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[El inicio del fin.]

[Pt. 2]

[Final.]
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ー Bajad las armas, todos.

Los agentes estaban perplejos ante la situación actual, joder, tenían a uno de los suyos y no podían hacer nada. El silencio reinaba en las calles de Los Santos, ya no se escuchaban explosiones ni disparos, ahora la única preocupación era el oficial sobre el tejado siendo apuntado.

Cualquier movimiento en falso significaría la muerte para Ivanov.

Todos bajaron sus armas a regañadientes, era frustrante ver esa escena y no poder hacer nada, la vida de su compañero dependía de sus acciones. Se escucharon suaves maldiciones por parte de los agentes, seguido del sordo estruendo de las armas cayendo en el suelo, ahora todos estaban desprotegidos.

Conway fue el último en bajar su arma, tirándola con rabia sobre la acera y levantando sus manos, caminando unos cuantos pasos delante de su equipo. La adrenalina y nerviosismo recorría su cuerpo, como pequeños choques eléctricos. Su mente estaba en blanco, no podía pensar en nada y eso era un problema para él.

Sus sentimientos le estaban jugando en contra.

Mierda, ni siquiera habían fisuras para que pudiera atacar, cualquier paso en falso y su chico estaba muerto.

¡Está bien, suelta a Ivanov! ー Gritó con fuerza, esperando que el calavera le escuchara desde esa distancia. Mordió internamente su mejilla cuando una fuerte carcajada se hizo presente en el ambiente, haciendo que su rabia aumentara. El hijo de puta se estaba riendo. ー ¡Joder, suéltalo!

ー ¡¿Crees que es así de fácil?! ー Preguntó por el megáfono el de máscara, volviendo a reír. ー ¡Mataste a Armando y lo vas a pagar! ¡Mataste a uno de los míos, entonces yo mato a uno de los tuyos! ーDijo apuntando directamente en la sien de Ivanov, haciendo que la cabeza de este se moviera levemente ante la presión.

ー¡Está vivo, gilipollas! ー Gritó sin opción, no le quedaba de otra que decir la verdad. Debía salvar a su pareja como fuera. ー ¡Él está de puta madre en comisaría!

Nuevamente el silencio reinó.

Desde su posición pudo observar como uno de los enmascarados del extremo se movía, caminando cuidadosamente hasta el del medio. Sabía que estaban hablando y por lo que alcanzaba a visibilizar, tal parecía que las cosas se estaban calmando.

O al menos eso era lo que esperaba.

Después de todo, ya había utilizado su única carta.

Su atención volvió a concentrarse en el calavera, viendo como este volvía a apuntar la cabeza de su agente. Gruñó por lo bajo, no estaban dispuestos a negociar y lo sabía, pero ¿por qué? Era tan simple como ir por Armando e intercambiarlo por Ivanov.

Se están moviendo. ー Susurró uno de los agentes tras él.

Pudo confirmar las palabras de este cuando los cuatro enmascarados restantes desaparecieron de su vista, quedando sólo en el tejado el de calavera e Ivanov, arrodillado justo en el borde de este.

Retrocedió unos pasos cuando notó la presencia de los demás en la acera del frente, todos apuntando con sus armas. Maldijo por lo bajo, sin moverse de su posición, estaba totalmente expuesto en ese momento.

Lo tenían acorralado.

Por un lado, tenía a Ivanov siendo apuntado, mientras que, por el otro, estaba la vida de todos los demás agentes. Si hacía algo, pondría la vida de los suyos en peligro, su mejor opción en ese momento era acatar las órdenes que ese imbécil le daba.

сложное триоDonde viven las historias. Descúbrelo ahora