𝑯𝒐𝒘𝒍𝒊𝒏𝒈 𝑯𝒖𝒏𝒕𝒆𝒓𝒔 || 𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒

Capítulo 17

Esa madrugada, cuando aún era de noche, se podía escuchar el ruido en la cabaña de Elisa y Kat. Ethel se levanta y ayuda a prepararlo todo para irse. Isaac había dicho que llegaría justo cuando amaneciera, así que no tardarían mucho en salir.

Estaban preparando las provisiones y los caballos cuando escuchan como alguien llama a la puerta. Kat corre para abrir y Isaac entra para saludar a las chicas.

— Buenos días, chicas, ¿lo tenéis todo listo? —sonríe Isaac saludándolas a todas—.

—Sí, solo falta cargarlo todo en los caballos... —contesta Ethel—.

Isaac asiente ante esas palabras y se acerca a ayudar a cargar con las cosas a Ethel. Ambos salen de la cabaña con las cosas y Kat se acerca a Elisa y la mira con una expresión que su hermana se conoce muy bien. Elisa ríe y asiente.

— Se quieren~ —ríe Kat—.

—Shhh~ No hagas tanto ruido, si se enteran te reñirán... Venga, ayuda a cargar...—ríe bajito Elisa y empieza a cargar con las cosas—.

— Vale~

Ambas salen cargando las cosas, y cuando lo tienen todo amarrado a los caballos, salen de allí.

Al llegar a la salida del camino de Nyx, se encuentran con que muchos de los jóvenes de la ciudad y algunos de la comunidad de jóvenes de Obsidiana se habían unido a ellos sin avisar y los esperaban con sus caballos.

— Había llegado a nuestros oídos que ya os ibáis, y no nos queríamos perder la fiesta... —saluda BlackFeather, acompañado de Panther—.

Ethel ríe ante esto pero asiente.

— Bueno, ¿pues a qué esperamos? La fiesta no espera a nadie. Vamos a las ruinas de la luna, allí organizaremos todo esto.

Todos asienten y gritan emocionados, siguiendo a la princesa, a Isaac y a las hermanas Elisa y Kat.

Todos parecían llevar las suficientes provisiones como para llegar sin problema a las ruinas. Incluso tenían para días si lo gestionaban bien, pero no hacían falta si lo que necesitaban era llegar a las ruinas de la luna. Al fin y al cabo, desde allí solo tardarían hasta la noche en llegar, si iban a buen ritmo.

Aún no amanecía del todo cuando empezaron su marcha por el camino que los llevaría a las ruinas. Lo único complicado del camino era que estaba lleno de tumultos en la tierra y no querían que ningún caballo tropezara y retrasara al grupo.

Ya se sentían las ganas de llegar en el grupo se jóvenes, aún si solo habían iniciado el camino. Todo eran risas y comentarios graciosos. Algunos se imaginaban como serían los de la resistencia del otro lado, otros querían ver si hacían amigos, otros simplemente miraban por la seguridad del grupo.

Ethel hablaba con Isaac mientras.

—Espero llegar al amanecer allí, quizás con suerte Étoile ya esté cuando hayamos llegado...

— ¿Étoile es tu amiga? —sonríe el muchacho—.

— Sí, es una de mis mejores amigas y princesa del Clan Luz. Mi otra amiga se llama Ilargi, y a su casa es adonde nos dirigimos —la princesa sonríe—.

—Oh, guau, sois las dos las princesas... Es increíble.

Ethel ríe y asiente ante la sorpresa de Isaac, y estos continúan hablando sobre la vida de Ethel y sus amigas.

Durante la mañana no tuvieron ninguna complicación, salvo unas piedras que se puso en su camino y que tuvieron que rodear, y luego unos cuantos troncos que había enmedio del camino que tuvieron que apartar para pasar bien.