Pov’s Kim
Estaba saliendo del vestuario ya cambiada y preparada para subirme al coche y tomar mis “reservas” (suelo esconder bolsas de patatas o alguna que otra golosina en mi bolsa para después de los entrenamientos); pero hoy había algo diferente en el bolsillo.Entre las bolsas había una especie de papel, cuando lo abrí me quedé sin palabras:
“Kim, sé que me vas a odiar por esto pero no es momento de perder el tiempo en enfados: estoy en peligro.
Cuando encontramos el cuerpo de Reiche, éste llevaba consigo una carta en la que el asesino me citaba hoy mismo a las 18:30 en una ubicación que me mandaría en un número de teléfono inservible (ya que el móvil es de prepago). No os lo dije a ninguno ya que me amenazó con mataros si lo hacía.
Así que, si todo ha ido como lo previsto, tú estás leyendo esta carta y yo estoy en la ubicación marcada en tu teléfono; ya que sí, antes de irme hice una foto a la ubicación con tu móvil y lo escondí debajo de tu cama.
Avisa a la policía y cuéntale esto a Liz, contarás con su apoyo. Yo estaré con Katherine y Vero se hará cargo de que leas la nota por si no la encontraste desde un principio. Intentaré distraerle lo más que pueda mientras vosotros llegáis.
Te quiero mucho amiga, no lo olvides.
Hope.”
¿Era una puta broma? Porque no me daba gracia. Conduje rápidamente hacia la universidad y subí corriendo las escaleras hacia mi habitación.
Y es entonces cuando miré debajo de la cama y lo vi: mi móvil.
Lo desbloqueé y en la cámara salía la foto de una ubicación no muy lejos de aquí. Vale, tenía que calmarme, se supone que el asesino no sabe que yo sé esto, así que llamar a Hope sería arriesgado. Lo que haría primero es avisar a Liz, seguro que consigue ayuda de más policías.
Marqué el número de Elizabeth y llamé:
-Elizabeth Collins, ¿en qué puedo ayudarle?
-¡Liz soy yo, Kim!
-¡Kim! ¿Qué pasa, por qué gritas?- contestó alarmada.
-¡Es Hope, está en peligro!
-¿Cómo que está en peligro?
-¡Se ha reunido con el asesino Liz, me escribió una carta para que estuviera al tanto y así poder avisar a la policía!-¿¡Que ha hecho qué?! Dime que tienes la ubicación.
-¡La tengo! Tenéis que ayudarla Liz.
-Vale, mándame la ubicación. Avisaré a comisaría y mandaremos patrullas. Hope estará bien Kim, tranquila.
-Id rápido…
-Avisa a Trevor y quedaos en la universidad, ¿entendido?
-Entendido, suerte…- y colgó la llamada.
Estaba preocupada, preocupada y enfadada. Cuando Hope salga de esta me va a oír pero bien.
Avisé a Trebor, quien vino lo más rápido que pudo, y nos sentamos los dos en la cama.
De pronto, me vino algo a la cabeza.
-¿Vero? ¿Vero, estás ahí?
-¿Sabes que no te puede responder, verdad?
-Ya lo sé estúpido, pero Hope dijo que pueden mover cosas con la mente, por así decirlo- miré alrededor de la habitación y me paré en el armario-. Bien, si estás ahí abre la puerta del armario.
Tras unos segundos de espera, al final la puerta se abrió violentamente.
-¡Joder!- exclamó Trevor- Ha funcionado.
-V-vale, ahora te voy a hacer preguntas de sí o no, si es sí abres las dos puertas, y si es no, solo abres una- tome aire y pregunté- ¿Has visto a Hope ahora?
Las dos puertas se abrieron.
-Trevor, encárgate de cerrar las puertas una vez ella las haya abierto, por favor.
-Jo, qué pateo…
Se levantó y cerró las puertas del armario.
-Vale sigamos, ¿ha llegado ya la policía?
Sólo se abrió una puerta.
-Mierda… ¿Está Hope en peligro?
Dos puertas.
-¿Está herida?
Una puerta.
-Vale… ¿Sabes cómo es el asesino?
Dos puertas.
-Y… ¿lo conocemos?
Dos puertas.
~~~OMG AHHHH
Vaya capítulo, vaya capítulo. ¿Qué os parece? Me gustaría que me dijerais quién creéis que es el asesino, vuestras hipótesis y lo que creéis que va a pasar.
Estamos ya casi en el final y eso significa que (cuando acabe los exámenes) podré empezar una nueva historia. Con eso de que en navidades no se va a poder ir a ningún sitio por el coronavirus tendré tiempo para empezar una nueva historia.Por cierto, hablando del coronavirus, ¿cómo va en vuestro país? ¿Cómo están las cosas?
Bueno, aunque estemos pasando por un momento complicado espero que estéis sanos y que todo os vaya bien.
Besos, Josie.
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El don
Gizem / Gerilim-¡Adelaide! Esta es mi madre, Carolina. -Hope, ¿con quién estás hablando? -Con Adelaide, está aquí mami. -Hope... ahí no hay nadie. _____ ¿Sabéis eso que dice la gente de que en los pueblos pequeños nunca pasa nada? Pues eso cambiará en la vida de...