Magical Stories vol1: Sueños Solitarios

Epílogo: La boda real.

Más tarde Siegfried llegó al palacio sintiéndose victorioso con Odette a su lado.

-Encantada de conocerlos sus majestades- dijo Odette presentándose ante los reyes con una elegante reverencia.

-Igualmente querida- contestó la reina con una gran sonrisa, a pesar de que no entendía nada de todo el asunto de la falsa Odette del baile.

-Bienvenida a nuestro hogar Odette- dijo el rey con una sonrisa que casi nunca tenía- Espero que te guste vivir aquí.

- ¡Estoy segura de que sí! ¡Este lugar es precioso! - contestó Odette alegremente.

-Julieth, ¿Te importaría mostrarle a Odette su habitación? Me imagino que querrá descansar- dijo el rey amablemente.

-Por supuesto, ven conmigo...- contestó la reina marchándose con su futura nuera.

Tan pronto como las dos se fueron la expresión del rey cambió a una seria.

- ¿Y qué hay del brujo y su hija? - Preguntó el rey mirando a Siegfried de forma seria.

-Los he eliminado...- contestó Siegfried con una sonrisa maliciosa mientras le enseñaba a su padre la espada real que aún estaba manchada con la sangre de Rothbart- Pregúntale a Odette, estará encantada de contarte como su príncipe la ha rescatado. Además, luego volveré a por el cuerpo del brujo, no lo he traído ahora para no molestar a Odette, ya sabes cómo son las mujeres con la caza...

El rey se quedó en silencio durante varios minutos impresionado hasta que finalmente habló.

-Muy bien hecho... rey Siegfried...- dijo el rey inclinándose ante su hijo para gran gusto de él.

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Mientras tanto en el pueblo, Catherine y Bella estaban reunidas en la habitación de esta última contándose todo lo ocurrido la noche anterior.

- ¿Entonces aquel hombre tan grosero era tú abuelo? - preguntó Bella horrorizada.

-Me temo que sí.... Ayer fue el peor día de toda mi vida... no pienso volver nunca al palacio ni a mi casa...-dijo Catherine llorando.

-Ahora esta es tu casa- contestó Bella con dulzura.

-Gracias... de hecho ahora tu padre insiste en que ahora soy parte de la familia y que le llame papá...- explicó Catherine algo nerviosa.

-Siéntete libre de hacerlo... hermana...- dijo Bella dándole un enorme abrazo- ¿Y qué hay de Jarl?

-Él me dijo que si sus padres no me aceptaban renunciaría a su posición por mí... y sinceramente después del desastre del baile espero que lo haga...- dijo Catherine cabizbaja.

-Supongo que ahora depende de él...- contestó Bella tocándole el hombro.

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De nuevo en el palacio, Odette estaba conociendo al resto de la familia real.

-Y este es nuestro hijo Jarl- dijo Lady Astrid amablemente.

-Un placer conocerte- contestó Odette con su elegante reverencia.

-Igualmente princesa- dijo Jarl devolviéndole la reverencia- Siegfried nos ha hablado mucho de usted.

-Me alegra oírlo- dijo Odette mirando a Siegfried con cariño.

-Hay alguien más que debes conocer...- comentó el duque lanzándole una mirada fría a Jarl. Este último trago saliva y cogió a Ondine de la mano para acercarla a Odette.