LOVE.

Mycroft

NOTA: Gracias por leer de verdad. Espero les gusten los capítulos finales.

                                                                                                  -o-

Mycroft llegó a Baker Street muy temprano. Con su traje impecable y su paraguas en la mano. Vislumbró a su hermano que estaba terminando de tocar una pieza en su violín. Era talentoso eso no lo podía negar.

-Hermano mío, felicidades por tu primer caso resuelto.

-Bueno alguien tiene que hacer el trabajo aquí- Sherlock contestó como si nada.

Mycroft sonrió y se preparó para lo que tenía que decir.

-Me puedes decir, ¿cómo se te ocurrió que traer a Lady Hooper a Baker Street era buena idea? Comprometiste su reputación con eso Sherlock.

-Molly me ayudó. Ella buscó el tipo de veneno y fue así que logramos conectarle las muertes de esos hombres a Sebastián Morán. Ahora por eso está en la prisión. Eso es todo.

-Sherlock, entiendo que al estar lejos de nosotros no sabes muchas cosas acerca de la sociedad y las buenas costumbres, pero créeme, estar con una Señorita en un departamento sin chaperón y no siendo tú prometida no está bien visto. Espero que sus padres no se hayan enterado, sería una pena para ella.

-Entiendo Mycroft. Pero solo trabajamos. No pasó nada y no hay ningún riesgo de nada. No es como si quisiera casarme con ella.

-¿Estás seguro de eso?- Mycroft preguntó serio. Porque podría jurar que es la única mujer a la que tus maneras no le asustarían Sherlock. Estoy seguro que ella sería una buena esposa para ti.

-Si estás tan seguro que ella sería una buena esposa ¿Por qué no te casas con ella?- dijo enojado.

Después de unos minutos, Mycroft suspiró en derrota, se paró, agarró su paraguas y se dirigió a salir de Baker Street, pero antes volteó a ver a su hermano y le dijo.

-Lo haré Sherlock. Voy a decirle al rey que acepto que sea Lady Margaret mi esposa. Él lo quería desde el principio, solo vine aquí a ver si estaba bien contigo. Que tengas buena tarde hermano pequeño. Ah y no hay más visitas a mi prometida. No está bien, ya lo hablamos.

Sherlock se quedó ahí, reflexionando lo que su hermano le había dicho. Él no se quería casar con nadie, de eso estaba seguro, jamás sería un buen esposo para Molly. Ella debía casarse con su hermano, era lo mejor.

A la mañana siguiente estaba en todos los periódicos las noticias de los esponsales de Lord Arthur Mycroft Sigmund Holmes con Lady Margaret Ann Hooper.

-o-

Molly no estaba feliz con su compromiso. Realmente ella no estaba contenta con que decidieran por ella. Ella no amaba a Mycroft Holmes y por supuesto él no la amaba. Ella lloró la noche en que se enteró, estaba condenada a un matrimonio sin amor y ella no podía hacer nada.

-Molls, ¿estás bien?- Augusto dijo mientras entraba a su habitación. No has salido de aquí desde hace tres días hermanita. Estamos preocupados, estoy preocupado por ti.

-Estoy bien Augus. No tengo ganas de salir de aquí.

-Hermana, mañana es la fiesta de compromiso. Deberías estar emocionada y organizando todo con nuestra madre.

-No quiero esto. Ustedes lo saben. Quiero estudiar, quiero trabajar. No quedarme en una jaula cuidando niños- dijo enojada.

-Escúchame Molly-le agarró las manos. Padre dice que Lord Holmes es un buen hombre, que te va a procurar y velará por ti. No es algo terrible, no es viejo y proviene de una gran familia. Tu boda será muy esperada y hablarán de ella por mucho tiempo. Serás feliz, te lo prometo. Pero debes darle una oportunidad. Conoce a tu futuro marido Molls. Sé que crees que la primavera es aún muy por delante pero el tiempo vuela. Aprovecha tu tiempo.

-Está bien- dijo resignada.

-Bien, ahora te voy a esperar para que vayamos por unos pasteles y un café a ése lugar que tanto te gusta en el centro, ¿sí?

-Sí, en un momento estoy contigo.

Augusto le dio un beso en la frente a su hermana y salió.

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Mycroft se encontraba en su oficina con su asistente cuando Lestrade hizo su entrada triunfal.

-He recibido mi invitación a tu fiesta de compromiso. Estoy emocionado. Jamás pensé que llegaría el día- dijo guiñando el ojo.

-Probablemente te invitaron por error Inspector- dijo con el ceño fruncido.

-Oh por favor Mycroft, estoy jugando. Lady Margaret es una belleza, definitivamente un gran partido.

-No es eso. Sé lo valiosa que es Lady Margaret, es solo que no me quiero casar. Jamás ha estado en mis planes.

-No después de aquella mujer- dijo Lestrade.

-¿Qué mujer?- Mary preguntó curiosa.

-Una mujer que en la juventud de nuestro buen hombre de gobierno le rompió el corazón.

-No estoy escuchando esto. ¿A qué vino Inspector?

- A preguntarte ¿qué diablos hago con tu hermano? No deja de molestar a mi equipo de trabajo. Es un verdadero dolor en el culo.

-Ya te dije, mantenlo ocupado. Estoy enterado que usará Baker Street para sus oficinas, quiere ser el único consultor detective. Si es que eso existe- resopló.

-No niego que él es bueno Mycroft. Pero nadie lo puede controlar. Ni siquiera Watson. Oye por cierto, ¿son ellos pareja? Todos en la estación hemos apostado, quiero saber si puedo ganar- dijo sonriendo.

Mary soltó una carcajada ante lo que dijo el Inspector. Mycroft y Lestrade la miraron curiosos.

-Disculpen, es que imaginarme a ése par como pareja fue demasiado. No sé si Sherlock tenga ese tipo de preferencias, pero el Coronel Watson me ha pedido salir a dar un paseo con él para conocerlo mejor.

-Interesante. Realmente pensé que eran un par.

-Estoy intrigado en que la gran Mary Morstan esté considerando en aceptar ser cortejada por el coronel. ¿Acaso debo empezar a buscar otra asistente?

-Como si pudieras reemplazarme Mycroft Holmes- dijo enojada.

Mary sonrió mientras salía de la oficina.

¿Qué les pareció?