El don

CAPÍTULO 5- Que fuerte

Me despertaron los quejidos de Kim, que seguía tumbada en su cama.

-Odio mi vida…- gruñó.

Me reí ante su comentario.

-¡Hey! ¿De qué te ríes?- cogió una almohada y me la lanzó-. Me duele todo y la cabeza me da vueltas y vueltas… No voy a volver a beber en mi vida…

-Ya bueno, eso no te lo crees ni tú.

-Vale, en eso tienes razón… Tú, levanta el culo y tráeme una aspirina ya; y por favor, no hagas ruido.

Me levanté y cogí la aspirina, se la entregué a Kim y caminé hacia el baño.

-Voy a ducharme; ¿cuál es tu plan de hoy?

-Pudrirme en la cama… Es domingo y no pienso hacer, y enfatizo en la palabra, nada.

-Me queda claro- reí y me metí en el baño.

(…)

Quince minutos después salí de la ducha y me encontré, como no, a Kim tumbada en la cama.

-Ya sé que tienes resaca, pero al menos podrías salir de la cama y darte una ducha; apestas.

-Gracias por la sinceridad- gruñó.

Se levantó con cuidado y fue hacia el baño. Mientras que se duchaba me puse a repasar algunos apuntes de diferentes asignaturas para matar el tiempo pero no me podía centrar; no paraba de darle vueltas a lo que pasó la noche anterior. Scott, el chico que me gusta desde que empecé la universidad, ¡me había besado!

Estuve tan metida en mis pensamientos que no escuché a Kim llamarme.

-Megan no me hagas gritar- dijo tumbándose en la cama-, me mata la cabeza…

-Lo siento, estaba distraída; ¿qué decías?

-Que si te pasa algo; estas como en otra galaxia.

Me mordí la lengua y se lo conté.

-Seguramente no te acordarás de quién nos trajo ayer a la uni.

-¿No condujiste tú?

-No tengo carnet genia- dije rodando los ojos-. Ayer Scott se ofreció a llevarnos.

-¿Qué…?

-Y después de dejarte en la cama, salimos al pasillo y… y me besó.

-¡¿Que te besó?!- se llevó una mano a la cabeza- Mierda, no debería de haber gritado. Tía es genial, ¿cómo fue?

-¡No te voy a dar detalles del beso pervertida!

-Jope… ¿Ni un poquito?- dijo Verónica de repente.

-Verónica, te voy a acabar echando yo misma de aquí si sigues dándome esos sustos.
-No puedes- dijo con superioridad.

-No lo sabes.

Me miró con los ojos entreabiertos.

-Bueno, de todas formas ya me lo imagino- me dio la espalda, colocó sus brazos de manera que parecía que alguien la estaba abrazando y comenzó a moverse como si se estuviera morreando-. Ay Scott, te amo- puso voz de hombre-. Yo también te amo Megan.

Aparté la vista.

-Dios, por favor para; creo que voy a tener pesadillas.

-Estoy demasiado resacosa para preguntarte qué ha hecho esta vez- soltó Kim.

-Tú sólo sigue durmiendo, no querrás saberlo.

-¡No seas tan exagerada! Sé que te ha gustado mi actuación.

-No para nada, de hecho cr-

Los ronquidos sonoros de Kim inundaron la habitación, impidiéndome acabar la frase.

-Sí que estaba cansada- dije riendo.

-Vamos a dejarla dormir, ¿te apetece ir a la cafetería de la plaza?- sugirió Vero.

-Me parece bien, estoy hambrienta.

Le mandé un mensaje a Kim avisándola de que iría a desayunar fuera y me marché junto a Verónica.
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Capítulo un poco relleno lo admito, pero eh, siempre tiene que haber alguno así :)

¡Por cierto! QUE NO HE HABLADO DE EL BESOOO. Scott y Hope prometen (o sea el es perfecto lmao😂); ¿qué pensáis? ¿Hacen bonita pareja?

Tengo una pregunta, ¿vosotros ya habéis empezado las clases? Yo las empezaré la semana que viene así que me costará más actualizar y esas cosas.

Un besazo a todos, Josie :^