Para: minah@gmail.com
Asunto: Preocupado...Sea lo que sea, Mina, volvió a pasarme. Después de enviarte el e-mail, fui a escribirle un correo a Lis y recordé el icono con forma de murciélago que tengo en el Escritorio de la laptop. La vez anterior no llegué a averiguar para qué servía, así que intenté descubrirlo ahora. Hice doble clic sobre él y... volví a desmayarme. Perdí el conocimiento hasta esta mañana. El sol que entraba por la ventana me molestaba en los ojos. Con dificultad conseguí ponerme de pie. Estaba débil. Y sediento. A tientas avancé hasta la ventana y la cerré. Esta vez no fui al médico. Sabes que odio los hospitales, el olor de las medicinas. Pasé la mañana en la cama, sintiendo voces en la cabeza que me hablaban en un idioma extraño pero que lograba entender sin mucho esfuerzo, voces oscuras que me incitaban a... a algo que no recuerdo. Hice un esfuerzo por tomarme un poco de sopa, pero un gusto amargo me llenó de asco y tuve que parar después de dos cucharadas. Los retortijones que le siguieron me obligaron a volver a la cama. Ahora me siento un poco mejor y por eso te escribo. Sigo sin poder acercarme a la ventana a causa del fuerte sol habanero que hiere mis ojos. Creo que la cabeza me va a estallar.
Si puedes, escríbeme.
J.
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Upir.exe
HorrorDurante un Congreso Internacional de Software, un CD es dejado como al descuido con una inscripción: Instálame. No, no es un virus informático. O sí, sí es un virus, pero uno tan letal que quien lo instale no demorará en arrepentirse.