MIÉNTEME

Capítulo 9

-¿Creiste que no iba a enterarme? – Lo aviento a la cama - ¡Mírame cuando te hablo! ¡¿Lo creiste?!

-¡Si! ¡Maldita sea! ¡Creí que no te enterarías! – Me mira con los ojos muy abiertos. Sus pupilas están dilatadas. Signo de que ha estado bebiendo o quizá se metió alguno de sus “dulcecitos” – Lo siento – Baja la mirada.

Río histericamente. Paso mi mano entre mi cabello. Estoy furioso. Demasiado para pensar con claridad

– Eres tan fácil de convencer. -Camino hasta el borde de la cama - Mientras me la paso trabajando con tu padre tú te comportas como una puta yéndote de fiesta con tus amiguitos. Sabes, eso me da igual. -Hago una pausa -Si quieres irte a la mierda y destruir tu vida ¡Hazlo!- Grito -Pero irte a coger con tu ex novio – Trato de tranquilizarme – Sobrepasa todos los límites. – Se recarga sobre la cabecera de la cama.

-Basta SeHun. No sabes lo que estás diciendo. - Suena tranquilo.

-¿No? Entonces explícame por qué vino a dejarte. O mejor dime ¿Por qué diablos estabas besándote con él? ¿A dónde fuiste después de salir de ese antro? Son las dos de la madrugada y tú saliste de ahí a las diez ¿Dónde estuviste? – Me mira sorprendido pero no dice nada.

-¿Cómo sabes dónde y a qué hora salí de ese antro?

-Lo sé y punto. No has respondido. – Me acerco  más a la cama.  Lo suficiente para verlo asustado.

-Es tarde y estoy cansado. -Desvia la mirada - Además tú tienes que ir a trabajar y yo tengo que ir a la universidad. – Se pone de pie y camina a la puerta– Hablamos cuando estés más tranquilo – Lo alcanzo y tomo su brazo.

- ¿Ahora te importa la universidad y mi trabajo? No me hagas reír, ¿Dónde estabas? – Pregunto mientras aprieto su brazo. Se gira a verme con tanta tranquilidad que hace que me enfurezca más.

-SeHun. Estoy cansado. Hablamos mañana. Por favor.

-¿Tan cansado te dejó?- Lo jalo apretando más mi agarre. Se voltea y su mirada ha cambiado. Ya no es de sumisión. Hay enojo y frustración. Se jala lo suficientemente fuerte y lo suelto.

- ¡Te dije que no quiero hablar! - Alza la voz - Pero ya que estas “tan curioso” por saber, te lo diré. Sí. Me fui a coger con él en su auto. Lo hicimos más de una vez y tuve tanto placer que quise irme y pasar la noche con él. “Lo amo” y sentir sus labios, sus manos y su cuerpo tocando el mío, me hacen sentir vivo. Quise borrar cada uno de tus besos cuando me besaba. Quise borrar cada recuerdo de ti tocando mi cuerpo. Él no tiene que forzarme a nada porque siempre ha sido él. Cada vez que me tocas imagino que es él. Es la única forma en que soporto tu presencia. ¡Te odio!  Y odio esta situación. Solo quiero que termine pronto. Quiero que te largues y hacer de cuenta que solo fuiste una pesadilla. - Su voz se ha desvamecido - Querías escucharlo. Ahí lo tienes. Ahora déjame tranquilo.  – Se voltea y camina hacia la puerta.  Antes de que salga vuelvo a  alcanzarlo. Lo empujo sobre la cama y me coloco encima de él colocando sus manos a cada lado de su cabeza.

-¡Suéltame! Me haces daño, ¡Suéltame! SeHun. Me haces daño – Forcejea.

-¿Hacerte daño? No sabes cuánto daño puedo hacerte. Espero que tu cansancio haya valido la pena.

-¿De qué hablas? ¡Quítate! -Sigue forcejeando.

- Ya que has decidido dar tus servicios gratis y lo has pasado bien. Espero recibir uno también. Esa lengua tan floja me ha dado algunas ideas de cómo hacerte pagar cada una de tus palabras - Muerdo su cuello. Un grito ahogado lucha por salir - Y sabes - subo a la altura de sus ojos – Se acabó el trato. - Sus hermosos ojos se abren en todo su esplendor -Prometí no tocarte y a cambio de eso te pedí que mostraras respeto mientras viviéramos esta farsa. Dado que tú has roto esa parte, no veo caso de seguir respetándolo.