A tu lado (Narukaka/Kakanaru)

Capítulo 24

Se dirigía sigilosamente por las calles. No había nadie, salvo algún que otro policía que rondaba la zona. Al ver esto, decidió subirse a los tejados; de esta manera, podría ir más rápido y sin tener que cruzarse con nadie. 

Una vez salió del distrito, se fue en dirección hacia las rocas de los rostros de los antiguos Hokage. Sabía que quizás todo aquello no iba a salir bien, o que probablemente no volvería a ver a Kakashi. Pero en su interior necesitaba hacer algo.

 Mientras iba corriendo, recordó las palabras de aquel hombre tan misterioso.

Flashback

El enmascarado se volvió a materializar para darle un golpe en el estómago lo suficientemente fuerte como para tirarlo contra la pared opuesta.

-Sois demasiado débiles.-dijo por último para después desaparecer ante sus ojos.

-¡Itachi!-el rubio fue en su ayuda.

-Estoy bien,no te preocupes.-escupió algo de sangre y se levantó. 

Algo de lo que el azabache no se percató fue que el enmascarado le dirigió unas últimas palabras al rubio.

-Te estaré esperando en los rostros Hokage.

Fin del flashback

Sí. Aquello fue lo que le hizo tomar esa decisión. No se lo dijo a nadie, obviamente. Sabía que esas palabras iban dirigidas específicamente para él y que no quería que nadie más se viera involucrado. Quizás esto haría disminuir la confianza que tenía con Kakashi o que este le juzgue de sobremanera, pero no quería ver a otros metidos en sus problemas.

Igual que hasta entonces a nadie le importaba su vida, no iba a dejar ahora que todo el mundo le ayudase sólo porque no querían que el Kyubi se vuelva loco y se apodere de él. No sabía lo qué le iba a esperar. Era un mensaje corto, pero muy amplio. Podría pasarle cualquier cosa, y más ahora que tenía aquel sello.

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Se subió en la parte más alta de las rocas. Miró en todas direcciones para ver si lo veía, pero no había absolutamente nadie. Quizás era una trampa y en realidad iban a por Itachi o Kakashi. Pero después de razonarlo bien, era imposible. 

Lo que Akastuki quería era el Kyubi, ¿no?Es decir, que sólo les importaba él. Por lo tanto, los demás estarían a salvo.

Estuvo un rato más esperando, mientras miraba la preciosa y brillante luna llena que se alzaba en el cielo estrellado.Todo estaba tranquilo hasta que el enmascarado dio señal de vida.

-Vaya. Al final sí que has venido.-Naruto se giró bruscamente.- No me esperaba menos de ti, Naruto.

El rubio frunció el ceño y apretó los puños. Sabía que en aquella situación estaba completamente desprotegido. Lo único que había venido a hacer era a hablar con aquel tipo.

-¿Qué es lo que quieres?

-El Kyubi. Ya te lo he dicho antes.-se fue acercando poco a poco.- Mi plan si ti no estaría completo.

-¿Quién eres?-retrocedió un par de pasos.

-Oi,oi. Aquí las preguntas las hago yo.-hizo una breve pausa para suspirar.-Mira, hagamos un trato. Tú me entregas tu poder, yo hago mi plan y nadie más sale herido.

-No creo que salga muy equilibrado.

-¿Por?-dijo soltando una pequeña carcajada.-¿Qué te hace pensar eso?