Pelea de Territorios

4

Narra Off

–¿Off estas seguro de que es una buena idea meternos en una bronca en contra de los Blue Moons esta noche? – me pregunto Arm con un ceño fruncido, puedo entender su preocupación, después de todo se supone que hoy hagamos una entrega de cocaína a la provincia de Pattani*, pero no permitiré que ese enano que tienen de jefe crea que me faltan bolas para volver a enfrentarlo, fui herido gravemente por él una vez y debo admitir que es condenadamente bueno cuando de patear traseros se trata y por eso mismo planeo cobrármelas.

–No lo he olvidado Arm, de hecho, te daré el gran placer de dejar que te encargues de absolutamente todo el negocio – dije con una enorme sonrisa, sé que odia ir a pelearse con las otras pandillas, siempre ha creído que actuamos como niños de primaria, para él es más importante mantener exitosamente los envíos de mercancía.

–¿Se te zafo un tornillo después de que esa mujer de esta mañana te gritara tanto? ¡El líder eres tu idiota y es tu deber guiar las entregas! – a veces pienso que estoy hablando con mi padre en lugar de mi mejor amigo ¿porque se tienen que comportar tan recto?

–Arm, te lo estoy pidiendo solo por esta ocasión, quiero derrotar a ese nomo de jardín de una buena vez. Si ve que no aparecí creerá que soy un cobarde.

–¿Y desde cuando te empezó a importar tanto lo que otros piensen de ti? Normalmente ignoras a todos esos putos – lo que dice es muy cierto no soy del tipo que es provocado con facilidad, pero en mi defensa diré que mi orgullo fue lastimado tras haber sido vencido por un chico mucho más bajo que yo, además Mew termino con un balazo en la pierna por su causa.

–Muy bien, yo me are cargo de todo, pero te advierto que solo será por esta ocasión. Resuelve todos tus problemas con Atthaphan hoy.

–Gracias amigo, te debo una – en realidad le debo más favores a Arm de los que puedo contar con los dedos de las manos y pies, pero las manos derechas de un jefe son para eso, verdad.

–Me debes con esta unos 20 favores y te puedo asegurar que los cobrare todos con intereses. Debo regresar dentro de unos cinco días así que intenten no morir durante ese tiempo – concluida su advertencia abandono mi consultorio improvisado; deben haber pasado diez minutos cuando sentí la puerta ser abierta abruptamente por Singto.

–¡Off los chicos divisaron a esos imbéciles! ¡Ya están cerca del callejón donde se guardan los contenedores de basura! – prácticamente lo grito junto a mi oído.

–Muy bien, pues vamos a darles un apropiado recibimiento – y les pregunto ¿acaso existe una mejor manera de recibir que cayéndoles a tiros? Claramente no se lo esperaban, tuvimos la felicidad de verlos cubriéndose tras la basura apestosa como las ratas que son, pero dado que he decidido saldar todas nuestras cuentas hoy no pude permitir que mis compañeros continuaran con su diversión, una vez di la orden de cesar el fuego comenzó mi plan.

–¡No vivimos aquí a charlar Jumpol así que ahórrate tus frases educadas! – no sé porque me sorprendí cuando vi que el enano no quiso oír ni una cuarta parte de lo que dije, maldito cabeza hueca ¿acaso no puede ser un poco razonable?

–¡Eres un cabeza dura enano! nuestro jefe te da la oportunidad de saldar cuentas en paz y tu actúas como un cavernícola ignorante – grito Singto indignado, su grito fue respondido con otro igual de brusco por un chico de piel pálida que se encontraba parado junto al líder bajito.

–Tranquilízate Singto, recuerda que vinimos a hablar – le pedí palmeando su hombro.

Gaste mucha saliva para lograr que me oyera y diré que en verdad fue un milagro ver que usará finalmente su cerebro de pollo y se planteará mi idea.

–De acuerdo, acepto tus condiciones Jumpol. Una vez termine contigo por fin podremos hacer nuestras ventas sin tener que ver la cara de tus ridículos pandilleros – puto nomo de jardín me asegurare de hacerte tragar esas palabras; sin perder más tiempo ambos comenzamos a prepararnos, para tener mejor movilidad me quite la chaqueta que traía.

–Off recuerda que su diminuto tamaño le da la ventaja sobre ti, no permitas que juegue contigo o te cansaras más pronto – me advirtió Singto mientras deslizaba discretamente una navaja en el bolsillo de mis jeans, cuando dos jefes de banda tienen un encuentro son muy comunes las trampas, aunque se supone que usemos los puños nunca te puedes fiar y menos de un desgraciado como Atthaphan.

–Date prisa Jumpol, me estoy haciendo viejo esperándote – expreso burlonamente mi contrincante.

–¿En serio? Lo siento tanto por ti hormiguita – le respondo con el mismo tono burlón – Aunque ciertamente se nota que la vejes ya te está alcanzando, basta con mirar esas arugas junto a tus ojos – por lo que Mew me informo que averiguo cuando estuvo espiando su territorio el señorito tiene una fobia extrema en contra del envejecimiento y para placer mío no estuvo equivocado, a pesar de tener una máscara cubriendo su rostro pude notar como frunció sus cejas. Off uno, Atthaphan cero.

Pattani: Es una provincia de Tailandia donde se ve mucho crimen, por lo que investigue. Que les parece de momento la historia ¿la están disfrutando? Dejen su estrellita si les gusto y espero sus comentarios.