Historias de Vyndra

Capitulo 41: Dentro de la habitación

Cada vez que Noelle se encontraba con Iska, no podía evitar pensar que se comportaba como un niño humano. No como un dotado que se los adiestra desde muy temprano para que funcionen como el grueso de la sociedad no-dotada espera.

Si bien mantienen la curiosidad y el juego, la inocencia desaparece rápidamente al hacerlos conscientes de lo que pueden lograr con su don.

Noelle todavía recuerda la vista de los niños en su primer año escolar, cuando los hacían ver escenas en AR, de los archivos que había de la época "oscura" de los dotados. Llegaban al extremo de usar la sincronización con los personajes en VR para que sintieran lo que sentían las víctimas, así eran las clases de historia.

Solo lo llevaban al punto en el que lograran instalar ciertas ideas y valores "correctos" que debían seguir los dotados. Eran cosas que ningún niño normal vería nunca a esa edad.

Al menos que haya vivido en una zona de guerra como ella. Pero aun así lo llevaban a un extremo dañino para la mente de un niño.

Y en los ojos de Iska podía ver esa inocencia que había desaparecido en los pequeños dotados.

Por lo tanto no se sorprendió como Tom cuando descubrió que su criatura estaba en la "habitación".

***

Iska no dejo de sorprenderse durante todo el viaje, descubrió un lado salvaje de sí mismo que no sabía que tenía y no le desagradaba. A diferencia de Vyndra en este mundo podía moverse dentro de todo con más libertad, no tenía que estar todo el tiempo pegado a Tom, se estaba divirtiendo demasiado.

A excepción del combate aislado con esa criatura que le dejo un sabor de boca amargo, ya que se dio cuenta de que se dejó llevar demasiado. No hubo otro momento que le hiciera cambiar de opinión sobre lo maravilloso que era este viaje.

Cuando encontraron la extraña habitación circular dentro de la caverna, comenzó a rodearla para ver si había alguna forma de entrar. Tenía una extraña necesidad de ver que había dentro. Toco las paredes y parecía que si quería romperlas necesitaría mucha energía y lo más probable es que si de alguna forma lo lograra, luego no podría moverse durante algún tiempo. Probablemente si hacían algo en conjunto con sus compañeros podrían romperlo.

Sin dejar de lado esa idea, todavía quería ver si podría encontrar alguna forma. Cuando escucho decir a Sarah que no era necesario saber que había dentro, por alguna razón se desesperó.

Empezó a idear formas de entrar adentro, una más ridícula que otra. No sabía porque pero quería entrar adentro, no, no es que no supiera. Simplemente no podía calmar su curiosidad ardiendo en su inconsciente, miro hacia el techo de la caverna, la luz no llegaba de tono frío no llegaba a cubrir todo, pero noto que había un espacio entre la habitación y el mismo.

Talvez podría haber un hueco en esa parte. Apostando a esa posibilidad salto impulsándose con su habilidad para controlar al aire para cubrir más distancia. Cuando llego al borde clavo sus garras y se sostuvo con fuerza, de a poco se fue acomodando y se movió hasta llegar a ese espacio vacío.

Sin darse cuenta en que momento, cayo dentro de la habitación, algo mareado por el golpe y todavía acostado en suelo miro hacia arriba y supo que su apuesta había acertado, directamente no había un "techo". Fuera del espacio cóncavo, en la distancia se notaba las estalactitas y el techo de la caverna.

La habitación resultó ser más profundo de lo que pensaba, y no solo era profundo sino que también el espacio dentro era bastante extenso.

En el centro sobre una pila de rocas había un objeto que brillaba intensamente, además podía ver que había raíces que salían de la tierra y otras que se abrían paso entre rocas se entendían hacia el foco de luz.