Finnick y annie/ los juegos del hambre

capítulo 13

De a poco comienzo a despertarme aun me negaba abrir los ojos los mantuve cerrado por unos minutos más, hasta que lo hice pronto soy consciente que no estaba en mi casa y menos en la Venencia, era la de finnick había olvidarlo que había dormido aquí.

Levanto mi cuerpo y el no esta conmigo pensaba que había dormido aquí, pero creo que me equivoque, los recuerdos de anoche llegan a mi dios siempre decía que no tomaría y lo vuelvo hacer nunca aprendes Annie.

No pasa mucho tiempo hasta que la puerta habitación se abre, Finnick aparece en mi campo de vicion se encontraba con el cabello mojado y tenia puesto una remera color blanco junto short, estaba descanso.

- Duermes mucho, preciosa.- dice cuando nota que estoy despierta.

- ¿que hora es?- Le pregunto mirándolo.

- La una.- solo me responde en ese momento cuando obtengo la respuesta siento que me matarían mis padres.

- ¿Que? - hago una pausa- bromeas.- Digo de nuevo.

-ay algún problema no tienes escuela hoy o ahora se va a la escuela los domingos.- Me dice.

- !no¡ no tengo, pero tengo que irme a casa, me matan  si no llego en un momento o me castigarán.- Terminó por decir.

- entiendo,- me dice y luego señala hacia un lugar.- Tu ropa esta en la silla.- Entonces sale de la habitación, para que pueda cambiarme.

No tardo mucho primero me saco la remara que me presto finnick anoche y la dejo e la cama para luego colocarme la mía y por ultimo me coloco la falda, en es momento finnick toca la puerta y me pregunta si puede pasar y le digo que si.

- Gracias por dejarme quedarme.-Digo mientras me siento un rato e la cama para ponerme mis zapatillas.

- Puedes volver cuando quieras annie.- se sienta a lado de mi y nos quedamos mirando por un momento.

comienza hablar de nuevo -No me gusta las etiquetas y es tonto lo que te voy a pedir porque mucha gente no podría saberlo para evitar daños, pero me importas Annie- tenia una sonrisa de nervioso.- ¿ quieres ser mi novia?.- me pregunta realmente no me esperaba esa pregunta y mucho menos que eso podría salir de a Finnick.

- El señor finnick odiar quiero una formalidad chica del distrito cuatro.- digo en tono burla sabia que lo molestaria.

- Es la más hermosa de toda la nación creo que esta justificado.- me mira a los ojos, diablos Finnick si que sabia como ponerme nerviosa a veces.

No tenía que pensar mi respuesta lo quería lo hacía demasiado y conocía como era sabia que no haria nada para dañar a proposito.- si quiero ser tu novia.- le digo, el sonríe ante mi respuesta  y yo de inmediato hago lo mismo.

En ese momento nos besamos, sabia que seria dificil pero como dijo venencia valía la pena arriesgarse para ser feliz y Finnick me hacía feliz.

- - te quiero- le digo él me abraza fuerte en ese momento.

- yo tambien- escuche que me dijo mientras seguia abrazandome odiaba cortar el momento pero tenía que ir a casa lo más rápido posible y aun me faltaba pasar por la casa de venencia a buscar mis cosas.

- tengo que irme hablamos después si.- le digo cuando dejamos de abrazarnos.

- De acuerdo, cuidate mucho.- me dice- aprovechemos para que salgas ahora que todos estaran almorzando asi no te ven.- me dice, pero antes de salir de su casa nos besamos de nuevo.

Salgo de la casa de finnick, doy un par de miradas para asegurarme que no había nadie, cuando lo verificó comienzo a caminar hasta la puerta de la aldea, abro la reja y salgo lo mas rapido que puedo cuando estoy suficiente lejos comienzo a relajarme caminando normal.

Primero me dirijo a la casa de Venencia a buscar mis cosas espero que ella había llegado si no no sabría que haría mi padre me matarian i me ven llegar con esta ropa.

Tan solo faltaba dos casa para llegar apena veo su casa distingo si suelta afuera de su casa eso era una buena noticia al menos estaba viva.

- donde estuviste sabes lo que me preocupo por ti, casi voy a tucasa- me dice en un tono preocupada, tenia un aspecto terrible seguro que yo me veia igual.

- y tu te espere pero no llegabas.- le digo 

- estaba durmiendo en lo tobias- me dice hace una pausa.- lo siento annie, entra por tus cosas.

cuando entre a su cuarto convence a cambiarme por la ropa que había traido cuando llegue

-hable con finnick.- suelto de la nada, ella tan solo se quedo viendome soprendida

- cierto que estaba alli anoche, y que paso un momento¿ te quedaste con el anoche no?- se acuesta en su cama mientras aun yo me seguia cambiando.- cuentame todo.

- lo mas importante es que me prepuso ser su novia.- venecia en ese momento tira un grito de emoción mi mejor amiga era un poco dramatica pero la amaba.

- ¿que le dijiste?.- Me pregunta de inmediato

- que si.- le respondo mientras me ponía mi buzo que me iba enorme.

- annies esto es genial el te hace feliz así que estoy contenta por vos- Me comenta.

- como sabes nada de esto a nadie.- Le digo 

- oh descuida soy un tumba con ese tema y lo sabes no se lo diré a nadie.- Me confirma era la verdad venencia era una amiga fiel.

- te ves terrible.- Le comento finalmente.

- tu no quedas atrás annie.- Me comenta también y ese momento ambas nos miramos al espejo realmente necesitábamos dormir ambas.

Luego de esa charla, fui hasta mi casa con mis padres había quedado almorzar con ello así que no podía quedarme muchos tiempo.

Mientras caminaba así a casa pensaba en todas las cosas que había sucedido casi nos atrapan anoche puedo haber pasado algo terrible pero por suerte no fue asi, tambien pense en Finnick  no entendía por qué le había dicho que si, realmente si lo sabia no lo habia pensado solo hice lo que sentí en el momento, pero si me lo ponía pensar nuestra relación seria demasiado complicada espero que no lo sea tanto como me lo imagino igualmente estaba contenta por lo que había sucedido.

LLegue a mi casa, así que entre  de inmediato veo a mi madre ella me saluda.

- Annie te extrañe hija.- su cara cambia cuando ve mi cara.- no dormiste mucho anoche.- Me dice.

- venecia y yo nos quedamos hablando y viendo una película hasta tarde sabes como es esto.- le comento mientras ambas caminamos hacia la cocina.

- Me alegro que le hayas pasado bien, vamos a almorzar te estabamos esperando.- ambas seguimos caminando hasta la mesa donde se encontraba mi padre junto a mi hermano.