Mi Ex

El indicado

Emilio POV

Esa mañana estaba especialmente de buen humor, después de nuestra charla la noche anterior me sentía emocionado por el paso que estábamos por tomar, la idea de finalmente compartir apartamento me tenía emocionado, siempre que pasaba mis descansos en la ciudad y vivíamos nuestras cortas lunas de miel, era como vivir juntos y amaba esa sensación.

Sabía que compartir un piso permanentemente no era lo mismo que compartirlo tres días al mes, pero entrar a esa nueva etapa con Joaquín era simplemente emocionante e incluso si había peleas o a veces se volvía complicado, iba a disfrutar cada momento a su lado.

Aparte de que hoy grabaríamos la canción juntos después de sus clases y el sábado comenzaríamos con la mudanza, así que definitivamente estaba de muy buen humor

Desayunamos juntos panqueques con miel y después lleve a mi castaño a la universidad, estuvimos cerca de veinte minutos besándonos en la camioneta antes de que tuviera que ir a su clase y yo tuviera que irme al estudio, tendría grabaciones todo el día y pasaría a buscarlo en mi descanso para comer.

Habíamos terminado con mi parte que era posar para que pudiera pintar y ahora quería terminarlo antes de que yo pudiera verlo, estaba curioso por ver el resultado final porque era una pieza grande y no estaba seguro hasta que parte de mi cuerpo había llegado a pintar, conociendo a Joaquín no sería nada que estuviera esperando.

Conduje hasta el estudio con una vieja estación de fondo, apenas llegué me encontré con Carlos charlando con un par de personas en la entrada, me dedico una sonrisa y me hizo una señal para que me uniera a ellos.

―Chicos, él es Emilio, está por sacar su segundo álbum y si todo va conforme al plan, saldremos de gira a finales de septiembre. ―exclamó emocionado, les sonreí estirando mi mano para saludar a cada una de las personas ahí. Había una cara familiar entre ellos, un chico rubio que sentía que conocía de algún sitio. ―Emilio, él es Diego Valdés, está pensando en firmar con nosotros, le estaba contando que de ser así podría iniciar abriendo un par de tus conciertos. ―asentí sonriendo, hasta que el nombre se registró en mi cabeza.

―Diego. ―murmuré con la sonrisa desmoronándose.

―Oh, realmente esperaba que no fuera el mismo Emilio. ―murmuró sonrojado, Carlos frunció el ceño.

― ¿Se conocen? ―ambos asentimos en silencio y el ambiente se cargó de tensión.

No había escuchado de ese chico en años, probablemente ni siquiera Joaquín lo había hecho, pero por el rostro apenado del rubio supuse que él nos recordaba tan perfectamente como nosotros lo recordaríamos a él. Ya no era lo mismo, todos habíamos crecido y honestamente su breve enamoramiento con Joaquín ya no era para tanto, aunque dudaba que se nos diera trabajar juntos con tanta naturalidad con ese pasado.

―Fuimos a la misma preparatoria. ―expliqué rápidamente, Carlos asintió con una sonrisa más tranquila.

―Oh, entonces conoces a Joaquín también, una suerte porque iría de gira con ustedes. ―Diego le miró como si acabara de darle una sentencia de muerte.

― ¿Aún sigues con Joaquín? ―exclamó mirándome ahora a mí, quizás en el fondo esperaba que el tema fuera pasado y ni siquiera tuviera más contacto con Joaquín, no lo culpaba había sido la peor reacción que tuve alguna vez con uno de los chicos enamorados de mi castaño.

―Sí, estamos por mudarnos juntos. ―respondí con una media sonrisa, el chico no era mucho más joven que yo, tenía la edad de Joaquín y me miraba como si aun estuviera en la preparatoria.

En ese entonces tenía una reputación bastante dudosa, después de golpear al mariscal de campo me había ganado un historial sin merecerlo y cuando le reclame los regalos constantes a Joaquín, tuvo un ataque de pánico, en ese entonces era considerablemente más pequeño y podía ser que me hubiera aprovechado de que yo era más grande en edad y tamaño, pero realmente no le había hecho nada para que estuviera así de preocupado, fueron amenazas de adolescentes.