
Al no recibir ninguna respuesta, decide salir tras aquella misteriosa persona.
Cuando casi la alcanza, ésta se da cuenta de que le seguía, y sale corriendo hacia las calles más oscuras.
Trish da un salto y se coloca delante de ella.
- Oye, tú, ¿qué hacías en esa casa y cómo has salido de ella sin que mis amigos te vieran?
- Esa es mi casa - contesta una voz joven, de chica - ¿Qué hacen tus amigos en ella?
- ¿Tuya? Esa casa lleva veintiún años abandonada.
- Yo...
- ¿Tú... Eres la chica de la historia? No puede ser, eres muy joven...
- Yo... Yo soy la madre de tu amigo, Nero...
Trish, sin sorprenderse mucho sonríe a la chica. Esta le devuelve una mirada triste...
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La historia de Vergil y Charlotte
FanfictionTenía la idea de hacer una historia sobre Vergilxla madre de Nero, y encontré algunas imágenes de un fanart sobre esto y el nombre de ella era Charlotte 《Lottie para los amigos》. Espero que les guste. ¡Saludos! En esta historia ambientada después d...