Capítulo 2

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-¿Cuánto tiempo falta para el recreo?--Me preguntó Al. 

-Como 30 minutos, pero si no terminamos esta actividad, la profesora no nos dejará salir. 

-Agg ¿Me puedes ayudar? Es que no entiendo este ejercicio. 

-¿Cuánto te falta?

-Creo que casi todo. 

-¿Pero qué has estado haciendo todo este tiempo?--Le pregunté, poniendo los ojos en blanco-- Está bien, te voy a ayudar solo porque yo ya terminé.

-Claro, la cerebrito siempre termina todo muy rápido. 

-Sí sí, como digas. Ven y te explico.

-¿Ya terminaron chicas?--Ese era Joel, le encantaba competir para ver quién era el mejor y el más inteligente de la clase. 

Sí, competía conmigo y sí, era uno de los chicos que gustaban de mí.

-Ya casi, pero no queremos interrupciones.--Contestó mi mejor amiga, un tanto seria. 

-¿Por qué tan enojada pues? Además, si ella te está ayudando no vale.--Le dijo él.

-Cállate.--Alisson casi le gritó. 

-Ok, me voy. Pero quiero comparar mis ejercicios con Camila primero. 

-¿Por qué no los comparas con Daniel o Marcos, o con Estela? Ellos también terminaron ya.--Le pregunté a Joel.

-Primero quiero hacerlo contigo, luego con ellos. 

-¿Por qué eres tan intenso?--Le preguntó Al, ya cansada de su insistencia-- Además está ocupada, ¿no ves?

-Está bien, toma mi cuaderno, compara tus ejercicios pues.--Le di mi cuaderno. 

-Gracias Camila. Ya ves Alisson, ella sí es educada. 

Alisson quiso decir algo pero la profesora comenzó a hablar. 

-Bueno jóvenes, ya es la hora de salir. Si ya terminaron, pueden dejar sus cuadernos en el escritorio y salir a su receso. 

-Listo Alisson, justo a tiempo.--Terminé de explicarle.

-Gracias Camila, ahora sí podemos salir. Ya estaba súper aburrida y detesto las matemáticas. 

-Gracias Camila, tenemos los mismos resultados. Veo que no te equivocaste.--Joel me devolvió mi cuaderno.

Miré a Joel y fruncí el ceño. 

-¿Perdón? Querrás decir que tú no te equivocaste. 

-Eso nunca, pero igual ¡gracias! 

-¡Ay! Por qué siempre salen corriendo estos niños inmaduros.--Alisson pacería enojada. 

-Bueno Al, ya lo dijiste, son inmaduros. He ahí tu respuesta. 

Comenzamos a salir del salón de clases.

-Iremos a comprar al cafetín primero y después iremos por unas fotocopias para la actividad de ciencias.--Le indiqué a Al.

-¡Cam! Olvidé que teníamos actividad de esa materia. 

-Qué raro, tú siempre olvidando cosas.

-Ja, ja que graciosa.--Me dio un leve golpe en el hombro. 

-Pero si quieres puedo comprarte las fotocopias, solo son 3 páginas. 

-Sí, gracias. Siempre tan linda. 

Hilos RojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora