𝐁𝐞𝐟𝐨𝐫𝐞 𝐘𝐨𝐮 𝐆𝐨 [𝐑𝐮𝐛𝐞𝐠𝐞𝐭𝐭𝐚]

XIII.

*Parte para un ¡Buenas! ♥

XIII.-Capítulo-.

[Canción recomendada: Alesso - Heroes ft. Tove Lo]

[Rubén]

Mire al frente notando la intensa mirada castaña de mi padre, en verdad quería irme lo más pronto posible de aquí, no entendía su insistencia por querer que regresará a casa y no estaba de humor para ello.

-Skal du ikke hilse på faren? (¿no vas a saludar a tu padre?) -pregunto mi padre a los segundos, suspire para acercarme a él, dejando un poco mi orgullo de lado. Sabía que nunca me llevaría con mi padre, menos por los malos tratos a mi persona.

Pero que podía hacer, solo estaba aquí por mi madre, quien fue la que quería verme o bueno eso fue lo que dijo mi padre en una de las tantas llamadas que realizo durante todo este año, poco después de conocer a Samuel.

Lo abrace para pasar a un lado de él, conocía esta casa como la palma de mi mano, conocía todos los lugares para esconderte, para olvidar y para mentir. Una familia llena de mentiras, sin duda alguna.

Iba en silencio por el largo pasillo, intentando formular diferentes maneras de quitarme el peso de la familia, no quería tener nada de esto en mi poder. Solo quería dedicarme a mis pinturas, amigos y todo lo que estaba en la ciudad donde vivo actualmente, no aquí.

En este lugar ya no había nada que me atará, bueno solo mi madre, pero de ahí en más, ni mis hermanos ni mi padre me importaban. Ellos siempre me hicieron de lado y ahora yo haría lo mismo.

-Mamma, hvordan har du det? (Mamá ¿Cómo estás?) -mi madre volteo a verme sonriendo suave, se notaba el cansancio en sus ojos verdes, la piel pálida era más pálida casi un blanco y los múltiples aparatos a sus lados, sin duda era una imagen fuerte para mi corazón.

-Mi pequeño Rubén, no tienes por que hablar noruego...sé que te gusta más el español-susurro me acerque a ella, para arrodillarme quedando cerca de ella, tome su mano entre las mías-Mamá, sabes que no tienes que quedarte aquí...tomaré la responsabilidad, volvamos a España...no tienes que estar aquí con ellos, sé que ellos no cuidan de ti-susurré esperando que mis palabras la hicieran entrar en razón, desde la última vez que la vi, estaba más deteriorada, más cansada, se veía débil-por favor, te lo pido-recargue mi frente en el dorso de su mano, intentando tener algo de ese calor maternal, pero sus manos estaban tan frías, las vistas de la terraza era bonito, sabia que mi madre le gustaba caminar por la terraza mirando el jardín, viéndonos jugar de niños.

Mi madre siempre fue débil de salud, sus defensas nunca se desarrollaron con totalidad, pero llevaba una vida sana, y poco tiempo después de mi cumpleaños número 26, se le detecto cáncer. El doctor creyó que podía soportar las quimioterapias, durante 3 años ha estado soportando las quimios, los medicamentos, no salir de casa.