Para: minah@gmail.com
Asunto: Sin noticias.No lo vas a creer, Mina, pero esta mañana, hace sólo unos minutos, escuché unos golpes en mi puerta. Me desperté sobresaltada, casi gritando. Me levanté en punta de pie y fui hasta la sala. Pegué el oído a la puerta y no escuché nada. Pregunté si había alguien ahí y nadie contestó. Eché un vistazo por la mirilla y no había nadie. Me asomé a la ventana y todo seguía oscuro y solitario. Me costó llenarme de valor, pero lo hice. Quité uno a uno los tres pestillos de la puerta y la abrí, despacito, y efectivamente, no había nadie en el portal, ni en la acera, ni en toda la cuadra. Sólo había en el suelo, frente a la puerta, una cajita plastica de CD. Volví a entrar y me apresuré a poner de nuevo los pestillos. Fui al baño, me eché agua en el rostro y me decidí: abrí la cajita y en su interior estaba lo que sospechaba. Un disco compacto, marcado con tinta negra: Instálame.
No creo en fantasmas, Mina, y mucho menos en zombis ni vampiros. Y sí, he estado sugestionada con todo lo que ha pasado, pero no lo suficiente como para dudar de mi propia cordura. Así que creo que hay una sola manera de averiguar qué pasó con Jonathan: instalando el dichoso software y ver qué pasa.
Lo haré ahora mismo. Después te contaré.
L.
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Upir.exe
HorrorDurante un Congreso Internacional de Software, un CD es dejado como al descuido con una inscripción: Instálame. No, no es un virus informático. O sí, sí es un virus, pero uno tan letal que quien lo instale no demorará en arrepentirse.