Miento [Crenny]

[39]

@TatankaWalker gracias a tí, ésta idea nació ♡ xD

No lo sé, yo también quiero un felices los 4 (?)

—Craig... Ah, sí amor, dame más, lo quiero ya...

—No seas impaciente Tweek, ¿Qué pensaran nuestros invitados?

—A ellos no les importa, ¿cierto Stan?

—Por supuesto que no Tweek, ellos pueden seguir en lo suyo, ¿Verdad Kenny?

—Sí...ah, Stan...

Por fin tenía a su rubio donde lo quería; Había pasado tanto tiempo que sin duda gozaría cada maldito minuto en que lo tuviera entre sus brazos. Observó frente a ellos, la cama era lo suficientemente amplia como para abarcar perfectamente a las dos parejas; Tweek estaba boca abajo, con su cadera alzada pero su cuerpo aun cubierto por una bata blanca, Craig le acariciaba los muslos con lentitud, pero algo ahí no cuadraba, claro... sus ojos estaban clavados en el rubio contrario, su Kenny...

Lo apegó mucho más a su pecho, su mano derecha fue hasta el delicado cuello, lo apretó y le hizo alzar la mirada.

—Ah, Craig...

Sin saber siquiera en qué momento, fue apartado de su lado; Craig miró a Kenny por breves segundos antes de devorarle la boca completa. El rubio pasó sus brazos tras su cuello, apegándose más y más a él, su delicada ropa interior de encaje se perdía entre la piel contraria. Se acariciaban una y otra vez sin separarse. Craig le acostó con delicadeza, y Kenny gustoso le recibió con las piernas abiertas; Y sin ninguna prisa, Tucker sonrío para ir bajando lentamente, hasta realizarle un perfecto oral al encantador rubio que gemía gustoso en la cama.

— Es injusto que solo ellos se diviertan... ¿no lo crees Stan?

— ¿Q-que dices?

Y ahí estaba Tweek, deshaciéndose de aquella estorbosa bata blanca, dejándole su delicado cuerpo desnudo.

—Tócame Stan, tócame como mi esposo no lo ha hecho en un largo tiempo...Soy todo tuyo ahora...

—Tweek...

Miró a su lado, donde Kenny estaba gimiendo una y otra vez el nombre de Tucker, mientras éste lo embestía con fuerza, parecían disfrutarlo... Y fue ahí que mandó todo al carajo. Atrapó la cintura de Tweek, abrazándole con fuerza, dejándole sobre su cuerpo, y sin esperar más, se enterró en lo más profundo.

— ¡Ah, Stan, sí!

Comenzó a guiarlo, arriba y abajo, con rudeza, viéndole fascinado como lo montaba, gritando su nombre con pasión sincera.

— ¡Craig, sí, más Craig, ah!

—Stan, ah, más rápido... estoy a punto de... ¡Ah!

Y con eso último, Stan Marsh despertó.