Remains {Louis Tomlinson Fan Ficción}

Capítulo nueve.

 

 

Narra Diane

“¿Por qué debería hacerte caso después de que me dejaras plantado ayer?”

Tardé en procesar la pregunta, y cuando lo hice no conseguí encontrar la razón por la cual me acusaba de haberlo plantado. Si no habíamos quedado ¿cómo narices iba a faltar a la supuesta cita?

-No te dejé plantado, principalmente porque no quedé contigo ayer –solté no muy convencida. Ahora me atacaban las dudas.

Verifiqué lo que acababa de decir mentalmente. Estuve con el móvil todo el tiempo, incluso cuando salí con A.J. y sus amigos le hice más caso al teléfono que a ellos. Si me hubiera llamado o escrito, lo habría visto.

Seguramente me estaba vacilando, se estaría inventando una excusa para salir ileso por dejarme tirada. Sí, sería eso.

-¿Cómo puedes ser tan falsa? –bramó indignado-. Te mandé un mensaje por la tarde, y sé que lo leíste porque me aparecía el jodido doble check azul, pero me ignoraste. Si ibas a pasar de mí por ir a chupársela a otro no haber aceptado quedar conmigo. O al menos haber tenido la decencia de decirme que no ibas a aparecer. ¡Estuve casi una hora esperando por ti, joder! –chocó la espalda contra la pared, cruzó los brazos en su pecho y dejó de hacer contacto visual conmigo.

-No recibí ningún mensaje –Louis sonrió sarcástico-. Lo digo en serio.

-¿Por qué me mientes?

-¡No te miento! –busqué en mis bolsillos el móvil, iba a demostrarle que no tenía ningún mensaje suyo. Gemí frustrada al recordar que no lo llevaba conmigo-. Me he dejado el móvil dentro –rodeé uno de sus brazos con los dedos y tiré de él suavemente-, ven, voy a enseñarte que tengo razón.

Él se mantuvo rígido, no avanzó ni un paso.

-Tengo que ir a cambiarme.

Lo miré de arriba abajo, el traje que había llevado puesto durante el photoshoot le quedaba como anillo al dedo. Parecía un ejecutivo, con su porte autoritario y una mirada intensa en la que me encantaría perderme mientras me penetra una y otra vez y… Joder, llevar tanto tiempo sin follar empezaba a pasarme factura.

-Ya te cambiarás luego.

-No, he quedado con alguien –dijo, refiriéndose claramente a la modelo.

-Que le den, esto es más importante –tiré de él otra vez, sin éxito-, vamos, Louis, no seas un crío. Además, ya te dije que es lesbiana.

Me miró serio, luego suspiró y relajó el cuerpo. Avanzó un paso y lo tomé como un alentamiento a que lo llevara de vuelta a la sala en la que habíamos hecho la sesión de fotos.

La sala estaba vacía, ya habían recogido casi todo a excepción de un par de cosas que necesitaríamos para más tarde.

Le hice caminar hasta una mesa sobre la que había dejado mi móvil, lo desbloqueé y rápidamente le enseñé mis últimas conversaciones.