Había llegado del día, esta noche sería la misión y todos estábamos expectantes. El equipo estaba nervioso, se les notaba esta mañana en la reunión. Bert se dedicó a explicarle el plan a Chase y este fingía real interés. Todo se llevaría a cabo en la noche, a las afueras de la ciudad, Thomas organizó un galpón especialmente para esto. Por mi parte, tuve que volver al instituto, mientras que Chase se fue a ver los últimos detalles para la extracción de Frank. Esto tenía que salir a la perfección o tendremos serios problemas.
Claramente había llegado un poco tarde, la clase ya había comenzado. No hace falta decir que los chicos ya se habían enterado de lo de Taylor y yo, por lo mismo, prefería darles su espacio, esta era la última vez que los vería, después tendría que huir con los chicos y Frank, pero es mejor así, no me gustan las despedidas. Por otro lado, si siento no despedirme bien de Amelie, últimamente nos estábamos llevando muy bien, sé que sufrirá con esto, pero lamentablemente para todos, esto es lo que soy.
Tocó la hora del almuerzo, tomé asiento en una mesa alejada, mi estomago estaba cerrado no podía dejar de pensar en lo de esta noche, no sé por qué, pero no me sentía al cien por cien confiada y tenia un mal presentimiento, aquí no hay lugar para el ensayo y error, en este caso, o sale bien o simplemente no sale. Intenté comer mientras movía mi pierna con nerviosismo.
-Hola.- dijeron. Levanté mi mirada y vi a Noah sentarse frente a mí.
-Hola.- respondí.
-Te ves algo nerviosa, todo saldrá bien.- habló. Tomó mi mano sobre la mesa.- Quiero que sepas que siempre tendrás mi apoyo, si fue raro como llegamos a ser familia, pero de verdad te quiero hermanita.- soltó. Sonreí junto a él.
-Gracias Noah, y yo también a ti, aunque no lo demuestre mucho, pero ya sabes.- me encogí de hombros riendo.- Soy así.
-Lo sé rubia. Ten cuidado esta noche, todos estamos muy preocupados.- dijo.
-Lo haré.- dije. Aún llevaba conmigo la pulsera que Tyler me había dado, para mi era muy importante, tenía la de él y la mía. Me quité una.- Ten.- estiré la pulsera hasta él.- quiero que la tengas.
-No hagas eso.- sus ojos perdieron cierto brillo.- No lo hagas parecer una despedida. ¿Volverás verdad?.- preguntó con súplica.
-Lo intentaré, pero ambos sabemos lo difícil que puede ser, quiero que te la quedes.- la puse al rededor de su muñeca.- Ahora debo irme.- me puse de pie y él imitó mi acción para envolverme en un abrazo.
-Todo saldrá bien.- dijo besando mi frente.
-Cuida a Taylor, por favor.- dije soltando una lágrima. Él me sonrió y secó mi mejilla.
-Tu no te preocupes.- nos dimos un último abrazo y me fui.
Volví al departamento para darme una larga ducha. Chase ya tenía todas las cosas listas. Pasamos el rato repitiendo el plan, y todo terminaba en lo mismo, sacar a Frank e irnos lo más lejos que podamos.
Cuando ya eran las cerca de las ocho treinta de la noche, partimos a la agencia para reunirnos con el equipo. Ya estaban todos esperándonos en la sala.
-Bueno chicos, llegó el día para el que tanto entrenaron. Los necesito con todos los sentidos puestos ahí afuera. Lo que deben tener presente es que si uno cae, no miren hacia atrás, porque morirán. Seguramente no volveremos todos, quiero que lo tengan presente. Ahora vayan a por sus cosas, que saldremos en 20 minutos.- Hablé.
-Vaya motivación.- dijo Chase haciendo una mueca.
-¿Preferías que les mintiera?.- pregunté.
ESTÁS LEYENDO
COULD BE (Pt.2)
Teen FictionSi creían que la mafia había caído, se equivocaron. La historia continúa...