«-Aquí tenéis a una pareja sádica siendo ositos cariñositos.
Me dije a mi misma hoy, si hice al Luzuplay más tóxico que Chernobyl, ¿Por que no podría hacer eso a la inversa con el Mangelito?
; Cabe aclarar que:
-No todo tiene que ver con sucesos que...
(Ah sí, Declaración es la continuación de infancia-)
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—¿Tu crees que esto me queda bien?— preguntó el pelirrojo dando vueltas en el espejo para ver el atuendo que llevaba. El castaño rodó los ojos, ya era la quinta vez que le preguntaba lo mismo en la hora que estaban en la tienda. —Te queda Perfecto Lolo, ¿Por que estas tan inseguro?— el pelirrojo frunció el ceño. —Tal vez...¡SEA POR QUE ESTOY EN EL JODIDO DÍA DE MI BODA POR DIOS!— habló frustrado apoyándose de espaldas sobre el espejo cayendo lentamente hasta esconderse en sus rodillas.
—Eres mas melodramático que yo cuando me declaré a Rubén, ¡Que ya estamos grandes hombre!— respondió decepcionado Borja ayudando a Manuel a pararse, pero lo único que logró es que este se arrastrase ante el agarre. —No es el fin del mundo, gilipollas.— sus ojos se posaron en los del contrario ya con tristeza por su nerviosismo, solo salió del vestidor esperando a que se pusiese su ropa habitual para salir de la tienda.
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[...]
—¿No te ha bastado con la despedida de soltero? Te veías feliz ayer y siempre deseaste casarte con el desde que estamos en Oregon...— el no respondió sólo rindiéndose ante la verdad, y no es que el ya no quería casarse, el problema era el nerviosismo e inseguridad que le atormentaba en esos momentos.
En un día de completo frío, estaba que nevaba pero el clima se arrepintió de arruinar la boda de los dos chicos. Aquel bello lago congelado en donde juraron una linda amistad, claramente terminarían la amistad en donde la comenzaron, ahora siendo algo más cariñoso y precioso como una flor en un jardín desolado. Las hojas de los arboles cristalizadas por la fina capa de agua congelada que tenían encima, y las ramas crujían con el viento. Las lindas flores blancas por los asientos en frente de el lago y altar, y como un tierno detalle, la madre de Ángel esperaba su llegada con el conejito de los dos chicos, llamado igual como el mencionado.
