triste veneno

331 41 6
                                    

La batalla se acercaba, todos lo tenían presente, unos cuantos no sabían como reaccionar, casi todos estaban estresados, algunos cazadores renunciaron para evitar su muerte o por razones mas nobles como tener hijos y familia que cuidar, otros empezaron a entrenar mas duro, pero muchos lloraron ya sea en silencio o en compañía. 

Yoso Fumiko se entristeció en muchas ocasiones, cuando hablo con Muichiro y acordaron que si ambos morían Kichiro quedaría a manos de los Kamado y si solo el moría ella se podía quedar a vivir en su finca, al acompañar a Shinobu cuando bebió su veneno de glicinas, cuando Obanai le dijo que no le había confesado su amor a Kanroji y que probablemente no lo haga, cuando la pelirosa se resigno a que su sueño de casarse tal vez no se haga realidad en esta vida, se entristeció al aceptar que tal vez ella y Genya fallezcan sin haber hecho las paces con sus hermanos o que Tanjiro tal vez nunca pueda ver a Nezuko humana.

Ella no acostumbra a llorar mucho, no le gusta, pero desde que se unió al trió de amigos llora bastante seguido según ella pues el pelirrojo dice que es lo normal o hasta poco, ella tiene claro que Zenitsu llora mucho mas y que no se le puede considerar una sentimental, pero en toda su vida no había tenido por que llorar o por el contrario no podía expresar sus emociones por lo que llorar unas 5 veces en un lapso de casi un año le pareció una locura. 

No recordaba la ultima vez que lloro y su madre la consoló

 ...su madre

 Yoso Natagawa era de verdad una mujer hermosa, también era albina solo que por completo y sus ojos eran de un precioso azul opaco con unas pequeñas manchas verdes, a diferencia de Fumiko su madre nació enfermiza y delicada pero eso nunca le quito lo persistente que era, ella era una mujer terca y muy inteligente al no poder defenderse con fuerza bruta lo hacia con palabras y de una forma que llegaba a ser elegante pero eso no significaba que se creía superior a los demás, la mujer era muy amable y amorosa por lo que la gente se sorprendía al ver lo fría que había salido su hija mayor, la primera vez que la pequeña Fumiko esbozo una sonrisa fue cuando vio a su hermanita por primer vez.

Ella fue una bebe que no sonrió hasta un año después de su nacimiento, cosa que sorprendió a toda la aldea pues su madre y su padre eran amorosos y casi nunca borraban sus amables sonrisas, pero desde que la pequeña era una recién nacida su cara casi siempre estaba seria o adormilada, ni con las caras mas graciosas lograban hacerla sonreír y que nadie intente hacerle cosquillas a la niña pues lo único que ganarían seria un potente ceño fruncido y en casos extremos un llanto de molestia pues si, Fumiko aborrece las cosquillas y las a llegado a catalogar como la peor de las torturas.  

Natagawa al pasar mucho tiempo en casa, acostumbraba a cocinar mucho, tenia una preferencia notable por los dulces por lo que era común que su casa tuviera una agradable fragancia y las niñas siempre tuvieran postre luego de cada comida, era sabido que los Yoso tenían ascendencia china por lo que no era raro que algunas de sus tradiciones se mantuvieran, como su escudo familiar que era un gran dragón chino dorado que todos en la aldea tenían gravados en sus puertas principales, las cuales siempre eran rojas.

Natagawa al pasar mucho tiempo en casa, acostumbraba a cocinar mucho, tenia una preferencia notable por los dulces por lo que era común que su casa tuviera una agradable fragancia y las niñas siempre tuvieran postre luego de cada comida, era sabid...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Glicinas de Invierno: Fuyu no FujiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora