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ARABELLA.
-Buenas tardes. -dice un Enmanuel nervioso entrando.

-¿Buenas tardes? hijo, que es a qué hay. -dijo mi pai-

-Tío Enmanuel -lo saluda mi sobrino corriendo a sus brazos-

Me volví adicta a ver cómo Anuel se lleva bien con todos los niños que se les acercan.

Enmanuel lo tomó en sus brazos dándole un fuerte abrazo, saludó a cada miembro de la familia con un abrazo, incluyéndome.

-Bueno, ¿Ya te vas o te quedarás ahí como una estatua? -Dijo mi papá parándose de la silla-

-Estoy muy ofendida papi -Dije en broma- Bueno me voy, no me extrañen chicos. -Tomé mis cosas -

-No lo haremos, ya vete -Dice mi hermano-

Le saqué mi dedo del medio y me dirigí a donde estaba mi padre para darle otro abrazo pero el se me adelantó.

-Te amo princesa, siempre serás la nena de papi -Me abraza más fuerte- Ya eres toda una mujer.

Le regalé una sonrisa, no quería ponerme a llorar aquí mismo otra vez, acabaría con la paciencia de todos.Con Enmanuel tomando de mi mano, salimos de aquella gran casa, subí mis cosas en su Roll Royce y nos subimos.

-¿Qué pasó? -Dije al ver cómo no arrancaba aún-

-Eres la mujer más hermosa que he visto en toda mi vida -Me besa-

¿Y ustedes creen que iba a evitar ese beso? fue un beso tan esperado, sus manos viajaron por mis caderas llevándolas hasta mi cuello, como impulso me quité el cinturón de seguridad.

-Papi no -Me separé de el- Esperemos a casa -Lo miré-

El se dedicó a solamente asentir con la cabeza, yo quería llegar rápido a casa, nesecito tener a Enmanuel, estaba totalmente nesecitada de el. Pero el se metió por un lugar desconocidos para mí y dejó de manejar.

-Mera este no es el camino a casa, chico no -Negué con la cabeza-

-Ya no aguanto, te nesecito ahora -Me miró con deseo-

Sonreí como toda una ganadero y me subí encima de él, le quité su cinturón y comenzamos a besarnos.

-Mielda, ¿No había otro pantalón para ponerte? -Dice agitado-

Reí ante su comentario y ayudé a bajarlo, lo tiró por no sé dónde y entró dos de sus dedos moviéndolos de forma rápida.

-Uy si -Grité- sigue vamos.

Con una  mano me agarraba del hombro de Enmanuel mientras brincaba y con mi otra mano lo mansturbaba, parecíamos dos animales hambrientos, solo se escuchaban nuestros gemidos.
Enmanuel sacó sus dedos de mi y se los entró en su boca chupandolos como si tuviera comida, tiró el sillón para atrás, le bajé  un poco el jean que llevaba puesto y baje un poco su bóxer, dejando libre su bicho.

-se nota lo mucho que me extrañaste. -sonreí para llevármelo a la boca-

Lo entré completo en mi boca, mientras le regalaba lamidas y chupaba, podía ver en su cara lo mucho que le gustaba el trabajo que le estaba haciendo. Simplemente lo mejor para mí hombre.

Avísame. usando te ven... -No terminé de decir porque ya se había venido en mi boca, no tuve más remedio que tragármelo-

-Eso fue increíble. -Me miraba atentamente mientras trataba de normalizar su respiración-

-Ponte como me gusta que te daré por cada noche que no estuve a tu lado -Me dice en el oído-

Me di la vuelta sentándome en su bicho. El me tomó por el pelo y comenzó a penetrarme de una manera fuerte y rápida.

Me acomodé mejor, sentía como que si seguía como estaba iba a terminar en dos pedazos.

-Ahhh-Gemí- sigue

seguí brincándole hasta que me vine, nos besamos unos minutos y volví a mi asiento.

-No me voy a poner esto -Tomé mi party en mano- Está todo húmedo -Dije como niña pequeña.

Río, se acomodó su ropa y siguió a casa.

¿Le gusta las partes hot?

...

Tu Sonrisa | Anuel AA |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora