Un reino oscuro

Capítulo 6 - Hibridos

“Bellabel ya llevaba dos años viviendo en la mansión para cuando llegó Luke de 9 años de edad (un año mayor que ella). Era un lindo niño de ojos azules que se la pasaba solo y que sin importar que tanto intentara hacer amigos nadie se le acercaba, algunos le tenían miedo por ser parte lobo y pensaban que lo mejor era intimidarlo antes de que notara que era más fuerte, no habían tantos híbridos como ahora y Michael aun no había llegado, casi no habían adultos presentes y Bel prácticamente vivía buscando dulces así que nunca prestaba atención a lo que pasaba.

Un día decidieron ponerlo en su lugar y lo acorralaron en la cocina.

-    Tú no tienes por qué estar aquí – comenzó uno que se creía el jefe – no eres nada.

-    Soy un Obscuro – respondió tímidamente.

-    Eres un asqueroso híbrido, ¡JOHN DICE LO MISMO! - todos se comenzaron a reír.

-    ¿A quién le importa lo que dice ese vejestorio? – dijo una voz que no parecía tener dueño alguno.

Todos se asustaron excepto Luke, sabía que esa voz que pocas veces se escuchaba  le pertenecía a una chica que siempre permanecía al lado de quien parecía ser su hermano.

La sombra de la nevera se alargó un poco y apareció una chica de grandes ojos grises llenándolos de terror y asombro, nadie de su edad podía hacer eso todavía.

Al notar quien era, el de adelante comenzó a actuar todo arrogante y superior, como si fuera alguien importante.

-    WOW, otra mixta, parece que tienes una amiga perdedor.

-    Cállate – Luke comenzó a sentir confianza con solo estar cerca de ella.

Antes de que le pudiera responder notó que una clase de lazo le tapaba la boca, Luke estaba demostrando parte de su potencial pero sin querer tal vez había transformado esto en una pelea de sombras; termina de amarrar al chico y mira hacia adelante, Bel miraba de reojo, dejaban a entender que no serían vencidos fácilmente, los niños trataron de escapar pero Bel no los dejó, les dio una advertencia y los mandó volando de ahí.

Ellos nunca se habían hablado, se miraban de vez en cuando y al estar sus habitaciones en el mismo lado de la casa se saludaban pero nada más. No se sabía de quien ella era hija ni con que especie estaba mezclada y se negaba a decirlo, pero se sabía que tenía un gran poder. El había sido dejado a cargo de Beth, la madre de James mientras sus padres estaban en la Casa en Texas.

Era dos años mayor que James, y no andaba mucho con él.

-    ¿Quieres chocolate? – pregunto Bel repentinamente teniéndolo ya en mano.

-    No me gusta el chocolate – dijo para luego sorprenderse de la cara que ella hizo, no pudo evitar reírse – aceptaría algo de limón, si tienes.

Ella comenzó a buscar en el bolsillo rojo de su pantalón estilo militar negro, parecía tener una fábrica de dulces ahí adentro, finalmente saco una paleta de limón y cuando él lo tomó ella le sonrió de una forma tan autentica y llena de cariño que  no pudo evitar enamorarse,  no era sorpresa que eso pasara a los 9 años, su forma de vida hacía que estos chicos maduraran rápidamente para poder sobrellevar sus responsabilidades con el mundo, debían ser serios, claro, tenían derecho a divertirse pero aun así se casaban temprano con la persona que realmente amaban para tener una razón más de volver a casa, establecían familias rápidamente por si no podían regresar.

Tiempo después llego un chico algo robusto por ser parte oso llamado Michael, nadie lo molestaba ya que se había hecho amigo de Luke, estaban convirtiendo el lugar en uno  amigable para los híbridos, la única que se atrevía  a molestarlo pellizcándolo y cargándolo era Analin, pero siendo 4 años mayor no podían decirle nada y siempre lo protegía de otros.

James era el único que faltaba por unirse por estar cuidando de su madre que había enviudado, esta lo motivó a que fuera parte del grupo, Bel hizo que se integrara fácilmente y se convirtieron en un equipo, era importante, es una tradición estar en uno desde jóvenes. Creaban un lazo inquebrantable que los salvaría y mantendría vivos por más tiempo”.