la vida de angelo Nakamura

1

Mi nombre es Angelo Nakamura, tengo al rededor de 8 años, nací en Francia pero digamos que he viajado a más lugares que cualquier otro niño de mi edad gracias al jefe de mi madre el cual soy hijo de el.

Todo comenzó hace masumenos unos quince años cuando mi mamá consiguió trabajo como sirvienta en la casa de los Jhons el cual vivía el señor Jhons, su esposa y sus ocho hijos, todo marchaba bien, a mi mamá la acendio poco a poco hasta darle el puesto de asistente personal de el, era un gran paso ya que mi mamá jamás pensó ser tan feliz en su trabajo. El señor Jhons viajaba demasiado así que a cada lugar que iba terminaba embarazando a una mujer, pero el no quería tener más hijos por que decía que su esposa no debía de enterarse de eso así que a todos se los daba a mi mamá, era una mujer de un corazón tan grande que decidió quedarse con todo ellos, teniendo su apellido sin tan siquiera tener uno de su sangre, en resumen tuvo un hijo alemán, japonés, mexicano, canadiense, brasileño, sueco, egipcio, estadeunidense y por último yo que soy francés.

Mi madre fue muy feliz con sus nueve hijos de diferentes etnias y con su trabajo, pero como he mencionado seguido nos estuvimos mudando a causa de que la esposa del señor Johns no nos encontrara, bueno pero tuvo sus ventajas ya que aprendí karate en China, la danza de la India, el ritmo tan grande de los africanos o la maravillosa zamba de Brasil, pero por desgracia el jefe de mi mamá no pudo sostener su empresa y se vino a quiebra, bueno con tantos hijos quien no se viene en quiebra, con eso mi mamá dejó de obtener ingresos así que nosotros también caímos en quiebra, pero ella fue una mujer muy inteligente así que utilizo su cuerpo para poder ganar dinero, la favoreció su origen latino así que era una mujer muy bella con su tez morena, una sonrisa fenomenal, un cabello largo y sedoso al igual que una cintura muy bien formada. Perteneció a agencias de modelaje muy importantes en Latinoamérica hasta que le ofrecieron una buena oferta de trabajo en Francia y se quedó ahí junto a nosotros, compró una casa, un auto, nos estuvo dando estudios a cada uno de nosotros como nos lo merecíamos, aún que debo de aclarar que nunca fuimos ricos por que el sueldo de mi mamá no alcanzaba para dar una vida de ricos a más de ocho niños pero se hacía lo que se podía, no teníamos de que quejarnos, tiempo después el sueldo de mi mamá fue recortado por la mitad así que tuvimos que reducir todo tipo de gastos hasta vender el auto y vivir en una casa a las afueras de la ciudad creciendo en un pequeño apartado de la localidad, los vecinos eran muy agradables, amaban a todos mis hermanos al igual que a mi así que a cada uno nos regalaban ropa, juguetes, golosinas e incluso aportaban para nuestros gastos médicos, cuando mi madre no podía, siempre estaremos agradecidos por cada detalle que nos dieron.

Esta mañana me he despertado con toda la energía, mis hermanos fueron a la escuela y como desperté un poco enfermo mi mamá me indicó que me quedara en casa para recuperarme un poco, siendo el menor de todos, soy cuidado por mi mamá por la mañana y por las tardes con el señor Franco que es veterano jubilado, el sol golpea mi rostro y se siente tan delicioso como el oler una rosa en época de primavera, mis ojos aún siguen un poco cerrados por el sueño así que me estiro para poder hacer las sábanas a un lado, siempre he compartido cama con alguien ya que me da miedo la obscuridad así que el dormir con mi hermana Lucía me ayuda, aún que me molesta por ser más bajo que los de mi edad.

-Mi pequeño príncipe ha despertado ¿Como te sientes?- menciono mi madre entrando a la habitación.

-Ya mejor, a noche no soportaba el dolor de mi garganta hasta que me diste jarabe y me recostaste en tu pecho, eso siempre me ha gustado.

-Bueno hijo esa enfermedad tu mismo te la buscaste la noche antepasada por mojarte cuando llovía.

- Y como no salir con esa lluvia madre si podías sentir la energía de la naturaleza caer sobre nuestros cuerpos, no iba a desperdiciar un momento así para bailar al son de la lluvia, fue un momento único.