✅Posesiva obsesión

Capítulo XIX. Luz en la oscuridad

—Nunca te he faltado al respeto... Cada cosa te he contado de mi vida— dije viéndolo a los ojos, enfrentándolo— Cada cosa te he obedecido... Te he hecho caso. ¿Por qué no me dejas algo a mi favor?

—Hazzel... Solo quiero que estés a salvo.

—¿Y con esta vida crees que lo estoy? Dylan está enfermo, solo me lastima y Adham me protege, él no me hace daño ¿Y quieres apartarme de el?

—Discúlpame... Me salí de control... Te quiero mucho hermana, no quiero que nada te pase, tienes razón, si Adham te hace feliz está bien.— suspiró mi hermano tratando calmarsr— Debo confesar que sí se nota que quiere tu bienestar, que te cuida con su vida, pero si se atreve a lastimarte...

—No lo haré y asumiré las consecuencias si eso sucede.— lo interrumpió Adham. Una parte de mi estaba asustada, otra estaba feliz, otra triste y otra con coraje, me aferré abrazando a Adham, él me correspondió el abrazo y besó mi frente, me dirigí hasta mi hermano y lo abracé.

—Gracias...

Entré a mi habitación y ahí estaba Danna acomodando la información y decorando la cartulina.

—¿Haremos el trabajo en cartulina?— pregunté sonriendo, las lágrimas se veían en mi rostro por todo lo que había llorado.

—No lo se, pero tenía que hacer algo, lo siento pero los cuartos están casi a lado. Y por lo que veo no fueron discretos ¿En qué quedaron?

—Lo aceptó... Si escuchaste todo, no tengo que contarlo, ¿cierto?.— suspiré.

—¡Adham es un amor!— susurró emocionada— Me alegro que finalmente estés feliz.

—Si, en este pasillo lleno de oscuridad, hay un brote de luz.— dije tranquila.

—Cuando estás feliz sí que te vuelves poeta.— Yo sólo reí.

—Comencemos a planear la exposición. — cambié de tema. Duramos aproximadamente 2 a 3 horas.

Eran las 4:47.

—¡Listo! Entonces estamos preparadas.

—Supongo. Aunque espero que no opinen entre la exposición.—dije apenada.

—Descuida. Ese profesor te pregunta después de exponer, no te evidencia, te corrige.

—Lo bueno, si no, estuviera muy nerviosa.— Reímos hasta que tocaron la puerta.

—¿Quién es?— pregunté. ¡Si era Dylan lo mataría! Bueno, solo le haría una fractura.

— Yo, pequeña.

—Es tan dulce— suspiró Danna abriendo la puerta, estaba Adham.— Pasa. Tu princesa está aquí— cerró la puerta y yo abracé a Adham.

—Descuida pequeña, tranquila. Todo está bien.

—Gracias por defenderme y apoyarme.

—No agradezcas, no voy a negarte que si no hubieras detenido tú el golpe... Quizá no estaríamos aquí. Le hubiera respondido el golpe a Ryan— Dijo riendo.

—Lo bueno que no pasó— bromee

—Bueno. Bueno— habló Danna.— Hazzel tiene que arreglarse para irnos. ¿Irás con Lucas, no?— le preguntó a Adham.

—Claro. ¿A qué hora es?

—Es a las 5:30— respondí observándolo, era tan lindo. Sentía que algo en mi volvía a brillar.

—Bien. Entonces te veo a esa hora. Pasaré por ti.

—Ryan también irá.

—Entonces nos iremos en su auto— sonrió mientras salía de la habitación y nosotras comenzamos a arreglarnos.