ғɪɴᴀʟɪᴢᴀᴅᴏ
Se volvieron a encontrar de forma inusual.
San amaba intensamente a ese omega gruñon y posesivo. Y wooyoung adoraba con su alma a su alfa tierno, amoroso y a veces un poco pervertido.
Pero un día ocurrió algo que cambio la vida de ambos...
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El corazón de San estaba acelerado, sus manos sudaban, en su estomago se sentía un cosquilleo, el día había llegado, aquel por el cual había esperado con tanta ilusión, estaba ahí gracias a la diosa Luna ella había cumplido su deseo, al fin se casaría con su cachorro y formarían una hermosa familia. Estaba completamente enamorado, quería estar junto a Wooyoung para siempre, el era su energía y su razón de vivir.
—Ahora me toca hacerte compañía. —Mingi entró en la habitación.
—Gracias Mingo. —
—Para eso estamos los amigos, ahora levanta tu trasero, es hora de ir al altar. —dio suaves golpes en el hombro del peligris.
—Estoy nervioso, mi cachorro esta igual, puedo sentirlo por medio del lazo. —sonrió.
—Los señores Choi ya están esperando en los asientos, estaré sentado junto a Hongie, mucha suerte San. —Mingi salió de la habitación.
—Llegó la hora. —San susurro para el mismo y suspiro.
Salió de la habitación, dirigiéndose hacia el altar, todos los invitados se encontraban sentados en sus respectivos lugares, sus padres al verlo le sonrieron, Hyunah y Hyojong estaban orgulloso de su hijo y Shiber estaba junto a ellos tenía un pequeño moño blanco en su cuello.
Hongjoong estaba junto a Mingi, estos le sonrieron transmitiéndole tranquilidad.
Pero los minutos pasaron y San empezó a sudar, Wooyoung no aparecía por ningún lado, eso le preocupaba un poco. Se concentró e intento hablar por medio del lazo, quería asegurarse de que todo estuviera bien.
"Cachorro, ¿está todo bien?"
Los segundos pasaron y no hubo respuesta, hasta que al fin pudo escucharlo.
"Todo está bien, espera por mí"
Sonrió, su omega estaba bien, muy pronto lo vería.
. . . . . . .
—Mierda... Yunho ayúdame, mi maquillaje se arruino. —el omega estaba arreglando su cabello.
—Wooyoung, vamos tarde, San hyung debe de estar llorando pensando que lo dejaste plantado. —el beta habló mientras arreglaba el maquillaje de su mejor amigo.
—No tengo la culpa de que me dieran ganas de ir al baño y para terminar con broche de oro me puse sensible y luego me dieron ganas de vomitar. —suspiro molestó. —
—Lloraste por mucho tiempo, me asustaste demasiado. —arregló el cabello del omega dando los toques finales.
—El embarazo me pone sensible. —toco su vientre. —Duraznito, muy pronto veremos a papá. —
— ¿Qué pasa? ¿Todo bien? —Yunho se preocupo cuando Wooyoung cerró sus ojos y dejo de hablar.
—Todo bien, me comunique con San por medio del lazo y estaba muy concentrado. —entusiasmado salió de la habitación junto a Yunho. —Ahora vamos, mi alfa me espera. —
