《 Crazy 》 | Park Jinyoung ✔️

C A P Í T U L O XXV

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Sus manos temblaban, su respiración era irregular, tenía la mirada perdida con la cabeza gacha, apretaba sus labios a cada tanto, consumido por la ansiedad.

Estaba frente a sus padres, se suponía que ya le había entrado confianza para decirle a sus progenitores lo que era, pero ahora que estaba frente a ellos, esas ganas de le fueron, la mirada que le mostraba su padre le hizo entrar un escalofrío al cuerpo, mientras que su madre, le daba una mirada llena de preocupación y angustia.

Su padre siempre fue muy estricto, mientras que su madre, era ella la que era comprensiva y atenta con el menor, eran opuestos, ¿cómo es que su madre pudo fijarse en él?

No es que lo odie, es solo que es muy severo, siempre quiere que hagan las cosas a su manera, no deja que opinen otras personas, siempre debe ser como él quiere, y la persona que se negara, terminaría mal, literalmente.

- ¿Pasa algo, hijo? - cuestionó su madre, con clara preocupación.

El menor exhaló un poco, tratando de calmarse.

- Hace mucho quiero decirles esto. - dijo, jugando con sus manos.

- Pues dilo. - exigió el mayor.

- No seas así - reprochó la esposa, luego dirigió su mirada nuevamente a su hijo. -, ve con calma. - le dijo, dándole una sonrisa para calmarlo.

- Y-Yo, estoy saliendo con alguien. - mencionó, cerrando los ojos al mismo tiempo.

- ¡Oh! Pero que buena noticia - exclamó su padre sonriendo con prepotencia. -, ¿quién es la afortunada? - le preguntó de repente, causando el nerviosismo del adolescente.

- Es un chico. - confesó, mirando al suelo. Supuso que aquella sonrisa de su padre había desaparecido, porque no se escuchó nada luego de la confesión que hizo, causando la ansiedad del muchacho.

La casa permaneció en silencio por un largo tiempo. Hasta que un estruendoso golpe lo hizo asustar, miró al frente, y vio el sofá dónde su padre estaba sentado, ahora estaba en el suelo, volteado. Su padre se acercó a él, de forma amenazante, cosa que hizo que el menor se levantara por instinto. Retrocedió unos pasos, mirando a su padre, quién tenía el ceño fruncido y su respiración estaba acelerada, vio como su madre se interpuso entre ambos, pero fue echada a un costado de forma brusca, ocasionando que cayera al suelo.

- ¡Ma-

No logró terminar con la palabra, por el brutal golpe que recibió, nuevamente retrocedió por puro impulso, llevándose la mano a su nariz, para verificar si estaba sangrando o no, la paliza que le dió fue demasiado fuerte, tanto que dejó adolorido esa parte dónde fue golpeado.

Alejó su mano, y como supuso, tenía un rastro de sangre.

Todo fue interrumpido cuando escucharon la puerta principal abrirse, dejando ver a la hermana mayor del adolescente, quién se quedó paralizada al ver tal escena.