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Kenma se levantó con cuidado de no despertar a Kageyama, salió de la habitación y vio que ya eran las 4 de la mañana, suga estaba dormido en el sofá.

Se dirigió a la ventana que estaba al final del pasillo y se quedó pensando en ese chico, Kuroo fue el motivo por el cuál quebró las reglas que jamás habían Sido rotas en ningún momento.

Suspiró y miró la luna, en ese momento la luz entraba por la ventana y era en cierto punto relajante, se preguntaba cómo iba a enamorar a un desconocido, o sea, lo había cuidados desde que ese chico nació, pero una cosa era admirarlo y otra muy diferente es tenerlo cerca

Él perfectamente sabe que Suga les había mentido, pero no lo juzgaba, ellos se dejaron guiar, aunque el albino no se haya dado cuenta, ninguno de ellos era puro en el momento en que decidieron contradecir al señor.

Suga no fue el causante de sus pecados iniciales, pero tenía presente la mentira que les había dicho, aunque por lo que veía él era el único que se había percatado de eso.

Estaba tan perdido en sus pensamientos que no se dió cuenta, hasta que sintió una mano en su hombro.

¿No puedes dormir? -pregunto el albino-

Se me quitó el sueño y sigo procesando todo lo que está sucediendo -dijo tranquilamente-

No te preocupes -volvio a sonreír- yo me encargaré de todo

¿Cómo es ese trabajo al que vas? -pregunto para que el ambiente fuera más tranquilo-

Es algo pesado, me duelen las piernas y los brazos pero creo que es cuestión de costumbre, además mi jefe es muy bueno -sonrió-

Nosostros también deberíamos buscar uno -dijo el chico-

Cómo se te ocurre, yo me voy a encargar de todo, ahora ve a dormir, que después no vas a querer despertar -le regalo una sonrisa y se fue al sofá-

El chico obedeció y se fue a dormir con Kageyama.

La alarma que le puso al teléfono que compro funcionó correctamente, se levantó, se bañó y preparo el desayuno para todos.

Comió y salió rumbo a su trabajo, era raro usar pantalones, no sentía la misma frescura que con su túnica, camino y cuando estaba llegando a su destino una persona llamándolo lo detuvo.

Buenos días suga -decia mientras agitaba su mano-

Buenos días Daichi, ¿Vas a la universidad? -sonrió-

No, debo buscar a mi estúpido primo que está durmiendo -dijo con una risa-

No creo que esa sea la manera correcta de referirse a tu familia, yo no sería capaz de decirle algo así a mis hermanos -dijo tranquilamente-

Oh tienes varios hermanitos -dijo animando -

Si, daría la vida por ello -sonrió-

Eso es muy noble, deberías traerlos un día a mi tío le gusta tener gente cerca y si son enérgicos aún más -sonrió-

Ambos iban tan concentrados en su conversación que no se dieron cuenta que estaban caminando más lento y cuando llegaron la hora de llegada puntual se había pasado.

Daichi, deja de coquetear con mi empleado -dijo el mayor- de esa manera no vas a conseguir que te vuelva a lavar los platos -lo miró-

Disculpa tío Nekomata -suspiro- voy a buscar al idiota -subio las escaleras corriendo-

Lamento llegar a esta hora -hizo una reverencia-

No te preocupes, me gusta que te relaciones con otros y ¿de que estaban hablando? -pregunto algo curioso-

Oh de mis hermanos, me dijo que si gustaba un día podía traerlos, pero eso sería abusar de su confianza -dijo el chico-

No te preocupes, solo dime con anticipación, los chicos ruidosos me hacen sentir vivo, por eso los Amigos de Daichi y Kuroo me dan vitalidad -sonrió- oh por cierto, hoy llego nueva mercancía, tu trabajo del día será etiquetar todos los productos

Si señor -sonrió y fue a buscar la etiquetadora-

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Akaashi Keiji, Akaashi Keiji, Akaashi Keiji -estaba repitiendo eso una y otra vez, mientras buscaba a ver en qué red social podía encontrar a ese chico, pero ninguna daba frutos- me duele el cerebro

Había pasado toda la noche buscando y se despertó temprano lo para continuar, pero nada pasaban, parecía como si el chico en realidad no existiera.

Alguien tan bonito debe tener fotos en la red -dijo desanimado-

Cuando vio la hora en su teléfono saltó de la cama como un resorte y fue a cambiarse, sus amigos llegarían y sabía perfectamente que había uno en especial al que lo le gustaba esperar.

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¿Se esperaban a nekomata?

A mí siempre me ha parecido un viejito super chévere (eso más o menos vendría siendo la palabra chido que usan en México)

También me encanta la parte de Bokuto buscando a Akaashi en Google

Nuestros angelitos conocerán a nekomata y es donde la aventura verdaderamente comenzará ¿Que les espera a nuestros personajes?

Descubranlo en el próximo capítulo

Nos vemos

Un beso y hasta pronto

ANGELES (HAIKYUU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora