Él idiota al que amo.

¡No es una cita!

~Kirishima~

Sabe bien que esto no es una cita ni nada similar, es únicamente un favor que un amigo le pidió, bueno no en realidad, no está seguro de si puede llamar a Bakugo amigo, es decir esto más bien es para compensarle todo lo que le había ayudado durante la fiesta, y en dicho caso también debe de hacer lo mismo por Yayorozu, era lo más lógico y justo. Sabe todo eso y aun así decide arreglarse un poco, eso hace que termine corriendo pues su reloj ya marca pasados quince minutos más a la hora acordada, le queda muy poco para llegar y es un muy buen corredor así que llega antes de que sean las 10:20.

En cuanto ve al chico de rubios cabellos se queda un poco atolondrado ante la imagen del chico, solo lleva unos simples jeans negros un poco ajustados, una camisa de manga larga de rallas bajo una más holgada blanca, lo que más luce en él es su cara completamente enojada sosteniendo su celular, quisiera pensar que lo está esperando por algo más que solo un compromiso pero sabe que no es así, tal vez es por ese momento y ese simple pensamiento en el Kirishima nota que podría tener un pequeño crush con aquel malhumorado chico.

– ¡Hey! –dice acercándose al fin. – ¡De verdad lo siento! –habla tan rápido que esas cuatro palabras parecieron una.

–Te tardaste casi 20 minutos –le muestra su celular que marca cada uno de los 17 minutos en los que corrió, se siente exhausto y suda demasiado. –Te ves como la mierda ¿Cuánto corriste?

–Jaja nunca mides tus palabras ¿No?

Sin dejarlo caminar Bakugo empieza a caminar hacia la salida, Kirishima se limita a seguirlo, a pesar de que se supone que es el guía en aquella encrucijada, en cuanto encuentran una tienda Bakugo entra y solo le dice "Espera" a lo que le obedece por alguna razón, Kirishima sabe él porque está allí, es únicamente porque le es útil por ahora, pero es muy probable que después de hoy no vuelvan a verse.

–Ten –lo saca de sus pensamientos cuando Katsuki empuja una botella de agua fría contra su frente.

– ¡Vaya, viejo gracias! ¿Eh, cuanto te debo?

–Déjalo así, idiota, solo parecía que si te dejaba así te ibas a morir –Kirishima no sabe cómo reaccionar ante las inesperadas muestras de amabilidad acompañabas de palabras tan agresivas, es como si alguien le arrojara unos chocolates envueltos en un guante de box.

Caminan dentro de los amplios pasillos de la facultad en camino hacia la cancha de baloncesto.

– ¿Seguro que es por aquí?

– ¡Ten un poco de fe hombre!

Después de atravesar la cancha aparece un pequeño pasillo en el que dan vuelta para terminar de llegar a unas escaleras bastantes apretadas y un cuarto que parecía todo menos una oficina escolar, ante la mirada de irritación de Bakugo es Kirishima él que toca a la puerta y la abre.

–Buenos días, disculpe ¿Es aquí la oficina de organizaciones sociales? –una mujer de avanzada edad es la que atiende el tan diminuto despacho.

–Sí jovencito ¿Qué necesita?

Kirishima le lanza una mirada en modo "te lo dije" al chico rubio mientras le da un leve empujón para que pase, mientras le dan los papeles correspondientes, la mente de Kirishima solo piensa "bueno, está bien, eso es todo" puede sentir cada uno de sus pasos de regreso al salir del lugar ¿Como el que siempre pensó era un extraño y largo camino ahora ya no lo parecía tanto?

–Vaya eso fue rápido –recibe lo que cree que es un gruñido pero no podría decirlo con seguridad. –Me sorprendió tu forma de hablar, era como ¿Elegante?

–Trata de vivir con cola de caballo y que no se te pegue esa mierda.

– ¿Por qué le dices cola de caballo? –solo recibió una mirada que interpreto como un "¿Estás idiota o qué?" –Bueno es que a mí me dices pelo de mierda, creo que tus apodos se basan mucho en el cabello.

–Si quieres te lo cambio a idiota.

–De alguna forma suena peor –están peligrosamente cerca de la estación. –Oye, perdón por haber llegado tarde.

–Es igual, no tuvimos ningún problema.

–No, es que no sería masculino de mi parte dejarlo así –es probable que hoy sea el último día que lo vea ¿Estaría mal si trata de que dure un poco más? – ¿Comiste algo?

– ¿Por qué mierda quieres saber?

–Bueno yo no así que al menos déjame invitarte algo, por dejarte esperando y eso.

Es muy posible que está sea su última vez bromeando como si se conocieran de hace años, el último momento de la compañía del otro, también es posible que Bakugo simplemente rechace su invitación y se vaya, es muy probable que no quiera verlo más después de hoy y que simplemente se vaya a su casa después de obtener lo que deseaba, pero a veces solo se necesita una sola palabra de otra persona para que esas dudas se disipen y en esa ocasión fue un simple. "Bien" pronunciado de la boca del rubio para que Kirishima se animara por completo una vez más, no pudo evitar sonreír de lleno de esa forma que es tan natural para él y aún no sabe que fascina al malhumorado chico.

N/A: Esa es una dirección real, así se llega a servicios de seguridad de computo en mi facultad, está bien raro.