Extravagante. (Thiam)

Diez.

El silencio.

—Ni siquiera sé porque pensé que habíamos mejorado.

—Me importa una mierda, Liam.

Él sonrió sin emoción alguna.

—Imbecil.

Pero el otro ya estaba lejos.

[Horas antes.]

Ambos entraron a paso lento. A lo lejos Emma los veía llegar. Estaban en otra mesa a la usual.

Lo extraño no era su tarde llegada al lugar. Era sin duda la forma en la que todos los miraban, algunos con mas disimulo que otros.

No solo miraban a un castaño con rostro serio y sus ojos hermosamente azulados. Su forma tan segura de caminar. Cómo si ya supiera que podría tener el mundo a sus pies.

No, tambien miraban al rubio a su lado. Sus ojos curiosos y una pequeña sonrisa al verlos a lo lejos. Su cabello con algunas ondas y revuelto. Liam.

La diferencia de altura no era mas que algunos —muchos— centímetros.

A Liam tampoco lo ayudaba su apariencia. Era más pequeño, sus rasgos lindos, su pequeña nariz o sus labios rosados. Sus bonitas mejillas y pecas adornandolas. No tiene largas pestañas como Theo pero aún así combinan con su rostro. Dos personas totalmente comunes. O eso crees hasta que alguno de los dos habla.

Ambos que deberían pasar desapercibidos en esa gran escuela, no lo hacen.

Theo por su parte, todo en él llama la atención. Su apariencia y esa aura misteriosa. Y no olvidemos su forma ácida o violenta de responder. Ya sea verbalmente o físicamente.

En cambio Liam lo hace por la forma en la que actúa. Cuándo se metió para detener una pelea, cuando habló con Asher con tanta seguridad, no solo en el almuerzo si no en su propia clase. Las miradas que envía, las peleas con el castaño por cualquier cosa. Y lo más reciente, lo sucedido con el profesor. Ambos tienen demasiada personalidad.

Todos conocen a ese señor, y la noticia viajó con rapidez por los cursos. Siempre había sido así.

Alysa los vio decir algunas palabras en susurros a lo lejos. Le hubiera encantado tener oídos que escuchen a la distancia.

A unos metros Liam susurraba —¿Es mi impresión o todos te están mirando?

El castaño movió los ojos notando lo dicho. Solo pensaba en comer.
—No me están viendo solo a mí.

Sus pies hicieron una breve pausa. Luego le siguió el ritmo a Theo.

—¿Por qué me estarían viendo a mí?

Revisó su ropa en busca de algo que causé lo dicho. No sentía nada en su rostro. ¿Tendría algo?

¿Por que diría tal cosa? Es consciente de que no hay nada especial en él. No tiene los increíbles ojos del castaño, no se viste tan genial como Danny. ¿Entonces?¿Hay algo de lo que se está perdiendo?¿Lo miraban para burlarse o algo por el estilo?

Entiende que hay algunas personas a su alrededor que estan destinadas a brillar y atraer a todos. Pero él no.

Él no puede ser mas simple y común.
No es bueno en deportes y no es tan listo como quisiera. A veces piensa demasiado y otras veces actúa impulsivamente. Siente cada sensación de gran manera, no existe una parte de él que no sienta intensamente. Es un poco distraído o despistado.

¡Ha chocado con las mesas mas veces de las que puede contar!

Entiende que considerando lo atractivo que es el otro, y sus actitudes poco razonables, recibe miradas. Muchas.