Capitulo 28.

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❝ ― Tienes tres opciones, me besas, te beso, o nos besamos

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 Tienes tres opciones, me besas, te beso, o nos besamos. ❞

2 meses después.

― ¿Acaso no entiendes, Anastasia? ―pregunto su madre con un tono molesto.

―Madre...―dijo llamando la atención de Claire―...estoy bien. No puedo dejar de ir a la empresa solo por un simple mareo.

― ¿Un simple mareo? ¿Qué hay de la fiebre que tienes? Se lo mucho que te costo entrar a esa empresa, y ganarte el puesto que te han dado. Pero tu salud es mas importante, así que te quedas en casa.

― No es para tanto. Tal vez algo que me comí ayer me hizo daño ―bufo molesta―. Ya se me quitara.

― ¡Siempre has sido tan terca, Anastasia! Pero ahora no te saldrás con la tuya, te quedaras aquí.

Anastasia suspiro pesadamente. Levanto sus manos en son de rendición. Giro sobre sus talones y subió a su habitación. El pequeño Bobby la siguió. Al estar adentro de su habitación, tomo su teléfono. Tecleo un par de números y coloco el teléfono en su oreja.

― ¿Anastasia? ―dijo aquella voz del otro lado de la línea.

―Chris...―dijo.

― ¿Se puede saber donde estas? O ¿Con quién estas?

―Estoy en mi casa. No podre ir hoy a la empresa.

― ¿Qué? ¿Por qué?

―Amanecí con una fiebre muy alta, me maree y vomite. No quise decirle a mi madre que había vomitado porque se pondrá como una loca. Y mi cabeza me duele.

―No te preocupes. Quédate en tu casa. Iré más tarde a verte.

―Chris no...―negó―...no vengas. Debes estar en la empresa.

―Dije que no. Te iré a ver mas tarde, punto. Fin de la discusión. ―dicho esto el Adonis colgó.

Anastasia negó repetidas veces con su cabeza. Chris era terco, como ella. Pero el ojiazul lo era más.

(...)

― ¿Puedo pasar? ―dijeron del otro lado de la puerta. Anastasia sonrió al escuchar aquella voz.

―Adelante.

Chris abrió la puerta y sonrió al ver a Anastasia. Estaba acostada en su cama. Ella al verlo mejoro su postura y arreglo un poco su cabello.

―Dios, que vergüenza. Debí haberme arreglado un poco.

―Tranquila, no te ves nada mal. ―se sentó en la orilla de la cama.

― ¿Ahora te preocupas por mí?

― ¡Vamos Anastasia! ¿Te molesta que me preocupe por ti?

―No, pero...Soy tu amante, no deberías de hacerlo. Deberías estar con tu esposa.

―Lisa no está. ―Anastasia frunció el ceño―. Fue a visitar a su familia a Gary, Indiana. Y aunque ella estuviera aquí en Boston, te hubiera venido a visitar. ―Anastasia negó―. Dime, ¿ya fuiste a la clínica o algo así?

―No. Creo que lo que tengo no es nada grave. Ya me pasara.

― ¿Segura?

―Si. Lo siento por no haberme presentado hoy.

― ¿Por qué te disculpas?

―No lo sé. ―Chris rio.

La risa de Chris es contagiosa, por lo tanto, Anastasia termino riéndose. Chris tomo la mano de Anastasia y con su dedo acaricio los nudillos de la castaña. Anastasia levanto su mirada, para hacer contacto visual con él. Su mirada era tan profunda, una mirada que te derretía. Anastasia bajo su mirada a los labios de Chris, quienes poseen un tono rosado, tan dulces y antojables.

Las mejillas de la castaña tomaron un color rosado. Se había sonrojado. Al instante desvió la mirada. Chris tomo el mentón de Anastasia, haciendo que Anastasia volteara a verlo. Sus ojos la intimidaron. Se acerco lentamente quedando a centímetros de los labios de Anastasia.

―Tienes tres opciones, me besas, te beso, o nos besamos. ―Anastasia se quedó atónita mirándolo―. Te beso.

Sus labios capturaron los de Anastasia de manera rápida y sorprendente, fue ahí cuando la beso con desesperación, fue ahí cuando sus manos pararon en la nuca del rubio causando que el beso se profundizara aún más. Anastasia lo acerco mas a ella, haciendo que Chris posara ambas manos en los costados de ella. El momento era único. No tenían intenciones de hacer algo más que besarse, por primera vez...

DIRTY SECRET ©; CHRIS EVANS [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora