One-shots anime (personaje x lectora)

Sasori - Naruto

Pedido por: PauELD

Arco argumental: El rescate de Gaara. 

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Las lágrimas empezaron a caer de mis ojos al leer la nota que reposaba sobre la mesa del comedor. 

Me he ido en busca del verdadero significado del arte. Quiero conseguir nuevas marionetas y hacerme más fuerte. Adiós, _____.

No me podía creer que Sasori hubiera abandonado la aldea. Nos conocíamos desde pequeños y siempre le había amado en secreto, mas él ya no estaba aquí como para decírselo. 

Vi llegar a la abuela Chiyo y me lancé a abrazarla. Ella empezó a consolarme acariciándome el pelo. No iba a negarlo, me sentía egoísta. La de pelo violeta había criado prácticamente sola a Sasori y, en vez de poder desahogarse, estaba teniendo que tranquilizarme, pero no podía evitarlo. Las palabras dejadas en la nota retumbaban en mi cabeza una y otra vez. Sentía como mi mundo al completo se derrumbaba lentamente y un hueco se iba formando en mi corazón. Me sentía vacía sin el pelirrojo. 

Chiyo: Tranquila, volveremos a verle.

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Todos los ninjas de Suna corríamos de un lado para otro asustados. El kazekage se encontraba en el cielo, peleando contra un chico de la organización akatsuki. De un momento a otro, el rubio había vencido a Gaara y se lo estaba llevando. Kankurō salió corriendo para perseguirle antes de que pudieran pararle. 

Baki: _____, ve a asegurarte de que no hay heridos.

_____: Sí.

Hice lo que me indicó, mas el pelirrojo había conseguido salvarlos a todos. Estaba volviendo junto a Baki para informarle de la situación en la aldea cuando unos shinobis pasaron a mi lado corriendo con un herido. Les seguí para ver quién era, encontrándome con el hermano del kazekage envenenado. Todos intentaban hablar con él y mantenerlo despierto, pero el veneno estaba penetrando muy profundo en su sistema y cada vez le costaba más no caer inconsciente. Intenté ayudarles, mas su estado era muy grave y yo no era ninja médico. Finalmente, antes de cerrar los ojos por completo, abrió la boca para decir algo.

Kankurō: Baki... ¿Eres tú? Él es... 

Baki se acercó a él para escucharle, puesto que no era capaz de hablar a un volumen normal. Unos segundos después, él se alejó sorprendido y el marionetista perdió el conocimiento.

_____: ¿Quién es?

El jounin bajo la mirada, evitando que se cruzara con la mía.

Baki: Sasori de la arena roja.

No pude evitar reaccionar igual que él. Después de tantos años sin saber nada sobre él, había vuelto para secuestrar al actual kazekage. La sangre me hervía de la rabia, pero, aunque no fuera a admitirlo, muy en el fondo de mi corazón estaba feliz por saber que seguía vivo. 

Sacudí mi cabeza para librarme de cualquier pensamiento sobre el pelirrojo y me centré en Kankurō. Su salud era muy débil  y no había visto nunca antes ese veneno. Múltiples ninjas médicos intentaron salvarle, mas ninguno lo conseguía. Finalmente, en vista de la gravedad de la situación, decidieron llamar a Chiyo, la abuela de Sasori. Ella trató de crear antídotos repetidas veces, pero ninguno de sus experimentos funcionó.

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Los días pasaron y pronto Temari y los de Konoha estuvieron en la aldea. Sakura curó al marionetista y los demás nos preparamos para salir mañana en busca de Gaara. Estaba nerviosa por volver a ir a ver a mi amigo y amado de la infancia, mas lo importante en esta ocasión era rescatar al kazekage, sin importar contra quién tuviera que enfrentarme. 

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Apenas empezaba a amanecer cuando partimos de la aldea. No podía negar que estaba algo ansiosa por la idea de volver a ver a Sasori, pero ahora era un enemigo y, muy a mi pesar, tendría que tratarle como tal. Tras un par de días de viaje, finalmente llegamos a la base de akatsuki. Allí, nos encontramos con más ninjas de la hoja, los cuales se dispersaron para quitar el sello. Una vez este había sido anulado, la pelirrosa destruyó la piedra que bloqueaba la entrada, permitiéndonos ver a los dos miembros de la organización criminal que habían inundado de caos la aldea. El rubio empezó a provocar a Naruto y, después de una pequeña discusión con su compañero sobre si el arte era eterno o efímero, salió de la cueva llevándose a Gaara. Los de la hoja lo persiguieron, dejándonos a Chiyo y a mí con Sasori como contrincante. Revisé que en mis bolsillos que se encontraban las muestras del antídoto que me había dado la ninja médico de Konoha y me coloqué en posición para comenzar la batalla.

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Los golpes y armas iban de un lado para otro. No entendía cómo era posible que Sasori hubiera derrotado al tercer kazekage, mas su marioneta frente a mis ojos me lo confirmaba. Después de muchos ataques, habíamos conseguido derrotarla, pero él seguía sacando marionetas, incluyéndose a sí mismo. No podía creer que hubiera transformado su propio cuerpo para utilizarlo como arma, y menos aún que su abuela también lo hubiera hecho con su brazo.

La pelea continuó durante bastantes minutos y el agotamiento empezaba a percibirse en nuestros movimientos. Chiyo había sacado a sus diez famosas marionetas y yo la apoyaba como podía peleando directamente contra las del pelirrojo. Ella me entregó una herramienta que nos aseguraría la victoria y me explicó su plan. Comenzamos a llevarlo acabo y, en cuestión de segundos , Sasori estaba acorralado contra la pared. 

Me acerqué a revisar el estado de salud de la mayor, feliz por haber vencido, mas pude ver como una marioneta intentaba atacarla y me interpuse, recibiendo un golpe de la espada. Ella gritó horrorizada por el daño que me había causado mientras que yo intentaba averiguar cómo seguía moviéndose. Vi el pequeño contenedor incrustado en su pecho y rápidamente lo entendí todo.

_____: Tenemos que destruir el cilindro.

Conseguí sacar la espada de mi cuerpo tras un enfrentamiento directo son Sasori y él se alejó para coger carrerilla antes de realizar su próximo ataque. Empezó a correr hacia nosotras, pero, antes de que llegara y nos golpeara, Chiyo movió las marionetas de sus padres para que clavaran sus cuchillas en el punto débil del pelirrojo. Le miré confundida. Podría haber esquivado el ataque fácilmente, mas no lo hizo. Sangre violeta empezó a deslizarse por la madera desde su corazón y el marionetista sonrió ligeramente, eliminando todo rastro de la expresión de odio y locura que tenía anteriormente.

Sasori: Vaya... Parece que este es el final. Nunca pensé que fallecería a manos de vosotras dos, y menos utilizando a mis padres. Os daré información como premio por ganarme. Vuestros amigos querían saber más sobre Orochimaru, ¿no? Diles que vayan al puente Tenchi en Kusagakure dentro de 10 días. Uno de sus subordinados es mi espía e iba a reunirme con él ahí.

Sasori escupió un poco de sangre.

Sasori: _____... Hui de la aldea y me pasé años buscando el verdadero significado del arte, pero no me di cuenta de que ya lo había encontrado. Tú eres el arte, _____.  Todo este tiempo te tuve a mi alcance, mas no super verte y entenderte. Siento mucho todo lo que te he hecho pasar.

Sus ojos se fueron cerrando lentamente mientras su cuerpo dejaba de ejercer fuerza y las marionetas a sus lados se soltaban.

Sasori: Te quiero y siempre te he querido, _____. Gracias por enseñarme lo que es el arte.