Historias de Vyndra

Capitulo23: Infiltrados

Tom se encontraba rodeado de desconocidos. Luego de que su maestra se fuera se sentía impotente, quería ir al lado de sus amigos, tenía miedo de lo que les podría pasar...

Para distraerse un poco de la situación decidió ver el estado de sus criaturas. El pequeño seguía igual, y le hacía gestos. En cambio Drako parecía estar terminando de actualizar su estado, apareció una cuenta regresiva que antes no estaba, parecía que faltaban unos minutos.

Esperó...

Pudo ver como la figura de Drako cambiaba de forma, según los datos ahora era más grande, 6 metros de cabeza a la cola, se movía a cuatro patas, podría volar y otras características, también destacaba el hecho de que podría elegir en que forma estaría si saliera en su forma física. Esto lo tranquilizó, ya que podría estar dentro de su apartamento.

Recuperó la conciencia y se comunicó con Tom.

- ¿cómo está todo afuera?- pregunto mientras investigaba su nueva forma.

- Es... es un poco complicado...

- ¿estás bien?

-Si... es solo que...

Un fuerte estallido se escuchó, el impacto resonó en el almacén y la gente respondió con pánico. Un grupo de personas trato de calmar a la gente, pero el ambiente había cambiado drásticamente

Drako estaba intentando acceder a la red pero no podía, vio la cara de confusión de Tom y pregunto de nuevo cuál era la situación, ya que solo podía escuchar lo que él le decía. Mientras algunos adultos se acercaron a la puerta y empezaron a forcejear con los guardias para salir del lugar. Tom pensaba que lo mejor seria quedarse adentro no tenía sentido lo que estaban haciendo... fue cuando noto que uno los hombres saco una "aguja" de un bolso y ataco directamente al guardia.

El resto que intentaba salir quedaron estupefactos por el repentino ataque.

- Quítense de mi camino. - dijo el asesino.

Una serie de gritos empezaron a escucharse. Murmullos de gente diciendo que era un dotado se escuchaban. Los que estaban a su alrededor se hicieron a un lado, no amenazo a nadie más simplemente, forzó la entrada y salio. Como no abrió la entrada con la autorización de los guardias un grupo de alarmas empezaron a sonar. Al mismo tiempo otras personas empezaron a salir de entre la gente y se reunieron con él.

Tom no sabía que hacer, no tenía forma de defenderse en este momento.

Un rugido se escuchó, todos los presentes sintieron un miedo que les dio escalofríos. El grupo que se había reunido, también estaban pálidos, después de una charla algunos salieron del lugar. Mientras el resto se enfrentó a la multitud.

- Mientras hagan lo que digamos no les pasara nada.- dijo uno con voz autoritaria pero algo extraña.- los que tengan la pulsera que los conecta a las criaturas entréguenla y no olviden renunciar a sus derechos.

- Ni siquiera pienses que entregaré a mi amigo. No importa que sean dotados. - grito una mujer

Inmediatamente uno de los dotados ataco a la mujer con una ráfaga de viento que la derribo a ella y las personas que estaban detrás. De nuevo los gritos resonaron, y algunos de los que estaban más atrás liberaron a sus criaturas y les ordenaron que atacaran al grupo que vigilaba la puerta.

Desde ese entonces todo fue caótico.

Quería huir, pero no sabía hacia donde ni como. No podría ir por la puerta, no podía superar a esos adultos y si de alguna forma lo lograba todavía estaban los que salieron. Eligió buscar la entrada desde donde deberían ingresar los productos al depósito. Parecía que otros pensaron lo mismo porque identificó a un grupo intentando abrir unas enormes puertas a unos 50 metros.