capitulo 35

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AL CARAJO TODO

MONICA

Desperté de sueño hace tiempo que no dormía tan bien, cuando abrí los ojos me fije a un lado mío donde debía de estar Maxwell pero no estaba, fruncí el ceño y me pare para buscarlo, busque en el baño pero no estaba, me dirigí al closet y tome una camisa de Maxwell ya que no quería bajar desnuda, tal ves estén mas personas.

Cuando estoy bajando las escaleras me topo con un olor que hace que me de hambre, al llegar a la cocina me encuentro a Maxwell cocinando solo en bóxer, me acerco y lo abrazo por detrás.

El se voltea y me besa la cabeza.

-No te tenias que despertar aun, yo pensaba en subirte el desayuno a la cama- se separa de mi.

-Lamento arruinar tus planes pero por lo que veo esta cocinando, yo no sabia que cocinaba bien señor Maxwell, espero que este no sea un plan suyo para envenenarme y parezca que es un accidente de intoxicación- el me mira perversamente.

- No es mala idea, pero acéptalo se ve bien y no es lo único que se hacer bien- se acerca a mi.

-y ¿Qué sabe que mas sabe hacer bien? -el se inclina dejando nuestros labios rosándose.

-Te lo demostrare pero no ahorita ya que vamos a desayunar- besa mis labios pero se separa para seguir cocinando, yo solo me siento en la mesa y lo espero.

-Su desayuno esta listo mi bella novia- trae en cada mano un plato y se va para luego traer una jarra de lo que creo es jugo de naranja y vasos. se sienta a mi lado.

-Se ve delicioso deberías de haber estudiado para chef y no administración- el asiente, haciendo una mueca.

-Gracias a mi bella novia descubrí mi verdadera vocación, lastima que sea hasta ahora- empezamos a comer y de lo rico que esta no pude evitar gemir, o tal vez lo hice para provocarlo eso nunca lo sabrá.

-No hagas eso- advierte Maxwell, dejando de comer para mirarme.

-¿Hacer que?- me hago la tonta, le sonrió con inocencia.

-Tu sabes que, para la próxima que lo hagas no me importara hacerte mía en esta mesa- me rio, pensando si hacer ese ruido denuevo.

-Eres todo un caso, pero no estaría mal- digo sin mirarlo pero con una pequeña sonrisa, luego lo vi y negué y empecé a comer denuevo.

Luego de haber comido nos dirigimos al baño a lavarnos los dientes juntos, el tenia todo planeado ya que hasta compro un cepillo nuevo para mi, me quedo con la duda de desde cuando estuvo planeando esto.

-Y ¿Cuándo nos vamos?- pregunto enjuagando mis boca.

-Ya se lo dije señorita Mónica pero usted no comprende, así que se lo repito por ultima vez la he raptado, la tendrá aquí hasta siempre, pero como se que probablemente me termines atando aquí y yéndote sin mi a tu trabajo por que eres adicta así que te raptare hasta que termine el fin de semana, sin peros- el termina de enjuagar su boca, yo lo hice mientras el terminaba de hablar y probablemente tenga razón, terminaría atándolo mientras que duerme y me iría a el trabajo y volvería por el hasta la otra semana para castigarlo así que tomo una buena decisión.

-Ahora vamos a bañarnos- dice, acercándose a mi.

-Yo primero- el niega.

-Juntos- dice acercándose aun mas, quedando juntos.

-No seas tímida ya e visto cada parte de tu piel- me quita la única prenda que cubre mi desnudes, sacándola por mi cabeza.

-Eres lo mas hermoso que he visto- analiza cada parte de mi cuerpo con detenimiento pero yo no me avergüenza es mas me gusta y me hace sentir segura como me mira.

Se quita el bóxer dejando a su amigo libre el cual se despertó muy contento.

-Todo esto es tuyo y siempre lo será- se señala a el mismo, cuando ve que me lo comía con la mirada.

Me carga de un movimiento haciendo que enrolle mis piernas en su cintura, me besa mientras se dirige a la ducha, siento como la lluvia artificial cae sobre nosotros pero eso no es impedimento para dejas de besarnos, el mete su lengua a mi boca en donde comienza una batalla con la mía.

Me apoya contra la pared haciéndome gemir por lo frio que se encuentra, el me aprieta con una mano la nalga derecha pero con la otra se dirige a mi pecho donde me da caricias y pellizca mis pezones ya erectos haciéndome gemir mas yo paso mi mano por su espalda y la aruño haciendo que el gruña, deslizo una mano su amigo pero el me detiene dejándome de besar y mirando mis ojos.

-Eres traviesa pero aun no- me baja y toma un frasco de shampoo y lo coloca en mi cabello dándome masajes yo repito la misma acción, y así nos la pasamos bañándonos mutuamente, cuando terminamos salimos secándonos unas toallas.

-Te juro que no me cansaría de bañarme todos los días de esta forma- me seca el cabello.

-Al carajo todo- digo para besarlo bruscamente a lo que el tarda en reaccionar unos segundos pero termina correspondiendo a mi beso, nos dirigimos a la cama donde el me besa el cuello y baja por mi pecho repartiendo besos y da una pequeña mordida a cada pezón bajando mas su camino de besos hasta mi ombligo hasta llegar a mi monte de venus me mira a los ojos mientras abre mis piernas bruscamente para después meter su cabeza en medio.

-Desde que te volví a ver e querido hacer esto- lame mi botón y lo succiona lo que me hace arquearme y gemir pidiendo mas, sigue lamiendo mientras mete dos dedos en mi haciendo que ponga mis manos en su cabeza haciendo mas presión.

-No pares- repito mientras gimo el es un experto en esto ya que me da la corrida de mi vida con solo su lengua y agiles dedos, el es un dios del sexo pero probablemente nunca se lo diré ya que e le elevara el ego mas de lo que ya esta.

-Eres exquisita y lo mejor es que estas muy mojada lista para mi- dice lamiendo sus dos dedos los cuales saca de mi interior.

-Y ¿ sabes que es lo mejor?- niego aun aturdida- que eres solo mía.

-Y que esto apenas esta comenzando- dice parándose para darme un beso cargado de amor y deseo.

Incítame a pecarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora