Capítulo 21

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Callum, Rayla y Ezran bajaron del auto con total calma, Zym iba oculto en la mochila del niño mientras que Cebo en la mochila de Callum. Rayla iba adelante del par de hermanos quienes solo se miraban con seriedad, la chica toco la puerta y bastaron unos cuantos segundos para que la puerta se abriera, relevando a un elfo, al parecer igual de luna que Rayla, aunque de piel oscura y cabello blanco, al ver a Rayla, una deslumbrante sonrisa se dibujo en sus labios.

-Rayla, me alegra tanto verte

-es mutuo, Ethari- dijo la chica para entonces abrazar al elfo frente a ella, duraron un par de segundos para despues separarse- y ellos son mis amigos, Callum y su hermano menor, Ezran.

-en realidad, te estabamos esperando- dijo Ethari- pasen por favor

Rayla levanto una ceja en clara señal de confusión pero sólo obedeció a Ethari. Callum y Ezran la siguieron y una vez que los tres estuvieron dentro, Ethari cerro la puerta, Entonces otro elfo salió de lo que parecía ser el comedor.

Rayla sonrió.

-Hola Runaan

Runaan no respondió, solo camino hacia ella para entonces abrazarla fuertemente, Rayla solo correspondió el abrazo con algo de duda, esto no era común en Runaan, no era del tipo que abrazaba solo por que si.

Algo estaba mal.

Runaan se separó de ella con una expresión sumamente preocupada.

-que bueno saber que tu estas bien, estabamos muy preocupados- menciono Runaan.

Rayla fruncio un poco el ceño, estaba claramente confundida.

-¿por que?- pregunto la chica, separandose de su mentor.

-hemos tratado de contactar a Tiadrin y Lain durante días- explico Runaan, mientras Rayla levantaba un poco las cejas.

-hemos llamado a cada estación de policía y a cada conocido que tenemos en Katolis, creímos que algo les habría pasado- continuo Ethari- pero ahora sabemos que están bien

Rayla agacho la mirada, ahora se sentía preocupada, sus padres jamás desaparecerían así, no de esa forma.

-no lo se, cuando me fui la policia... iba a hablar con ellos pero no los he llamado ni nada

-¿Que?- pregunto Ethari.

-¿Como se te ocurre, Rayla? Huir de casa es de lo más bajo que puedes hacer

-un momento, ni hui, ellos me dieron su permiso para salir de casa- empezó a explicar Rayla- y fue por que no tuvimos opción

-¿tuvimos?- pregunto Runaan, quien al parecer ni siquiera se había percatado de la presencia de Callum y Ezran.

Al ver al Par de hermanos, Runaan fruncio el ceño.

-¿que has hecho?

-nada, no hemos hecho nada pero nuestro profesor de quimica no podría decir lo mismo- dijo esta vez Callum, tratando de sonar tranquilo pero siendo sincero.

Estaba más que nervioso, Runaan era intimidante.

-ningún humano es bienvenido aquí- menciono el elfo con voz sería.

Rayla levanto ambas cejas.

-ellos solo quieren ayudar...

-haz enloquecido...

-hay que escucharlos, Runaan- menciono Ethari- estoy seguro de que...

-¡no! Los humanos no son...

-¿buenos? Claro que si, pero igual que nosotros, también están los que no hacen lo correcto, los que hacen cosas malas, ni siquiera es tan difícil de entender- explicó Rayla de manera seria- vinimos aquí por que... Ez...

Ezran se Quito la mochila de sus hombros, para entonces dejarla en el suelo y destaparla, revelando a Zym.

Los ojos de Runaan y Ethari se abrieron como platos.

-es... El príncipe dragón- murmuro Ethari- ¿como...?

-lo encontré en la escuela, uno de los profesores lo secuestro y... Escapamos para regresarlo, claro, todo con la ayuda de los padres de Rayla- menciono Ezran.

-espera ¿el príncipe dragón?- pregunto Rayla confundida.

-llegaron rumores de que el huevo había sido robado pero jamás pensamos que fuera real- menciono Ethari.

-es... Es hermoso- dijo Runaan, mirando al pequeño dragón quien se acercó a el, y le brindó una pequeña sonrisa.

-esto no podría ser peor...- Menciono Rayla.

Ethari miro las ventanas, pequeñas partículas de color lila empezaron a aparecer de la nada, eran hermosas pero el mayor sabia que también eran peligrosas.

-en realidad, si puede ser peor, los persiguen fuerzas oscuras- menciono Ethari.

-¿Como pueden saber eso?- pregunto Callum.

-esas luces purpura- menciono Ethari, haciendo que todos miren a través de las ventanas- es magia oscura, los están rastreando...

-si saben que el príncipe esta aquí, entonces seguramente ya tienen a Tiadrin y Lain- menciono Runaan, entonces miro a los chicos- bien, se quedarán por hoy, si quienes los buscan están en Katolis, tienen un par de días de ventaja

-hay otro detalle- menciono Rayla- alguien nos seguía en el camino, lo perdimos al entrar a la ciudad pero no fue fácil

-aquí estarán a salvo- dijo Ethari.

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Era media noche, Ezran, Callum y Rayla estaban en la misma habitación, Ezran dormía plácidamente mientras que Callum y Rayla no tenían la misma suerte.

Callum trataba de relajarse y dormir, pero no se sentía del todo cómodo, de alguna forma estaba... Raro, todo lo contrario a Rayla, quien estaba más bien... Preocupada, necesitaba un vaso de agua por lo que se levantó de la cama y bajo al primer piso. Callum se dio cuenta de esto, así que fue tras ella, al bajar lo primero que vio fue a la chica en el comedor, con un vaso de agua frente a ella y ella absorta en sus pensamientos, Callum se acercó silenciosamente a ella y se sentó a lado de ella, puso una mano en su hombro haciendo que ella gire su mirada para verlo.

-¿todo bien?- pregunto Callum con dulzura.

-podría estar mejor- menciono Rayla- es que... Es mucho Callum, hace una semana estabamos comprando comida no saludable para un viaje Escolar y ahora... Tenemos que regresar a un dragón que resulta ser el príncipe y que si no lo logramos entonces todo el mundo estará en guerra

-si, honestamente no es tan malo- respondió Callum de manera tranquila, tratando de aanimar a Rayla.

Rayla levanto la ceja.

-o bueno, quizás si pero lo importante es que... Estamos juntos

Rayla sonrió un poco entonces recargo su cabeza en el hombro de Callum, mientras suspiraba.

-es lo único bueno de este estúpido viaje, misión o... Lo que sea esto, tenerte conmigo es... Lo mejor

Rayla miro a Callum, entonces tomo su rostro para después besar sus labios. Dicho beso fue correspondido por el chico. Era suave, tierno pero también la angustia se hacia presente, era un beso especial, distinto, un recordatorio de que se tenían el uno al otro y no había manera de que eso cambiará ¿verdad?

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Harrow, Sarai y Amaya llevaban un buen tramo de camino, sabían que si conducían día y noche probablemente alcanzarían a los chicos, pero no contaban con que unos cuantos coches más adelante, estaban Viren y sus hijos, dispuestos a hacer lo que fuese necesario para lograr su objetivo.

¿Quien ganaría?

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