Para: lisvh@yahoo.es
Asunto: ¡¡URGENTE!!Amiga, disculpa que una vez más te moleste con relación a mi hermano Jonathan. Si algo difícil tiene esto de vivir tan lejos el uno del otro es precisamente no poder estar ahí cuando se nos necesita. Tú, que sabes que perdimos a nuestros padres siendo todavía pequeños, conoces el vínculo tan estrecho que hemos creado Jonathan y yo. Como suele decirse, nos tenemos a nosotros solos. Y el hecho de haberme ido del país, de llevar tres años ya sin poder abrazarlo y besarlo, sólo ha dificultado las cosas, aunque por fortuna no ha mermado ni un ápice el cariño que nos tenemos.
¿Sabes cuál es mi único consuelo? Saber que tú estás ahí para él, ocupando no sólo el lugar que yo abandoné, sino además ocupando el tuyo propio, el que has sabido ganarte desinteresadamente. Esa amistad que existe entre ustedes, amén de lo que pudo pasar en el pasado, de que funcionara o no, es una verdadera bendición. Créeme. Pues si algo he necesitado yo en estas tierras lejanas es, precisamente, una amistad así. Un hombro en el cual llorar. Un pecho donde buscar refugio. Una voz que me dé palabras de aliento. Una mano que me ayude a sortear los obstáculos.
Entenderás entonces que vuelva a escribirte, preocupada como estoy por mi pequeño hermano. Ya le salvaste la vida una vez, hace sólo unos pocos días. Y te pido ahora, te ruego, que hagas lo mismo una vez más.El jueves me escribió y, desde entonces, no he vuelto a saber nada de él. Y ya casi es domingo. No es que sea raro que nos pasemos dos o tres días sin contacto, es que su último e-mail me dejó muy tensa, pues parecía alterado. Dijo que aquel CD que tú rompiste había vuelto a aparecer, misteriosamente. Y sentí terror en cada una de sus palabras. Le he escrito seis mensajes ya. Le he llamado al móvil una docena de veces. Otro tanto he hecho al fijo de la casa. Y el resultado ha sido siempre el mismo: Nada. Como si hubiese dejado de existir.
Te pido, amiga (no creo estar cometiendo un error si te llamo hermana), que vayas a su casa y eches un vistazo. Que veas cómo se encuentra y me escribas de inmediato. Tengo el pasaporte listo para regresar si fuera necesario. Pero de lo que tú me informes dependerá ese viaje, si lo hago o no.
Estaré atenta a tu respuesta. Gracias de antemano. Espero algún día devolverte tantos favores.
Un beso entrañable,
M.
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Upir.exe
TerrorDurante un Congreso Internacional de Software, un CD es dejado como al descuido con una inscripción: Instálame. No, no es un virus informático. O sí, sí es un virus, pero uno tan letal que quien lo instale no demorará en arrepentirse.