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Narra Pilar

Tengo las manos de Purre en todas partes y dentro de mi vestido, subiendo y bajando, apretando mis nalgas mientras mis piernas se aferran alrededor de su cadera y mi boca busca la suya con desesperación.
Lo he echado de menos sus besos, sus abrazos y a todo eso, su calor y no es precisamente al calor que producen
nuestros cuerpos desnudos al tocarse, he echado de menos lo que volvia a sentir estando con él.
- Purre..
Purre aparta su boca de la mia y me
mira jadeante. 
- Te mereces más que esto, nena.
Me lamo los labios.
- Mas que hacerlo en un puto baño. Niega con la cabeza y una sonrisa cruzado sus labios. - Pero ya no aguanto más.
- Purre..
Hablo con dificultad tras el agitato beso.
- Necesito tenerte otra vez.
También lo necesito.
Sus ojos lujurioso se clavan en los mios, le acaricio el cabello que cuelga en la parte de atras y sonrió, le ha crecido el cabello y hasta no tenerlo así de cerca no me habia dado cuenta pero supongo que el tampoco se ha dado cuenta de algunas cosas que voIvieron a mi.
Tomo su rostro y lo beso con fuerza sus brazos vuelven a abrazarme hasta causarme de regreso ese ligero dolor en mi cadera, me quejo y él se aparta.
- Pilar..
Trago con fuerza.
- No te detengas.
Me ve confundido y aprovecho ese
momento para besarlo por segunda vez, soy rapida con mis manos y en cuestión de minutos lo tengo moviéndose dentro de mi.
Follo con Purre, no, hago el amor con él como el mismo lo describe porque es exactamente eso sin importar que sea un jodido baño.
Su boca cubre mis pechos mientras su
entrepierna empuja la mia cada vez mas fuerte, gimo sobre su boca y en su oído, agarrándome de su espalda desnuda con mis uñas y en cierto punto bajando las manos hasta su trasero en busca de sentirlo mas profundo, cierro los ojos, suspiro y lo disfruto mucho a pesar de no ser mi noche planeaba.
Cuando llegue aqui pensaba olvidar todo, al menos por una noche crei que podría borrar de mi cabeza los problemas y con eso, olvidar también que era el cumple de Purre, tener una noche de sexo después de mucho tiempo, pero las cosas no resultaron de ese modo.
En lugar de eso obtengo algo..
Incorrecto, pero mejor.
Muchismo mejor.
Quedo completamente agotada al terminar y mis piernas flaquean cuando mis pies tocan el suelo nuevamente, Purre me besa una vez mas y solo por un instante me vuelvo a perder en el hasta que salgo de esta absurda perfecta y hermosa fantasia.
Él me sonrie con tanta felicidad que necesito parar esto, salgo seguida de él y me observo en el espejo tratando de arreglar lo que Purre provoco hace unos minutos.
- Tenemos que hablar, lo sabes.
Lo miro por medio de su reflejo en el espejo.
- Te dije que solo puedo darte sexo.
No luce dolido y lo entiendo, digo muchas cosas y al final, en ese baño acabo de demostrar lo mucho que significa para mi, solo basto sentirme para saber que he sido sincera.
- Sigues esperando que crea eso, nena?
Me vuelvo hacia él.
- Ya dime que sucede.
Lucho contra el ardor en mis ojos.
- No sucede nada. Luce decepcionado tras escucharme. - Y tengo que irme. Paso saliva su expresión cae mas. - Tengo que irme, Purre.
Me sujeta del brazo.
- Pilar..
- Purre.. debo..
- Después de lo que paso. Vas a seguir negando lo que sientes por mi?
Mis ojos tiemblan.
- No menti entonces.
- Y ahora? Pregunta esperanzado. - Ahora mientes?
Mi corazón se acelera mucho, ya no quiero dañarlo mas, pero si no lo hago, él jamas me va a dejar.
- Ahora tampoco lo hago.
Él niega y su agarre se aprieta en mi mano, sus ojos tiemblan y me ruegan tanto que por un fragil segundo quiero caer.
- Te qui...
- Estoy con Roger, lo siento.
Sorpresa no es lo que veo, solo dolor en sus ojos, mi falsa confesión le ha caído desprevenido y puedo ver como intenta descifrar si mis palabras tienen verdad.
- Que?
Parpadea confundido y intenta sonreír, pero ese gesto se cae.
- Estas con Roger?
No respondo.
- Pilar..
Esta devastado, lo puedo ver y  seguramente con miles de preguntas en la cabeza, pero ademas de ellas también debe haber insultos que quiere decirme y se muerde la lengua para no ofenderme.
No puedo seguir ni un minuto mas aquí.
Trago con fuerza y veo ver su rostro
destrozado.
- Tengo que irme.
Asiente con la mirada baja y poco a poco. Siento sus dedos aflojarse en agarre en mi muñeca, Purre me suelta por completo y soy tan bipolar que deseo su tacto otra vez.
Mis ojos se llenan de lagrimas y lo miro directo a los suyos.
- Adiós, Purre.
Se siente como un adios definitivo y hasta ese momento ignoraba seria verdad.

Lo veo por ultima vez y voy directo a la salida, esperando perderme en la multitud y que no me encuentre a pesar que mi corazón anhela que si.

~*

Cuando llego a casa las luces se encuentran apagadas, meto la llave a la puerta y no logro abrirla cuando ya es alguien mas quien me hace el favor.
Mi garganta se contrae al dar con su rostro mientras él luce igual que siempre desde que se llevo a mama del hospital, Jorge esta frente a mi mirándome completamente complacido tras los resultados de los últimos dias, para empezar el haber salido de la carcel bajo fianza y que mi madre otra vez recaiga y piense que es el mejor hombre del planeta.
Esto no podria ser mas horrible.
Siento que todo lo que construí junto a ella ha sido derribado.
- Llegaste temprano, pequeña zorra.
La voz profunda de Jorge  me hace templar.
Se apoya en el marco de la puerta me observa de pies a cabeza, es la primera vez que me ve de ese modo y mis piernas tiemblan.
Tengo miedo.
- Tu madre aún no llega.. Tengo hambre.

Esta noche no iba a ser igual a las demás.

Perdoname Donde viven las historias. Descúbrelo ahora