¿Qué es mejor que estar leyendo sobre el verdadero amor? ¿Porqué?
Porque nos enamoramos en 2D.
No lo pienses, solo leelo ;)
-One shots de boku no hero y pedidos incluidos.
-La imagen de la portada no me pertenece, créditos a su respectivo autor.
-Bo...
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Au Broken Minds (Enfermedades Mentales)
Punch Man
Arribaste a la oficina de tu padre, dejando tu mochila por algún lado, mascabas el chicle de mora azul cual pintaba tus labios de color celeste. Tu padre detestaba el sonido que hacías con el y las burbujas que reventabas en los momentos más estresantes.
-Hola Vanie-tu padre abrió la puerta detrás de ti metiéndote el susto de tu vida.
-¿Cómo sabías que estaba aquí?
-Puedo escuchar tu goma de mascar en cualquier parte de la institución-Bufaste. Era un exagerado.-¿Estuvo bien la clase de química?
-Saqué un diez, ¿Qué es eso?-preguntaste sentándote sobre su escritorio, observaste lo que parecía ser el expediente de uno de los paciente, pero eso no fue lo que llamó tu atención sino la foto de un chico rubio con muy mala actitud.
-Nada que sea de tu interés- se rascó los ojos agotado-No puedo hablar sobre los internos...
-Lo sé, lo sé. Privacidad.
Suspiraste. Al parecer esta sería una de las tardes en las que terminarías aburrida esperando que tu padre termine su jornada de trabajo y poder regresar a casa, pues no cree que seas lo suficientemente independiente para caminar a tu casa.
-Doctor Aizawa-llamó su secretaria-Lo necesita Iida Tenya.
-Enseguida voy- Antes de que pudieras siquiera mover un pelo este se giró señalándote con el dedo-No hagas nada que pueda meterte en problemas, ¿Escuchaste?
Asentiste. Parece que el día esta a punto de cambiar.
Tan solo tu padre cruzó esa puerta, te desplomaste sobre su escritorio en busca del archivo que habías visto , no ibas a hacer nada malo con el ni que fueras a leerlo y luego publicarlo en facebook. No, eso sería una estupidez.
-Bakugou Katsuki-leiste en voz alta- Piso 5 habitación 204.
Saliste a toda pastilla en dirección a su habitación, ese instinto que te decía que no corrieras en el pasillo cuando estaba mojado te impulsaba a buscar al chico de ojos rubí. Esquivaste a Tsuyu y huiste de Mina quien te persiguió hasta que se rindió en las gradas prometiendo no decir nada si le comprabas un helado a la hora de salida.
Ahora estabas frente a la puerta, tocaste, pero nadie te abrió. Tocaste repetidas veces sin recibir respuesta, lo cual te enfureció. Pateaste la puerta ante la rabia.
-También lo intenté. Esta está reforzada- pudiste sentir el tibio aliento rozar tu oído-¿Quién eres?
