Enero 1 2:26 p.m.
El almuerzo/comida apenas estaba siendo servido por las mujeres de la casa, casi todos estaban ya sentados, pues aún algunos atendían la zapatería familiar y otros apenas salían de sus habitaciones (ya le había dicho que en diciembre es cuando los horarios de sueño más se distorsionan?); Lo que importa ahora no son los protagonistas si no la rubia quien está con su novio, fuera de la casa pues recibieron la llamada que habían olvidado que recibirían.
Los maestros estaban satisfechos con los trabajos y proyectos que Hiro entregó, algo desordenado pero a tiempo, raro sabiendo como es que trabajaba el pequeño genio; pero las clases se reanudarían y claramente no querian darle un trato especial aunque fuera el más joven de la universidad, así que pedían que cuanto estás empezarán tenerlo presente en sus aulas, claramente ambos aseguraron que así sería ya que igualmente la rubia tenía que volver a su rutina de una vida doble, y el Hamada mayor tenía que volver a la empresa, el problema será decírselo ya que habían notado como disfrutaba estar sin ocupaciones y acompañado del Mexicano, aunque al principio su relación parecía ir de mal en peor de un momento a otro vieron como formaban lazos y su amistad florecía, además era la única que Hiro había tenido por su cuenta no querían quitárselo.
Así que decidieron dejarlo para después, sabían que tenían que irse pronto pero no querian agobiar al menor y hacerle pasar un mal día, por lo que esperarían hasta la noche para decirle sobre la vuelta a casa.
Ya todos se encontraban sentados comiendo tranquilamente mientras algunos de los adultos se quejaban por la resaca y eran regañados por mamá Elena pues "no eran un buen ejemplo para los niños" ya que incluso Abel y Tadashi fueron convencidos de beber alcohol pero no en exceso como sus tíos y abuelo y gracias a eso tenían una resaca con menor intensidad; aun así la plática era tranquila, centrándose más en los propósitos que se pusieron y el como ansiaban volver a ver a sus amigos de la escuela, ese mismo tema se desvío a la pregunta que la pareja venida de San Fransokio tanto estaba evitando
¿Chino...tu volverás a la escuela cierto? -pregunto Miguel con un pequeño tono de decepción
Eeeem, en realidad no lo sé -contesto mientras volteaba a ver a Honey y a su hermano quienes desviaron la mirada a su plato ya vacío- lo haremos no? -esta vez lo pregunto con un poco de tristeza en su voz-
Hiro sabías que algún día volveríamos, no planeamos mudarnos sabes? -intento alegrarlos su tía Cass-
Lo sé pero, no había tomado en cuenta que sería tan pronto -se quejó evitando que sus ojos llorosos pasarán a dejar caer lágrimas, no quería despedirse de Miguel- y justo cuando todo comienza a ir bien...
Ya genio no te pongas así aún quedan unos días para irnos -esta vez hablo su hermano-
Pero aún así no es tiempo suficiente! -hizo un pequeño berrinche-
Hiro...lo siento pero ya está decidido -esta vez Honey hablo con seriedad, no quería ver a quien consideraba su hermanito menor de esa manera-
Claro para ustedes es fácil! Ustedes no se quedarán sin el otro cuando regresen! -ok no pensó bien lo que dijo y su cara se torno roja en unos segundos, agradecía que solo su familia lo escucho, y que los Rivera muy apenas entendían un inglés básico, cuando noto la cara de sorpresa en su tía, hermano y cuñada salió corriendo lo más rápido que pudo de ahí siendo perseguido por un Miguel muy pero muy confundido y nada conformista con los chismes a medias-
[…]
Las calles del pueblo estaban casi vacías, pues a inicios de enero nadie tiene dinero para ir al mercado, si quiera ganas de salir a tomar aire fresco, así que ni a Hiro ni a Miguel les importaba ir corriendo como si estuvieran en una pradera, Hiro ya tenía una mejor condición debido a ser un héroe y Miguel se estaba cansando de perseguirlo, hasta que por obra del espíritu Santo o a la enorme coincidencia de que alguien estuviera en medio de la calle como si de estar en su casa se tratara hizo caer a Hiro pues este no alcanzo a esquivar al chico, quien estaba hablando por teléfono.
¡Hiro! -llego Miguel hiperventilando- ¡no vuelvas a correr así chino! Casi haces que se me salga un pulmón -exagero mientras le extendía la mano-
Si yo también estoy bien gracias -se escucho la voz del chico con quién el mayor choco, sip era nada más y nada menos que Marco de la Cruz, con solo ver cómo Miguel reía nervioso y le extendía su mano la sangre de nuestro niño prodigio hervía- gracias bombón -coqueteo como siempre- y tú ten más cuidado güero desabrido
Yo?! Tú no deberías estar parado en medio de la calle como un poste enano engreído! -contesto Hiro poniéndose frente a Marco, mirándolo cono si quisiera retarlo a pelear-
Chicos basta, no empiecen con sus peleas, por favor -los miro con ojos de cachorro, esos que les haces a tus padres para que te den lo que quieres haciendo que ambos solo suspiran con resignación- bien -sonrió de nuevo- y que haces fuera de tu casa Marco? -pregunto para mantener a Hiro cerca y no tener que volver a perseguirlo
No tenía ganas de escuchar los regalos de mis tías, papá y sus hermanos se pusieron muy mal anoche -menciono rodando los ojos-
Uff pues creo que tú familia no es la única -miguel se rasco la nuca y sonrió nervioso, no era de hablar sobre su familia a sus espaldas-
_Igual que todas las familias de este pueblo_ -susurro un nipón bastante molesto de la supuesta "cosa en común"-
Ya mamón no empieces de amargado -lo reto el oji-ambar-
Quieres que empiece imbécil?! -si Hiro tenía muy poca paciencia sobretodo con alguien que le coqueteaba a lo que obviamente era suyo-
Y eso demuestra que si evolucionamos de animales -una cuarta voz se escuchó, Dayana había llegado a calmar las cosas- a ver ¿qué te traes chino?
Yo?! Pues el idiota este me saca de mis casillas! -dijo apuntando a Marco-
Oye genio ¡a mí no me apuntes! Igualado este -esta vez marco comenzaba a ser algo irritable
Ok basta o les juro que a los dos me los agarro a putazos -sentencio la morena y callo a ambos- Marco si ya sabes cómo es pa que le andas metiendo dedo a la llaga, Hiro acá somos de cabeza dura si nos la tiras te la hacemos de pedo -ambos suspiraron resignados, sabían que tenía razón así que solo se cruzaron de brazos y fueron a una banca cercana
_Oye Migue_ -susurro la chica a su amigo- _por que andabas persiguiendo al chino hace rato?_ -pregunto pues los había alcanzado a ver, como se seguían por el pueblo-
Cierto precioso, ¿por qué se andaban persiguiendo? -y ahí estaba de nuevo el imprudente de Marco, llamando la atención de todos-
Ugh que orejotas te cargas ¡Metiche! -le regaño "su bombón"-
Ya lo conoces, ¿nos dirás? -fue el intento de Dayana para saciar su apetito de chismes-
Yo...volveré a casa en unos días, y bueno probablemente no vuelva - contesto el mayor, haciendo que las caras de quienes lo rodeaban cambiarán a tristeza, excepto Marco quien vio una oportunidad con Miguel pero ese es otro tema-
Cierto chino... En tan poco tiempo nos olvidamos de que no eras de aquí y en algún momento volverías a tu hogar -suspiro la morena con la mirada gacha-
Pues supongo que el tiempo pasa rápido cuando te diviertes -hablo Marco, todos voltearon a verle pues no esperaban ese comentario de su parte- que tal si aprovechamos el tiempo ¿que queda les parece? -propuso con una sonrisa, no le agradaba Hiro pero no quería ver a sus amigos decaídos, además así se ganaba el corazón de su moreno-
Me parece genial Marco! -hablo Miguel abrazándolo- ¡vamos a disfrutar esta semana! -declaro para tomar al nipón y a su amiga e ir al río y a todos los lugares increíbles que conocía-
Y así fue, los cuatro niños salían diario a jugar, hablar o simplemente explorar los exteriores del pueblo o lugares prohibidos de este; a los Hamada no les importaba y de hecho alentaban a los primos de Miguel a acompañarlos, pero a los Rivera no les gustaba que pasaran tanto tiempo solos (Hiro y Miguel, o ambos con Marco) aún así no querían arruinar los últimos días de la familia en el pueblo.
Y aquí está un capítulo...ahora comienza la separación de nuestro dúo dinámico que pasará(?
Descúbrelo en el siguiente capítulo >:3 ahre bueno espero les haya gustado y pido perdón por las faltas ortográficas
No olviden comentar y votar Dulce se despide bais :3
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No tengo tiempo para el amor
FanficEran adolescentes, sin el más mínimo interés en el amor, uno centrado en su amor por la música y otro en la admiración a la tecnología, cómo es que siquiera se llegarían a conocer y mucho menos a agradar entre si.. Bueno, el destino a veces juega a...