9

301 64 9
                                    



Narra Gun



¡¡Vine la policía!! – Vasto oír el grito de alarma del chico que teníamos de vigía para que todos entráramos en modo súper alerta, cuando se trata de la ley las alarmas de nuestros cuerpos son incluso más fuertes –¡¡Todos corran!! – ordene con un fuerte grito – mi mayor prioridad era que cada uno saliéramos pitando del lugar sin mirar atrás, a pesar de que me había quedado con enormes ganas de terminar la lucha, pero es preferible concluirlo en otro momento a ser atrapado por la policía y quedarme unos largos años tras las rejas, no sé si les mencione antes que el mayor negocio de mi banda es el tráfico de todo tipo de drogas, Tay es el dueño de muchos negocios sucios aparte de este, pero como es consciente de que nunca me meteré en el tráfico de personas me dejo únicamente a cargo del de drogas, sospecho que New por otro lado desde que comenzó a dormir con él es el responsable de sus clubs de prostitución, esa es otra parte de esta vida que detesto, pero es la que me toco así que lo único que puedo hacer es adaptarme y sobrevivir.

Sentía mis piernas desfallecer, pero no iba a permitir que eso me detuviera, para mi condenada mala suerte me desvié del camino que mis compañeros tomaron, pero como sé que para la policía siempre será prioridad atrapar al jefe continúe corriendo, si alguien debía ser encerrado esta noche prefería ser yo.

Regresando un poco a lo mío con Jumpol les diré que me impacte cuando saco la navaja, quiero decir ¡Tenia una puta navaja! En serio no me lo podía creer, él mismo fue quien en un principio pregunto si prefería solo usar nuestros puños, Jajajaja, vaya, vaya el señor Off Jumpol ha aprendido el famoso truco del engaño, les seré sincero estaba muy sorprendido no vale la pena negarlo, pero al mismo tiempo también me sentía emocionado y puedo asegurarles que este asunto será concluido totalmente a mi favor y de una manera muy divertida, ese fideo andante se arrepentirá de jugar sucio conmigo, además ahora tengo otro as bajo la manga para él.

–¡Gun! ¡Gun para de correr terminaras desangrándote! – escuchar el grito aterrador de Krist a mi lado fue tranquilizante, al menos no estaba del todo solo, además de que me hizo recordar que mi cuerpo contaba con dos feas cortadas las que para ser sincero no tengo idea ni me importa cuán profundas sean, lo más importante ahora es conseguir dejar atrás las jodidas sirenas de las patrullas que nos siguen atreves de los callejones.

–¡Súbete a mi espalda enano antes de que te nos desmayes a mitad de camino! – grito New quien también apareció corriendo como pollo sin cabeza a mi lado.

–¡Están cerca!¡No hay tiempo para parar! – sin darme chance a protestar fui agarrado por la cintura por Krist, esto en verdad es el colmo, voy a ser llevado mientras huimos con el estilo de princesa – ¡Krist te lo advierto bájame ahora mismo no estoy invalido! – mis alaridos fueron llevados lejos por el viento ya que Krist no detuvo su carrera.

–¡Para de removerte como si fueras un pescado! tus heridas podrían empeorar – pidió Krist sin detener aun la carrera.

Cuando finalmente fui dejado en el suelo nos escabullimos en los apretujados callejones traseros de un edificio.

Habíamos permanecido escondidos durante unos 20 minutos esperando que los malditos patrulleros decidieran largarse, estos oficiales son bastante perseverantes, han estado tras nuestra pista durante 3 años y todo por culpa de un desliz de Tay del que prefiero ni hablar.

–Mierda porque esos cabrones no se acaban de largar, mis piernas se están entumeciendo – los susurros de berrinche de New ayudaron a relajar un poco el ambiente tenso que llevábamos, la banda se vio forzada a separase para despistar a los polis por lo que no tenía manera de saber si algunos fueron atrapados, como líder es mi trabajo velar por todos y aunque sé que cada uno de ellos se sabe cuidar no puedo evitar preocuparme, solo rezo por que la pandilla de Jumpol la esté pasando peor nosotros.

Pelea de TerritoriosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora