Segundas Oportunidades (Juliantina)

NUNCA MAS

.Juliana:

Echo mucho de menos a mi princesa, estos días se que he estado ausente con ella, no he querido verla porque paso de que me vea con estas heridas, es la primera vez que desde que estamos juntas nos hemos separado.Se que estará preocupada por mi, cuando hablamos por teléfono me dan ganas de llorar al escuchar su voz por eso prefiero mandarle mensajes.Estoy completamente enamorada de mi Valentina y lo mejor de todo es que corresponde a este sentimiento, cuando desaparezcan estas marcas lo primero que voy hacer es ir a verla, espero que no sea tarde y me mande a la mierda.

Le dije a Eva que no le comentará la verdad por no preocuparla mas de lo que esta, siento una vergüenza tremenda por tener una madre así, al fin y al cabo el chino no es nada mio.Hay que joderse que después de todo haya retirado la denuncia.Lo que tengo claro es que voy a buscarme un trabajo lo mas pronto posible, se que por mi edad estará complicado pero así no puedo seguir, me están matando por dentro.Cuando vi como empujo a mi hermana juro que lo hubiera estrangulado con mis propias manos, aparte de mi princesa, Eva es intocable.

Que por cierto, que pensara de mi al escuchar lo que dijo el chino de que era otra de mis putitas,tengo que aclarárselo porque por mucho que haya estado con chicas, ninguna ha entrado en mi habitación, ella ha sido la primera que se ha acostado en mi cama, con la primera que he pasado una noche entera y he visto el amanecer.

-¿Que quieres Eva?- me llama por teléfono.

-Mueve tu culo de la cama y ayudame anda, que no puedo con las bolsas de la compra yo sola, estoy en la calle de atrás.

-Joder hermanita, tienes el don de interrumpir mis momentos mas preciados.

-No me jodas que te estabas...

-¿Oye que tu novia argentina no te dejo suficientemente satisfecha que tienes que estar pensando siempre en cochinadas?

-Por el amor de dios Juliana...no se puede contigo, haz el favor y baja.

-Voy pesada.

Me coloque un pantalón corto y un top, no es cuestión de bajar en ropa interior, ya he tenido algún que otro percance con la vecina de al lado, que cada vez que me ve me come con la mirada, bueno he de confesar que también es culpa mía por liarme con ella en el cuarto de contadores.

-¿Eva donde estas?- no la veía por ningún sitio, si ha sido una de sus bromas pesadas se va a enterar- oye que no tiene gracias, no estoy de humor, sal ya.

-Juls...

Escuche una voz a mis espaldas, esa voz inconfundible, mi corazón empezó a latir fuertemente ¿que estaba haciendo aquí? me verá así...No quiero girarme no...pero su mano coge la mía y me da la vuelta.

-Mi niña ¿que te hicieron?- me pregunta mientras acaricia una de mis heridas del labio inferior.

-Estoy bien Val, no te preocupes, esto no es nada, soy fuerte ya sabes.

-Quieres por una puta vez en la vida mostrar tu miedo conmigo, no te lo reprimas, soy tu novia, que no te das cuenta cabezota que si me apartas para que no te vea así lo único que consigues es que me preocupe mas.No se con que clase de chicas has estado pero yo no salgo corriendo a la mínima que se tuercen las cosas, eres la persona que mas me importa en el mundo y me necesitas, aunque no me lo digas.

-Lo siento...no quería que vieras estas heridas, me hacen débil.

-Débil eres al esconderte de mi Juliana.Yo no soy tu novia solo para meterme contigo en la cama, bueno eso, me entiendes.

-Eres la primera chica que meto en mi cama, todo lo que dijo el chino no va por ti, eres la primera en muchas cosas.

-Pues entonces dejame ser la primera también en ayudarte cuando estés mal, si no quieres hablar ahora no hables pero estate conmigo, no me apartes, abrazame cuando tu corazón te lo pida, besame cuando lo desees, ven a buscarme a cualquier hora del día, pero acude a mi y que no me tenga que enterar por terceras personas como estas realmente porque no soy imbécil Juliana.

-La imbécil soy yo.

-No lo eres, eres una chica encantadora dañada por el maltrato de sus padres y siempre voy apoyarte.

-Te amo princesa, te echaba de menos, perdoname.

-Yo también te amo mi niña, pensé hasta que te habías cansado de mi.

-Nunca pero nunca me voy a cansar de ti.

La agarre por la cintura y le di solo un pequeño beso porque la herida aun me molestaba pero era mas agradable la sensación de paz que encontré al esconder mi cabeza entre su cuello.Nunca mas, pero nunca mas, por mucho que se me vuelvan a torcer las cosas pienso volver alejarme de mi Val.

-Mi niña, tu hermana se va a ir con Renata a su casa porque hemos quedado que tu esta noche te vienes conmigo a mi casa.

-¿Y eso?

-Porque necesito protegerte y sentirte entre mis brazos y no pienses mal casanova que no vamos hacer nada de la manera en que estarás imaginando, te queda claro, ademas aun sigo e resentida contigo.

-En serio...¿por que tenéis esa opinión de mi?

-Cariño menos mal que no naciste chico si no estarías todo el día con la tienda de campaña, no me hagas hablar anda.Sube y coge algo de ropa mientras te espero y aviso a mis padres de que vas a casa.

-Mujeres...gracias princesa hermosa, ahora bajo, te amo.

-Te amo mi niña.