013 [os]

1.5K 38 3
                                    


Criminal.


Las manecillas en mi muñeca apuntaron las cuatro en punto.

Al instante, los nervios ya instalados en mi cuerpo se agitaron, mi corazón latió como un loco y mi boca se secó aún más. Sentado en la entrada pude sentir como el aire abandona mis pulmones, mi sangre corre. Es primavera y la luz golpea mi piel, la brisa es cálida, el cielo es claro.

Puedo ver la camioneta frente a mí y dentro está ella. Muerde sus uñas y mira una y otra vez por el espejo retrovisor. Sé que más de una vez quiso detenerme, a mí ... y a ella misma. Odia la sola idea de sumergirme en esto y se odia por necesitarlo. Si no lo hubiéramos intentado ya de todas las formas posibles esto que hacemos ahora parecería tan ridículo. Aferrados a lo imposible llegamos al extremo de nuestras vidas.

¿Tanto lo queremos? ¿Tanto queremos conservar ese algo tan nuestro?

Odio imaginarlo, odio imaginar días sin su presencia, volvernos recuerdo. Odio el miedo, odio abrazarme a ella cada noche y temer porque cada caricia pueda ser la última. Una mañana, puedo despertar una mañana y descubrirla a mi lado, fría, muerta. No, me rehúso a olvidar su aroma, su piel, su risa, su voz. No puedo.

Ella...bueno, ella detesta cada parte de esto. Detesta ver su vida marcada, su futuro frenado, sus sueños arrebatados. Describirlo es tan complejo. Cuando la miro entiendo todo, cómo estando tan rotos nos sentimos tan vivos. Podemos tomar el auto y buscar el peligro, arriesgarlo todo, salvarnos. Rompería todas las reglas, apostaría todo.

Eso hacemos.

Ya vienen

Están cerca

Pasan los minutos y no puedo más, cada segundo me hace pensar que algo saldrá mal, somos muy jóvenes para ir a prisión.

Pánico.

Por fin aparece, una furgoneta negra da vuelta por la calle y avanza hasta nosotros, miro a Hye.

Es hora

Estacionada, todo es silencioso por unos segundos y luego se abre. Tipos con armas y olor a muerte, cubren sus caras con tatuajes y expresiones sucias.

Es momento de ser un chico malo.

Uno de ellos se acerca a mí, tengo lo que quieren, el trabajo está hecho. De entre todos ellos solo puedo reconocerlo a él, está al mando.

Del bolso de mis jeans saco una llave, la extiendo y antes de que la tome logro apartar mi mano.

—El dinero, primero el dinero — practique toda la noche.

—Tendrás tu dinero cuando tenga lo que quiero

—La llave tiene precio, lo que quieres está dentro

Intercambian miradas y finalmente asienten, hacen una seña con la mano y de la furgoneta sale un sujeto más, en sus manos lleva una bolsa. Mi bolsa.

Yoongi Reactions || OneShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora