Capitulo 3: Escapada

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Empezamos a correr lejos de esa enorme larva, la cual iba en mi opinión demasiado rápido para ser una larva.

- ¿¡QUE MIERDA ES ESO!? - Pregunta Faustin asustado.

- Jaime, ¿¡que narices es eso?! ¡Se supone que lo sabes llevas mas tiempo fuera que nosotros! - Digo aun corriendo, entre jadeos.

Buscábamos un sitio donde la larva no entrase. Jaime nos empuja a Faustin y a mi a una habitación donde la larva no entrase aunque quisiera que ademas ya tenia la puerta abierta.

Nada mas entramos Jaime cierra la puerta por detrás de nosotros.

- No gritéis, son ciegos, pero tienen las habilidades auditivas extremadamente desarrolladas.

Me dejo caer en el suelo, el cual estaba ligeramente pegajoso y cubierto por una fina capa de musgo y respiro pesadamente.

Faustin apoya todo su peso en la pared, la cual tenia unas pocas enredaderas y jadea también.

-Vale otra cosa que debéis saber es que la sangre o cualquier otro fluido que suelten estos bichos es abrasivo.

Faustin y yo nos miramos. Levanta su bota y la suela estaba toda fundida por la sangre de la larva que piso antes.

Jaime lo ve y nos mira con cara de poker.

-Bueno Jaime, ¿cuanto tiempo llevas tu despierto? - Pregunto intrigada ya que parecía que llevaba mas tiempo descongelado que nosotros debido a sus conocimientos.

- 9 meses ya. Fui de los primeros en despertar – Responde con un tono de voz neutro.

- ¿De los primeros? Entonces hay mas gente despierta – Dice Faustin.

-Si, hay un refugio, a una hora y media o así andando desde aquí, esta al lado de la playa, hay bastante gente y antes de que lo preguntéis. Si, la playa se puede usar, por algún motivo no tiene nada de radiación y es totalmente segura.

Miro a Faustin con una sonrisa, ya que nos encantaba la playa.

- Ahora para volver habrá que usar trajes y mascaras para.. bueno básicamente para no morirnos. Una vez lleguemos allí no hará falta usar nada de esto, esa zona esta totalmente limpia de radiación – Dice Jaime casi esbozando una sonrisa.

Era muy tranquilizador volver a la civilización, con comida, agua y otras cosas de ese estilo, yo estaba francamente emocionada.

- Bueno, vosotros solo seguidme y estaréis a salvo – Dice con un ligero tono de superioridad del cual Faustin y yo nos reímos un poco.

- Oye, por curiosidad. ¿Cuantos años tienes tu? - Dice Faustin medio riéndose.

- Tengo 17 – Responde con su tono neutral de siempre.

Faustin y yo nos miramos y soltamos una ligera risa.

- Que pequeñín – Digo entre risas, casi carcajadas.

- A ver, ¿cuantos años tenéis vosotros? - Pregunta medio enfadado, cruzándose de brazos mirándonos con superioridad.

- Relaja pequeñajo, tenemos 19 – Dice Faustin.

- Vale, pues aquí no importa una mierda la edad, aquí ahora la edad se mide casi absolutamente por los conocimientos en supervivencia, y ya solo por el tiempo que llevo yo despierto me deberíais de tener un mínimo de respeto si queréis que os ayude. - Añade haciéndose el maduro.

- Aja, lo que tu digas – Digo indiferente.

-Bueno, ¿y hay lluvia ácida? - Pregunta Faustin mientras empezamos a andar en busca de mascaras, filtros y ese tipo de equipo. Toda la instalación estaba cubierta de vegetación extrañamente era bonito.

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