El don

CAPÍTULO 18- Atrapada

Pov’s Hope

Me desperté un poco aturdida, me dolía mucho la cabeza y la luz de la habitación en la que estaba me dañaba la vista.

Cuando conseguí enfocarla, me di cuenta que estaba tumbada en una cama, pero mi tobillo derecho estaba amarrado con una cadena a los palos que sobresalían a los pies de esta.

Eran de esas antiguas de hierro forjado, así que tratar de soltarme iba a suponer todo un esfuerzo y todo un reto.

Aún así intenté tirar para soltarme, pero el metal era demasiado fuerte.

Miré por toda la habitación y no encontré ni rastro de Katherine.

-Katherine- susurré-. ¡Katherine! Donde estás cuando te necesito…

El ruido de pasos me alarmó y me hice la dormida, justo en el momento en el que alguien entraba en la habitación.

-Sé que estás despierta. No hace falta que finjas, no te haré nada… aún. Eso depende de tú comportamiento, por eso estás amarrada.

Esa voz… la había escuchado antes.

Pero era imposible, no podía… no podía ser él…

Abrí los ojos lentamente y me encontré con los últimos ojos que quería encontrarme, con esos ojos verdes que tanto me llamaron la atención la primera vez que los vi…

-No… No, dime que es una especie de-de broma- me costaba respirar y no conseguía que me salieran las palabras-. Tú no-no puedes haber…

-¿Matado a esas chicas? ¿Enserio no lo parece?- dijo Scott mientras cogía la silla del escritorio para acercarla a la cama y sentarse-. ¡Pues soy yo! ¿A que no te lo esperabas? Eso sí, te ayudé un poco a llegar hasta mí: lo del patrón, hablar con las víctimas por instagram, que Reiche viera “accidentalmente” mi anillo de la universidad… Aunque me sorprendió lo rápido que supiste lo de la cuenta y que fueras a la casa de… ¿cómo se llamaba? ¡Sí! De Katherine a por su ordenador.

La situación me parecía surrealista, mi mente se negaba a aceptar lo que estaba viendo y escuchando. No podía ser...

-¿Cómo has… cómo has podido Scott? Has matado a chicas inocentes…

-Fueron un contratiempo, nada más. Quería llamar tu atención y lo he conseguido. ¿Ves? ¡Todos ganamos! Yo doy un poco de drama a este pueblucho y tú y yo salimos juntos.

-Estás enfermo…

-¡No estoy enfermo!- gritó, haciéndome saltar del susto-. Lo siento, a veces no controlo mis ataques de ira. Estoy bien cariño- se levantó de la silla y caminó por la habitación-. ¿Sabes qué? Esta solía ser mi habitación- señaló al escritorio- Recuerdo cuántas veces papá me tumbaba boca el escritorio para pegarme con su cinturón- ahora señaló al baño-, o las horas que me pasaba en el baño para limpiar mis heridas abiertas…

-¿Tu-tu padre te pegaba?

Se rió y respondió:

-Mi padre era un ser despreciable, ¿sabes? Obligó a mi madre a casarse con él y la maltrató durante años. Luego me tuvo a mí, y siguieron los maltratos, pero esta vez con dos sacos de boxeo; uno destrozado tanto física como mental y emocionalmente, y otro de solo tres añitos. Lo único que me obligaba a seguir adelante era mi madre, mi protectora, mi guardiana… Mi madre era todo para mí, era mi mundo; siempre intentando defenderme y siempre ayudándome con lo que podía, claro.
    Después de aguantar años y años de insultos, palizas y moratones; una noche mi padre se pasó tanto con mi madre que no se levantó. ¿Y sabes lo que hizo mi padre? La dejó tirada en el suelo toda la noche para luego llamar a emergencias por la mañana y decir que era sonámbula y que la encontró tirada al pie de las escaleras. Eso me destrozó… ¡Ella me prometió que no me dejaría con ese… ese monstruo, pero lo hizo! ¡Se fue y yo pasé los peores años de mi vida!

Para aprovechar que estaba despistado contando su historia, intentaba buscar maneras de soltarme la cadena, pero era inútil.

-Un día, a los quince, decidí que de mayor quería ir a la universidad; empecé a ahorrar dinero a las espaldas de mi padre y por fin, a los diecisiete años ahorré el dinero suficiente. Ilusionado fui a contárselo a mi padre, sabía perfectamente que era un capullo, pero dentro de mí pensaba, deseaba que mi padre estuviese contento por mí, que me felicitara por mi trabajo y que me apoyara en la decisión. Que ingenuo fui.
   ¿Sabes lo que hizo cuando se lo dije? Me agarró por el cuello y me estampó contra la pared de la cocina, varias veces de hecho. Luego me dejó caer en el suelo, aturdido, se acercó a mí y me dijo que yo no saldría de esa casa hasta que él estuviese muerto; se levantó y se fue. Y entones fue ahí que pensé, ¿y por qué no acortar ese tiempo? Me levanté del suelo con dificultad, atravesé la cocina y agarré de un cajón un cuchillo, fui al salón con él escondido en mi espalda y me acerqué a mi padre. Le pedí disculpas por mi comportamiento y le dije que le haría caso, que no me iría hasta que el muriera, y entonces le clavé el cuchillo directo en el estómago.

No pude contener una exclamación.

Todas las historias que escuché sobre que su padre se suicidó eran mentira; él mató a su padre.

-Entonces me di cuenta que esa forma de matar me gustaba: ver como se retorcía de dolor en el suelo mientras se desangraba y saber que aun así iba a morir, era como… majestuoso. Y bueno, el resto de la historia ya la sabes.

-Dios Scott, podrías haber pedido ayuda, no… no matar a tu padre.

-¿Pedir ayuda? ¿Y quién me creería? ¡Nadie, nadie me hubiera creído! ¿Crees que no intenté escaparme alguna vez? Muchas, muchas veces; pero siempre me encontraba o me encontraba alguno de sus amigos, y siempre era lo mismo, me pegaba hasta dejarme casi inconsciente y se iba a dormir, como si nada. Entonces entendí que si quería sobrevivir tenía que buscar otra manera de salir, ¿no? Al final la encontré y ¡mírame ahora! ¡Soy libre!

-¿Y entonces por qué mataste a esas personas? Todo ese rollo de la apuñalada y la equis en la muñeca…

No sabía lo que Katherine y Vero estaban haciendo, las veía ir y venir todo el rato, pero creo que ninguna de ellas se atrevía a hablar en estos momentos. Cuando ya por fin pararon de ir y venir, Vero no estaba y Kate se sentó en la cama al lado mío:

-Todo va a estar bien…- dijo en susurro.

-No es verdad…- dije en susurro, pero Scott me oyó.

-¿Con quién estas hablando?

No le respondí y fijé mi vista en la pared.

Scott bufó y siguió con su historia:

-En el momento en que te vi entrar por la puerta de la universidad Hope, todo mi mundo volvió a tomar sentido, supe que tú me devolverías la alegría y me protegerías como me protegía mi madre. Pero al principio fuiste tímida, no te acercabas mucho a mí y eso me dolía. ¿Cómo podía llamar la atención del amor de mi vida para que hablara conmigo? Y es entonces cuando se me ocurrió, me haría pasar por un asesino en serie y así llamaría tu atención. No pensé que funcionaría, pero dos semanas después de pedirte una cita accediste a salir conmigo.

-¡Accedí a salir contigo porque me gustaba el Scott amable y simpático!

-Y sigo siendo yo mi amor, sólo lo he hecho porque quería un mundo feliz con la mujer a la que quiero. Borraremos estos momentos de nuestra cabeza y viviremos una vida perfecta, juntos.

-Scott, ¿te estás escuchando? ¡Amenazaste con matar a mis amigos, a mi familia! ¿Cómo voy a quererte así? ¿Cómo voy siquiera a mirarte a los ojos?

-Sí me quieres Hope, lo que pasa es que te cuesta admitirlo. Sé que es duro al principio pero lo superaremos juntos.

-No superaremos nada juntos porque no hay un nosotros Scott, ya no.

-No… no puedes dejarme... No puedes dejarme como lo hizo mi madre. ¡No!

Salió de la habitación dando un portazo y yo aproveché para intentar quitarme las cadenas.

Tras estar un rato intentándolo desistí:

-Es inútil Kathie.

-Tiene que haber una llave por algún lado- se puso a buscar por encima pero no encontró nada-. Tranquila, la policía está por llegar.

-¿Kim lo ha logrado?

-Vero me ha dicho que leyó la carta y llamó de inmediato a Liz.

Solté un suspiro de alivio, Kim me había salvado. Pero ese alivio se esfumó en cuanto Scott entró otra vez en la habitación con un cuchillo en la mano.

-No me gusta no cumplir mi palabra Hope, pero no me has dado otra opción; si no quieres estar conmigo, entonces no estarás con nadie más.

Y se acercó a la cama a pasos cortos.
~~~

BUENOOO
Pues ya lo sabéis, ¡ya sé ha destapado quién era el asesino!
¿Qué os ha parecido? ¿Os lo esperabais? Espero que os esté gustando porque aún no ha acabado... ¿Qué pasará con Hope? ¿Conseguirá Liz llegar a tiempo? Ya lo veréis después...

Por cierto, ¿qué tal vuestro Halloween? Yo ayer estuve todo el día estudiando, pero por la noche hice un maratón de pelis de terror en casa (con mi familia). Espero que al menos os lo pasarais bien :p

Y nada, seguid leyendo la historia que esto no se acaba aquí y que tengáis un buen domingo ;)

Josie💞