Capítulo 8 ¡Eso es de mujer!

12.2K 1.6K 613
                                    


Después de recorrer una cantidad considerable de tiendas y unas cuantas discusiones con respecto a la ropa en descuento aún no habían comprado alguna prenda que fuera de su agrado.

Hua Cheng insistía en comprar ropa nueva pero Xie Lian se precipitaba sobre los descuentos y la ropa de segunda mano.

"No recuerdas aquella vez cuando les compré unas túnicas nuevas, eras tan lindo actuando de un pequeño" Xie Lian le hizo una cara de pucheros mientras sostenía una túnica de segunda de un color ocre no muy agradable a la vista.

El supremo ocultó una risita contenida: "Y una de esas túnicas resulto ser el brocado inmortal, vamos Gege, deja que te consienta un poco, solo por esta vez compremos unas cuantas cosas, el dinero no me falta"

El cultivador se mostraba renuente: "No lo sé San Lang, he vivido de ésta manera por 800 años, me resulta complicado cambiar"

Unos brazos se cerraron sobre la cintura del dios y recargó la cabeza en el hueco de su hombro: "todo en Gege es perfecto y no espero cambiar nada, es solo que todos estos años he ahorrado todo esto para tí, todo lo mío es tuyo, quiero compensarte por el tiempo que no pude estar para tí, además también recuerdo esa costosa túnica que me compraste cuando lucía como un niño, te debo una"

Xie Lian sentía que había un poco de manipulación y chantaje en su tono, pero contra esa mirada de cachorro indefenso no podía contenerse, terminó por ceder fácilmente a sus chantajes, él era quien cargaba el bebé deberían estar al revés los papeles.

Salieron de la tienda de segunda mano para entrar en otra un tanto más elegante, las telas se sentían tan suaves y sedosas al toque, por un momento pudo recordar sus viejos tiempos de realeza, la mayoría de los diseños eran ceñidos y con fajines demasiado ajustados, además que los pantalones incomodaban demasiado y su abdomen aún no estaba tan grande en ese momento, no podía pensar que pasaría después, aún se encontraba haciendo muecas sumido en sus pensamientos cuando Hua Cheng llegó juntó a él con un atuendo en la mano.

"Gege ¿Qué te parece algo como esto?"Xie Lian miró con detenimiento el traje en las manos de Hua Cheng y su rostro palideció.

"San Lang, ¡eso es de mujer! " El atuendo era de un color rojo vibrante adornado con cientos de perlas y una tela demasiado suave al tacto, tenía capas sobre capas de tela y un bordado magistral, se veía extremadamente costoso.

"Oh ¿Es así?, pero este hanfu es muy cómodo, además que la cinturilla está sobre el pecho dejando mucho espacio para el abdomen cuando comience a crecer, hasta podría no usar pantalones y sería mucho más cómodo" Hua Cheng alzó las cejas victorioso con una sonrisa coqueta rondando sus labios.

"¡Acabas de describir un atuendo de mujer!"

"Cuando te conocí llevabas un atuendo de mujer" dijo Hua Cheng por lo bajo.

El rostro de Xie Lian se ruborizó: "Además también lo llevabas esa vez en la ciudad cuando compraste ropa para mí", El dios quiso argumentar pero no podía hacerlo.

"Esos fueron casos completamente diferentes, estaba dentro de una misión, no puedo andar por la vida sin pantalones, eso no es correcto"

Hua Cheng puso una expresión de cachorro de nuevo y le mostró otros atuendos más que llevaba con él, ambos mucho más sencillos que los anteriores, aunque aún podía notar que los atuendos eran de mujer, la tela parecía ser mucho más sencilla, tenía un patrón de flores hermosas en color plata sobre una tela suave y pulcra de un color blanco puro, sin muchos adornos extravagantes, aquella túnica podía pasar como unisex, lo único que la hacía un poco diferente podía ser que la cinturilla quedaba sobre el abdomen, en este caso resultaba perfecto para la ocasión.

Después de analizarlas un rato asumió que sería la mejor opción, si usaba algunas túnicas sueltas encima no se notaría mucho, no era muy diferente de sus túnicas habituales, solo tendría que conseguir un par de pantalones para el juego y sería perfecto.

Y de esa manera,el atardecer ya estaba mostrándose, Xie Lian se sentía extremadamente cansado y no pudo evitar soltar un bostezo mientras lentamente se sentaba en un banco en medio de las calles.

Terminaron por comprar 5 juegos de ropa que podría usar durante todo su embarazo, debido a que estaban bastantes sueltos, además de un par de pantalones con un elástico muy flexible, no pudo aguantar y llevaba uno de esos pantalones puestos en ese momento, pudo sentir como un peso se liberaba sobre su vientre.

No había notado que caminaron tanto hasta ese momento donde podía sentir como sus pies zumbaban y sus ojos se cerraban.

"¿Cansado?" 

Xie Lian asintió con la cabeza: "Creo que este bebe tuyo está absorbiendo toda mi fuerza, quizás drena toda mi energía como su padre" Hua Cheng le dedicó una sonrisa de dulzura y se sentó junto a él, con cuidado apoyo la cabeza de su amado en su hombro y pasó su brazo entre su cintura, no pasó mucho cuando las respiraciones del dios se atenuaron y cayó dormido.

Con un ruido constante apareció un carruaje frente a la pareja, los esqueletos estaban felices de ser llamados y tarareaban al llegar, Hua Cheng tomo suavemente al dios en sus brazos y montaron juntos en el carruaje.

En el camino se dedicó por completo a masajear sus doloridos pies mientras Xie Lian se encontraba en un profundo sueño, no despertó a pesar de todo el movimiento por la rápida velocidad del vehículo, así llegaron a la ciudad fantasma antes del anochecer.

Una pequeña multitud de fantasmas se reunían afuera de la mansión esperando su llegada, los últimos días no habían podido ver a Daozhang y estaban muy preocupados por su salud y la del pequeño príncipe, llevaban algunos dulces humanos con ellos para ofrecerlos cuando llegara.

El supremo bajo del vehículo con el dios en sus brazos, los fantasmas estaban a punto de hacer un escándalo cuando notaron al pequeño humano dormido en los brazos de Chengzhu, con un dedo en los labios el rey fantasma los incitó a no hacer ningún sonido, y de esa manera todos los pequeños fantasmas cubrieron sus bocas, algunos más de una, y asintieron, dejando sus obsequios en la entrada y marchándose felices después de apreciar tan tierna escena.

Cuando Xie Lian despertó el sol ya estaba completamente oculto y su habitación estaba cubierta por la totalidad obscuridad, sus pies ya no dolían y se sentía refrescado, un olor dulce lo despertó, buscando el origen de ello notó un plato de gachas humeantes.

Se incorporó lentamente con una suave sonrisa en su rostro, no había rastro de Hua Cheng cerca pero esa tenía que ser su obra, devoró el plato y al terminar se alistó para levantarse y buscarlo.

Los últimos días el rey fantasma no se apartaba del lado de Xie Lian, por lo que los asuntos del reino se encontraban descuidados, y tal y como suponía se encontraba en su estudio con unas notas en sus manos, Yin Yu había sido remplazado por otro fantasma que después de recibir unas cuantas ordenes se alejó sin hacer ruido.

Xie Lian se encontraba en el marco de la puerta admirando el hermoso perfil de Hua Cheng cuando él notando su mirada le regresó una sonrisa brillante, con solo ese gesto el rostro del dios estallaba en un carmesí intenso.

"Yo, quería darte las gracias por hoy, San Lang, lamento haberte gritado antes, no se que ocurre con mis emociones"

Hua Cheng ya estaba a su lado y antes de poder terminar sus palabras su mandíbula estaba siendo sostenida para mirarlo directamente a ese ojo lleno de amor.

"Creo que tus cambios de humor es en parte mi culpa, no puedo molestarme por ello" Xie Lian soltó un suspiro contenido junto con una risa juguetona.

El dios se levantó sobre sus puntas y le plantó un suave beso en los labios al fantasma: "Eso es un gracias por hoy"

"Sí Gege me recompensará así, entonces lo haré todos los días"



Las píldoras de los demonios, ¿Un príncipe fantasma?(HOB Hualian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora