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Al amanecer Marcus y Aaron empezaron preparativos, pues, el joven alfa se debía ir de ahí en media hora a la ciudad más cercana "Mantis", según Marcus para ser un buen alfa de la manada necesitaría saber los negocios de sus empresa y sus números p...

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Al amanecer Marcus y Aaron empezaron preparativos, pues, el joven alfa se debía ir de ahí en media hora a la ciudad más cercana "Mantis", según Marcus para ser un buen alfa de la manada necesitaría saber los negocios de sus empresa y sus números para mantener a la manada.

7:00 a.m. Aaron había puesto todo su equipaje en el maletero, con ayuda de sus padres, había olvidado por completo la conversación con su lobo - mamá, por favor cuídate, regresaré pronto - Leia asintió abrazando a su cachorro, su pequeño milagro, pues había sido el único que pudo concebir después de cinco intentos y abortos espontáneos.

- papá, cuídala y a la manada - lo abrazó finalmente - por cierto ¿ya se acabó el aromatizante ese? -

- bebé, cuando estés de regreso te daré uno ¿vale? - Aaron asintió emocionado ante las palabras de su madre, subió al auto y arrancó lentamente, con una mirada por el retrovisor, vio a sus padres despedirse, sintió tristeza al dejar a sus amigos y lugar donde había crecido

Leia volvía con su aprendiz más emocionada y amable que nunca, luego de enterarse cómo había vivido el pequeño omega, su sentido maternal había estado con máximas alarmas.

- me voy a alistar, tengo un largo día con mi yernito - sonrió, entrando con prisa

- yo seguiré atendiendo a la manada - sonrió - ¡manda saludos de mi parte! -

- ¡sí! - la pareja del alfa entró a alistarse a una de sus habitaciones donde tenia su armario,  Ocho de la mañana y Liam se hallaba despierto en su comedor desayunando con calma un plato de cereal, amaba los aros de colores;  rápidamente se levantó al escuchar golpes en la puerta 

- buenos días - sonrió

- buenos días señora Leía - 

- hoy vengo con una larga lista aprenderás a limpiar la casa, aprenderemos otras recetas, pero con la diferencia que esta vez van a ser en la guardería te voy a enseñar cómo hacer postres para niños mientras los cuidamos  -

- sí señora -

Empezaron aseando la pequeña casa, aunque los alfas trataban de mantenerla limpia siempre  se encontraban con una que otra cosa por ahí en algún lugar de la casa, empezando por las camas y la loza, fueron a levantar el desorden de a poco.

- oh, mire señora Leia - dijo desde un armario el pequeño, señalando una de las esquinas se podía ver una pequeña camada de ratas Liam pasó su mirada al otro lado del armario encontrando a una muerta en una trampa sus recuerdos dolían.

El impacto de la imagen obligó a Liam a levantarse del lugar, la imagen le traía malos recuerdos, se dirigió al baño con un semblante serio y triste a la vez, estaba pálido se encerró, las lágrimas no tardaron en caer al recordar su difunta madre y muchos otros momentos que a lo largo de su vida solitaria en el bosque había presenciado.

EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora