El don

CAPÍTULO 11- El mensaje

-Tenemos que intentar pillar al asesino- dijo Kim mientras caminábamos hacia nuestro cuarto-. Sabemos que va a la universidad, y sabemos que habla con sus víctimas desde una cuenta falsa antes de matarlas. Podemos intentar tenderle una trampa o algo así.

Al acercarnos a la puerta, un olor extraño inundó mis fosas nasales.

-¡Joder! ¿A qué huele?- preguntó Kim.

Pero justo al entrar el olor se intensificó aún más, obligándonos a taparnos la nariz.

-¿Qué narices? Huele como a muerto; ¿qué narices ha comido Trevor aquí?

-No creo que esto tenga que ver con Trevor…

De hecho, no solamente lo creía, sino lo sabía; ya que cuando miré a mi izquierda me encontré a Reiche, con la cara pálida y una expresión de terror.

-Reiche…

-Espera- interrumpió Kim-. ¿Reiche no era el que le hizo la cuenta al asesino?

-¿Me-me ves? ¿Cómo es posible?

-Una larga historia. Reiche por favor, dime que no es lo que estoy pensando…

Me miró con tristeza y giró su vista hacia el armario.

Me acerqué lentamente y, al abrir las puertas del armario, tuve que echarme atrás del olor a putrefacción y del susto, ya que de nuestro armario cayó el cuerpo de Reiche, con una puñalada en el abdomen y una cruz en la muñeca.

-¡Joder!- gritó Kim-. ¡L-la muñeca, t-tiene la equis! ¿Es…?

-Reiche, es Reiche…- tomé aire y seguí hablando- Llama a la madre de Trevor, Kim. Quiero que le cuentes sólo a ella lo que sabemos, incluido lo relacionado con Katherine y su aportación en nuestra investigación, así si estamos en peligro podrá ayudarnos. Para los demás, el asesino ha dejado un cuerpo en nuestro armario, ¿entendido?

-E-entendido- y salió del cuarto.

Al mirar otra vez el cuerpo sin vida de Reiche, me fijé en algo que no había, o que al menos no habíamos visto, en los otros cuerpos: en su pecho tenía una especie de nota pegada; me acerqué tapándome la nariz, y al coger la carta me di cuenta que pegado con celo había un teléfono móvil pequeño.

Me alejé del lugar la leí:

“Estoy muy asombrado mi pequeña Sherlock, averiguaste lo de mi cuenta no sé cómo y conseguiste la dirección de Reiche. Muy inteligente, pero a la vez muy estúpido. Yo me andaría con cuidado Hope, no sabes quién está observando todos tus pasos, o los de tus amigos…

Vamos a hacer una cosa, detrás de esta carta encontrarás un teléfono móvil pegado con celo (antes de que lo intentes, es un móvil de prepago, así que no podrás rastrearlo); en él encontrarás un único contacto marcado con una equis que será el mío. De esta manera podremos mantenernos en contacto, pero que sea nuestro secreto, no querrás que la dulce hermanita de Kim resulte herida en una de sus clases de hípica por un caballo asustado, o que la madre de Trevor sufra un accidente de tráfico mientras patrulla por el pueblo, o puedo ir a la consulta a hacerle una visita a tu padre… Bueno, creo que ya has captado el mensaje. A lo que quería llegar es que dentro de una semana, o sea el sábado 14, te enviaré una ubicación.

Te reunirás conmigo en esa localización a las 18:30 e irás sola. Y no me la intentes colar, os tengo bien vigilados a todos, así que como me entere que alguien va contigo, se juntará con Reiche y las dos chicas más. Y que no se te ocurra no ir, será peor. No quiero hacerte daño, de hecho me fascinas: tu manera de ser, tu belleza, tus secretos… Así que quédate tranquila, no te haré nada.

Espero que todo te haya quedado claro, hasta entonces:

×”

Era una locura, ahora mismo no sabía cómo reaccionar.

Vero y Kathie hablaron a mis espadas:

-Joder… ¿qué ha pasado aquí?- dijo Vero mirando el cuerpo sin vida de Reiche.

-El asesino ha pasado- respondió Katherine.

Y entonces se me encendió una bombilla; el asesino podría estar vigilando a mis amigos vivos, pero no a los muertos. Puse la carta en la cama y susurré:

-Leed.

Las chicas se miraron sin entender nada y se acercaron a la carta.

-¿Qué narices?

En el rato en que estaban leyendo, escuché las sirenas de policía fuera del recinto universitario, así que les metí prisa:

-¿Ya?

-Sí- respondió Kathie.

-¡Eh, yo aún no he acabado!

Pero cogí la carta y la guardé en el bolsillo.

Salí del cuarto y me encontré a Kim ya con la madre de Trevor, Elizabeth.

-Hope cariño, ¿cómo estás?

-No sé Liz, esto es… esto es más grande que cualquier cosa relacionada con muertos que he tenido que pasar.

-Kim me ha contado todo- bajó el volumen de su voz-. ¿Sabéis en los problemas que os hubierais metido si supiesen que habéis interferido en una investigación policial? Y por no hablar de vuestra seguridad, ¿cómo se te ocurre ir a visitar a un sospechoso de asesinato tu sola?

-Bueno, en teoría me acompañó Trevor, pero se quedó en el coche.

-Sí, pero Trevor no hubiera servido de mucha ayuda si te hubieran apuñalado dentro de esa casa.

-Después de todos los muertos que he visto Liz, ya no le tengo miedo a la muerte… Lo único que me importa ahora es encontrar al mal nacido que le ha quitado la vida a mi amiga y a esas dos personas inocentes.

-Tú no le tienes miedo a la muerte Hope, pero tus seres queridos sí, y a perderte también…

-Hope, necesito hablar contigo…

¡Reiche! Me había olvidado completamente de él.

-Kim, necesito un favor.

-L-lo que sea.

-Reiche quiere hablar conmigo, necesito que estés a mi lado para que la gente piense que estamos hablando.

-Claro, p-por supuesto.

Nos apartamos un poco, aprovechando que los policías estaban en nuestra habitación procesando la escena del crimen.

-Escúchame Hope- dijo Reiche-. Sé que nos conocemos de hace muy poco y joder ¡ves fantasmas! Pero eres una buena persona Hope, tienes que tener cuidado. No pude ver su cara, solo que llevaba una máscara negra con dos equis blancas en las mejillas. Y también leí la carta… ¡Es una locura! ¡Te estás metiendo en la boca del lobo!

-Pero no tengo otra opción... Lo atraparé Reiche, tenlo por seguro.

-No quiero que atraparlo signifique también tu muerte. Ya tengo el remordimiento de haberle ayudado a hacer la cuenta, no puedo añadir otra muerte a la lista.

-No fue tu culpa, no lo sabías. Y ya está hablado, no me harás cambiar de opinión.

Le encontraré, cueste lo que cueste.
~~~

Hola gentesita :^

Siento no haber actualizado ayer de verdad, pero es que no estuve en casa en casi todo el día.

¿Qué os parece el capítulo? Llamadme mean pero a mí me encanta (jajajajajja). El cuerpo en el armario, la nota (la nota me ha puesto los pelos de punta y la he escrito yo jajajja)... ¡Todo!

Sólo espero que os guste y que paséis una buena semanita de clases (o trabajo, o chill; no se vuestras vidas xd).

Por cierto, estamos a punto de llegar al reto que os puse de visualizaciones, ¡En nada sabréis mi nombre real!

Besitos, Josie :)