trigésima segunda nota

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Mel, 

nuestros momentos juntos, 

eran fantasticos. 

Eras como una luciernaga, 

necesitabas la noche 

para encenderte, 

para que te notasen. 

Si no te confundian 

con cualquier otro animal 

o peor, insecto. 

Y para mi eras unica. 

☪Notas para ella... ☹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora